Telescopios de NASA ayudan a resolver el antiguo misterio de una supernova
25/10/2011 de JPL
Un misterio que se inició hace casi 2000 años, cuando los astrónomos chinos observaron lo que acabaría siendo una estrella que explotaba en el cielo, ha sido resuelto. Nuevas observaciones en el infrarrojo de Spitzer Space Telescope y Wide-field Infrared Survey Explorer, o WISE, revelan cómo ocurrió la primera supernova registrada en la historia y cómo sus restos se acabaron dispersando a grandes distancias.
El descubrimiento muestra que la explosión estelar se produjo en una cavidad, lo que permitió al material expulsado por la estrella viajar mucho más rápido y más lejos de lo que lo habría hecho en caso contrario.
La investigación revela que el evento es una supernova de tipo Ia, creada por la muerte relativamente pacífica de una estrella como nuestro sol, que se encogió entonces en una estrella densa llamada enanablanca. Se piensa que la enana blanca sufrió una explosión posterior como supernova después de arrebatar material de una estrella cercana.
Las observaciones también muestran por vez primera que la enana blanca puede crear una cavidad a su alrededor antes de explotar como una supernova de tipo Ia. Una cavidad explicaría el por qué los restos de RCW 86 son tan enormes. Cuando tuvo lugar la explosión, el material expulsado habría viajado sin impedimentos debidos al gas y polvo y se habría extendido rápidamente.