Telescopios de NASA encuentran cielos limpios y vapor de agua en un exoneptuno
25/9/2014 de Hubble site / Nature
Izquierda: impresión artística de la atmósfera de un planeta en el que nubes altas bloquean la vista e impiden la detección de moléculas. Derecha: impresión artística de la atmósfera de un planeta como HAT-P-11b, con una atmósfera que puede que tenga nubes a mayor profundidad, pero cuya región alta está libre de nubes. Esta buena visibilidad ha permitido a los investigadores detectar moléculas de vapor de agua en la atmósfera del planeta. Crédito: NASA, ESA, and R. Hurt (JPL-Caltech)
Los astrónomos han empleado tres telescopios de NASA (Hubble, Spitzer y Kepler) para descubrir cielos limpios y vapor de agua en un planeta gaseoso situado fuera de nuestro Sistema Solar. El planeta tiene el tamaño de Neptuno, lo que le convierte en el más pequeño en el que han sido detectadas moléculas de cualquier tipo.
“Este descubrimiento es un hito importante en el camino hacia el eventual análisis de la composición atmosférica de planetas rocosos más pequeños, más como la Tierra”, afirma John Grunsfeld, de NASA. “Tales logros son hoy en día posibles solo gracias a las habilidades combinadas de estos únicos y potentes observatorios”.
Las nubes en la atmósfera de los planetas pueden bloquear la observación de las moléculas que pueda haber debajo y que revelan información sobre la composición de los planetas y sus historias. Encontrar cielos limpios en un planeta del tamaño de Neptuno es una buena señal de que los planetas más pequeños podrían tener una visibilidad buena parecida.
El planeta, HAT-P-11b, es lo que se llama un exoneptuno, un planeta con el tamaño de Neptuno que está en órbita alrededor de una estrella que no es nuestro Sol. Está situado a 120 años-luz en la constelación del Cisne. A diferencia de nuestro Neptuno, este planeta está en órbita más cerca de su estrella, completando una vuelta aproximadamente cada cinco días. Es un mundo cálido que se piensa que posee un núcleo rocoso y una atmósfera gaseosa. No mucho más se sabía sobre la composición del planeta hasta ahora.