El sorprendente descubrimiento de un agujero negro cambia la imagen de los cúmulos globulares de estrellas
4/10/2012 de National Radio Astronomy Observatory / Nature
Un descubrimiento inesperado realizado por astrónomos con datos de los radiotelescopios Karl G. Jansky Very Large Array (VLA) de la National Science Foundation, está obligando a los científicos a repensar sus nociones acerca del ambiente en los cúmulos globulares de estrellas, apretadas agrupaciones que contienen cientos de miles de estrellas.
Los astrónomos emplearon el VLA para estudiar el cúmulo globular llamado Messier 22 (M22), un grupo de estrellas a más de 10 000 años-luz de la Tierra. Esperaban encontrar evidencias de un raro tipo de agujero negro en el centro del cúmulo. Querían encontrar lo que los científicos llaman un agujero negro de masa intermedia, más masivo que los que poseen unas pocas veces más la masa del Sol, pero más pequeños que los agujeros negros supermasivos que se encuentran en los centros de las galaxias.
“No encontramos lo que estábamos buscando, pero en su lugar encontramos algo muy sorprendente – dos agujeros negros más pequeños”, afirma Laura Chomiuk, de Michigan State University y el National Radio Astronomy Observatory. “Es sorprendente porque la mayoría de los teóricos afirmaba que debería de haber como máximo un agujero negro en el cúmulo”, añade.