El remanente de supernova de Kepler: una supernova famosa revela pistas sobre marcadores cósmicos cruciales
21/3/2013 de Chandra
Una larga observación de Chandra proporciona pistas sobre el origen del remanente de supernova de Kepler. Los indicios apuntan a que la enana blanca maldita estaba acaparando material de una estrella gigante roja, y no en proceso de fusión con otra enana blanca. La explosión que creó el resto de supernova de Kepler fue vista en 1604 por el propio Kepler y muchos otros.
Ahora, un nuevo estudio ha empleado el telescopio espacial de rayos X Chandra para identificar lo que produjo esta explosión. Ya se había demostrado que el tipo de explosión fue del llamado supernova Ia, la explosión termonuclear de una estrella enana blanca. Estas supernovas son importantes marcadores de distancias cósmicas, para el seguimiento de la expansión acelerada del Universo.
Sin embargo, existe controversia sobre las supernovas de tipo Ia. ¿Son causadas por una enana blanca que toma tanto material de una compañera que se hace inestable y explota? ¿O resultan de la fusión de dos enanas blancas?
El nuevo análisis de los datos de Chandra muestra que la supernova de Kepler fue producida por la interacción entre una enana blanca y una estrella gigante roja. La evidencia crucial aportada por Chandra es la detección de una estructura con forma de disco cerca del centro del remanente. Los investigadores interpretan esta emisión en rayos X como producida por la colisión entre restos de supernova y material con forma de disco que la estrella gigante expulsó antes de la explosión. Otra posibilidad era que la estructura fuese solamente restos de la explosión.