Los astrónomos, más cerca de explicar los misteriosos pulsos de radio rápidos del espacio exterior
3/12/2015 de University of British Columbia / Nature
Ilustración de artista de un estallido rápido en radio llegando a la Tierra. Los colores representan el brote llegando a dos longitudes de onda de radio diferentes. Fuente: University of British Columbia.
Los astrónomos han relacionado el origen de un estallido rápido en radio (Fast Radio Burst, FRB) con una región del espacio llena de gas altamente magnetizado. “Ahora sabemos que la energía de este brote en particular atravesó un campo denso magnetizado poco después de formarse”, afirma Kiyoshi Masui, astrónomo de la Universidad de Britsih Columbia y director del estudio publicado hoy en Nature. “Esto restringe de modo significativo el ambiente de la fuente y el tipo de fenómeno que produjo el estallido, y significa que el origen del pulso probablemente se encuentra dentro de una nebulosa de formación de estrellas o en el remanente de una supernova”.
Los estallidos rápidos en radio (FRB de sus iniciales en inglés) son brotes de energía del espacio que vemos como cortos destellos en ondas de radio con los telescopios de la Tierra y han intrigado a los astrónomos desde que se descubrieron hace una década. Aunque sólo han sido detectados 16, los científicos piensan de debería de haber miles de FRB al día.
El nuevo FRB recién descubierto fue encontrado con un software especial desarrollado por Masui y Jonathan Sievers de la Universidad de KwaZulu-Natal en Durban, Sudáfrica, que los busca entre los datos tomados durante observaciones astronómicas en radio. “Escondida entre un conjunto de datos increíblemente grande encontramos una señal muy peculiar que encajaba con todas las características conocidas de un FRB, pero con un extraño elemento extra que simplemente no habíamos visto antes”, afirma Jeffrey Peterson, de Carnegie Mellon.
Al estudiar con detalle los datos los investigadores descubrieron que el FRB mostraba rotación de Faraday, un giro como de sacacorchos que las ondas de radio adquieren cuando atraviesan un campo magnético potente. Los estudios adicionales de la señal revelaron que había pasado también por dos regiones diferentes de gas ionizado en su camino hacia la Tierra. La primera está muy cerca del origen del estallido (a menos de cien mil años-luz) probablemente dentro de la misma galaxia que la fuente. Sólo dos cosas podrían dejar esta huella en la señal: una nebulosa que rodeara la fuente o un centro galáctico.
El FRB, llamado FRB 110523, se originó a no más de 6 mil millones de años-luz de la Tierra.