La Vía Láctea: una caníbal galáctica
11/7/2011 de International Centre for Radio Astronomy Research
La Vía Láctea posee un historial de devoradora de pequeñas galaxias vecinas que se acercan demasiado. Un incidente de este tipo podría ser el responsable de la forma de nuestra galaxia.
El astrónomo Dr. Kenji Bekki, del Centro Internacional de Investigaciones en Radioastronomía, en Perth, ha trabajado junto con colaboradores internacionales en la simulación de la fusión entre una galaxia más pequeña y una Vía Láctea infante, hace unos 9 mil millones de años.
«Nuestro modelo por ordenador muestra una clara forma de barra en una porción de nuestra Galaxia llamada el disco grueso. Si se observara, esta barra sería un indicio claro de que se produjo una fusión a principios de la historia de la Vía Láctea», afirma el Dr. Bekki.
Las ideas actuales predicen que el disco grueso tenía la forma del disco delgado, pero que fue «hinchado» por la fusión con una galaxia menor. El disco delgado que observamos hoy en día se formó entonces lentamente a partir de otro material de nuestra Galaxia.