Un estudio ayuda a demostrar una teoría sobre la evolución de nuestra galaxia
20/12/2016 de Texas A&M University / Nature Astronomy
Imagen compuesta del gas molecular (señalado en rojo), superpuesta sobre imágenes del telescopio espacial Hubble de cuatro galaxias jóvenes similares a la Vía Láctea. Crédito: National Radio Astronomy Observatory.
Todo el mundo tiene un pasado, incluso nuestra galaxia, la Vía Láctea.Y al igual que ocurre con las redes sociales, la imagen no es siempre tan bonita como parece en la superficie, según el astrónomo Casey Papovich (Universidad de Texas A&M). Papovich señala que las grandes galaxias de disco como nuestra propia Vía Láctea no siempre han sido las estructuras espirales con forma de molinillo y bien ordenadas que vemos en el universo hoy en día. Por el contrario, él junto con otros expertos internacionales que están especializados en la formación y evolución de galaxias, piensan que hace entre 8 mil millones y 10 mil millones de años, los progenitores de la Vía Láctea y de las galaxias espirales de disco similares eran más pequeñas y menos organizadas, aunque muy activas en su juventud.
Utilizando el conjunto internacional de radiotelescopios ALMA, el equipo de investigadores ha estudiado cuatro versiones jóvenes de galaxias como la Vía Láctea que se encuentran a 9 mil millones de años-luz de distancia, lo que significa que podían observarlas tal como eran hace 9 mil millones de años aproximadamente. Descubrieron que cada galaxia era increíblemente rica en monóxido de carbono, un trazador bien conocido de gas molecular, que es el combustible para la formación de estrellas.
“Utilizamos ALMA para detectar versiones adolescentes de la Vía Láctea, encontrando que tales galaxias contienen, efectivamente, cantidades mucho más grandes de gas molecular, lo que alimentaría una rápida formación de estrellas”, afirma Papovich. “Comparo estas galaxias con un adolescente humano que consume cantidades prodigiosas de comida para alimentar su crecimiento durante su adolescencia”.
Aunque la abundancia relativa de gas formador de estrellas en estas galaxias es muy grande, Papovich afirma que no están completamente formadas aún y son bastante pequeñas en comparación con la Vía Láctea tal como la observamos hoy en día. Los nuevos datos de ALMA indican que la mayor parte de la masa de estas galaxias se encuentra en forma de gas frío en lugar de encontrarse en estrellas, una situación que se ha invertido en la actualidad en nuestra Vía Láctea, donde la masa contenida en las estrellas supera a la del gas en un factor 10 a 1. Estas observaciones están ayudando a completar la imagen de cómo evoluciona la materia en las galaxias del tamaño de la Vía Láctea y cómo se formó nuestra propia galaxia.