El Universo observable contiene diez veces más galaxias de lo que se pensaba
14/10/2016 de ESA Hubble / Astrophysical Journal
Esta imagen fue tomada por el telescopio espacial Hubble de NASA/ESA y cubre parte del campo sur del proyecto GOODS (Great Observatories Origins Deep Survey). Se trata de un gran censo de galaxias, un estudio del espacio profundo llevado a cabo por varios observatorios para investigar la formación y evolución de las galaxias. Crédito: NASA, ESA/Hubble.
Un equipo de astrónomos ha empleado el telescopio espacial Hubble de NASA/ESA y otros telescopios para crear un censo preciso del número de galaxias que contiene el Universo. Los investigadores alcanzaron la sorprendente conclusión de que hay por lo menos 10 veces más galaxias en el Universo observable de lo que se pensaba. Los resultados tienen consecuencias claras para nuestra comprensión de la formación de galaxias y también ayudan a los científicos a resolver una antigua paradoja astronómica: ¿por qué el cielo es oscuro por la noche?
Christopher Conselice (University of Nottingham, UK) y su equipo han estudiado imágenes del espacio profundo del Hubble y otros datos publicados anteriormente, pasándolos a 3 dimensiones para poder medir de forma precisa el número de galaxias en diferentes épocas de la historia del Universo. Además, han utilizado modelos matemáticos nuevos que les permiten inferir la existencia de galaxias que la generación actual de telescopios no puede observar. Esto ha conducido a la sorprendente conclusión de que para que los números salgan, cerca del 90% de las galaxias del Universo observable son demasiado débiles y están demasiado lejos para poder ser vistas, todavía.
Al analizar los datos, los astrónomos investigaron hasta más de 13 mil millones de años hacia el pasado. Esto les demostró que las galaxias no están distribuidas uniformemente a lo largo de la historia del Universo. De hecho, parece que había un factor 10 más de galaxias por unidad de volumen cuando el Universo tenía sólo unos pocos miles de millones de años comparando con la actualidad. La mayoría de estas galaxias eran relativamente débiles y pequeñas, con masas parecidas a las de las galaxias satélite que rodean la Via Láctea.
Estos resultados son una prueba sólida de que se ha producido una evolución importante a lo largo de la historia del Universo, una evolución en la cual las galaxias se han unido unas con otras, reduciendo drásticamente su número total. Además, el número decreciente de galaxias a medida que pasa el tiempo también contribuye a solucionar la paradoja de Olbers: por qué el cielo es oscuro por la noche. Los investigadores concluyen que hay tantas galaxias que, en principio, cada punto del cielo contiene parte de alguna. Sin embargo, la mayoría son invisibles al ojo humano e incluso para los telescopios modernos, debido a una combinación de factores: el desplazamiento al rojo de la luz, la naturaleza dinámica del Universo y la absorción de la luz por el gas y el polvo intergalácticos.