No detectan pulsos láser extraterrestres procedentes de KIC 8462852
11/12/2015 de SETI International / The Astrophysical Journal Letters
Ilustración de artista de la rotura de una esfera de Dyson alrededor de la estrella KIC 8462852. Crédito: Danielle Futselaar/SETI International.
La estrella anómala KIC 8462852 ha intrigado a los astrónomos con su cambio de brillo errático haciendo que algunos especulen que tiene en órbita una estructura masiva construida por una civilización extraterrestre. Para evaluar esta posibilidad, los científicos han buscado pulsos breves de láser procedentes de la estrella lejana, sin encontrar ninguno.
“La hipótesis de una megaestructura alrededor de KIC 8462852 se está viniendo abajo rápidamente”, afirma Douglas Vakoch, presidente de SETI International. “No encontramos ninguna prueba de que exista una civilización avanzada enviando señales láser intencionadas hacia la Tierra”, explica.
El experimento fue coordinado por SETI International, una nueva organización de investigación y educativa dedicada al desarrollo de estrategias innovadoras en astrobiología y la búsqueda de inteligencia extraterrestre (SETI de sus iniciales en inglés) incluyendo SETI Activo, en el que se envían señales intencionadas hacia otras estrellas para provocar una respuesta.
Durante seis noches entre el 29 de octubre y el 28 de noviembre de 2015 los científicos buscaron pulsos de hasta una mil millonésima de segundo en el Observatorio SETI Óptico de Boquete en Panamá, empleando un telescopio newtoniano de 0.5m. El telescopio relativamente pequeño del observatorio empleó un método de detección único que es especialmente sensible frente a las señales en forma de pulsos. Si unos hipotéticos extraterrestres hubieran dirigido pulsos intencionados de láser en el espectro visible hacia la Tierra, el Observatorio de Boquete podría haberlos detectado siempre que hubiesen superado el nivel mínimo detectable por el sistema. “Dada la gran distancia a KIC 8462852 de casi 1500 años-luz, una señal recibida hoy en día en la Tierra habría abandonado la estrella poco después de la caída del imperio romano”, comenta Marlin Schuetz, director del Observatorio de Boquete.
Durante las tres noches en que se realizaron las observaciones SETI desde Panamá, KIC 8462852 fue observada simultáneamente en señales de radio de banda estrecha con el AllenTelescope Array. Y como en el caso de las observaciones en el óptico, no se detectaron señales.