La nave Juno de NASA rompe el récord de distancia con energía solar
19/1/2016 de JPL
Lanzada desde la Tierra en 2011, la nave espacial Juno llegará a Júpiter en 2016 para estudiar el planeta gigante desde una órbita polar elíptica. Juno se zambullirá repetidamente entre el planeta y sus cinturones de radiación de partículas cargadas, acercándose a sólo 5000 kilómetros de la parte superior de las capas de nubes. Crédito: NASA/JPL-Caltech.
La misión Juno a Júpiter de NASA se ha convertido en el emisario más lejano de la humanidad alimentado con energía solar. Este hito lo alcanzó el pasado miércoles 13 de enero, cuando Juno se encontraba a 793 millones de kilómetros del Sol. El récord anterior estaba en posesión de la nave Rosetta de la Agencia Espacial Europea (ESA) cuya órbita llegó hasta los 792 millones de kilómetros en octubre de 2012, durante su acercamiento al cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko.
“Juno consiste fundamentalmente en poner al límite la tecnología para ayudarnos a comprender nuestros orígenes”, afirma Scott Bolton, investigador principal de Juno en el Southwest Research Institute. “Emplearemos todas las técnicas conocidas para ver a través de las nubes de Júpiter y revelar los secretos que Júpiter esconde acerca de la historia temprana de nuestro Sistema Solar. Parece justo que el Sol esté ayudándonos a conocer el origen de Júpiter y de los demás planetas que tiene en órbita”.
Lanzada en 2011 Juno es la primera nave espacial alimentada con energía solar diseñada para operar a tan gran distancia del Sol. Esa es la razón por la cual el área de los paneles solares necesarios para generar suficiente electricidad es bastante grande. La nave Juno, de cuatro toneladas, transporta tres paneles solares de 9 metros de largo festoneados con 18 698 células solares individuales. A la distancia de la Tierra al Sol las células tienen el potencial de generar unos 14 kilovatios de electricidad. Pero transportar esos mismos rectángulos de silicio y arseniuro de galio a la quinta roca en distancia al Sol es una historia muy diferente.
“Júpiter está cinco veces más lejos del Sol que la Tierra y la luz solar que llega tan lejos transporta 25 veces menos energía”, comenta Rick Nybakken. “Aunque nuestros enormes paneles solares generarán solo 500 vatios cuando estemos en Júpiter, Juno está diseñada de modo muy eficiente y será más que suficiente para realizar el trabajo”.
Antes de Juno ocho naves espaciales han navegado por la fría y apenas iluminada realidad del espacio profundo hasta Júpiter. Todas ellas usaban fuentes de energía nuclear. La energía solar es posible en Juno gracias a mejoras en el funcionamiento de las células solares, unos instrumentos y nave energéticamente eficientes, un diseño de la misión que evita la sombra de Júpiter y una órbita polar que minimiza la radiación total.
Juno llegará a Júpiter el 14 de julio de 2016.