Efectos climáticos de un mínimo solar
9/5/2012 de Helmholtz Association of German Research Centres / Eurekalert
Un abrupto enfriamiento de Europa junto con un aumento de la humedad, y particularmente del viento, coincidió con una reducción sostenida de actividad solar hace 2800 años. Científicos del German Research Centre for Geosciences GFZ, en colaboración con científicos suecos y holandeses, han obtenido evidencias de una relación directa entre el Sol y el clima a escalas de siglos. Utilizando el método más moderno, analizaron sedimentos del lago Meerfelder Maar, un lago en la región del Eiffel, en Alemania, para determinar las variaciones anuales en manifestaciones climáticas y actividad solar.
El artículo publicado en Nature Geoscience trata del cambio climático que tuvo lugar al principio de la Edad de Hierro prerromana, y demuestra que especialmente los llamados «grandes mínimos» de actividad solar pueden afectar a las condiciones del clima en Europa occidental a través de cambios en el patrón de la circulación atmosférica regional. Hace alrededor de 2800 años, uno de estos grandes mínimos solares, el Mínimo Homérico, causó un claro cambio climático en menos de una década en Europa occidental.
Los excepcionales sedimentos laminados estacionales del lago estudiado permiten datar de forma precisa incluso cambios de clima de corta duración. Los resultados muestran que a lo largo de un periodo de 200 años aumentaron fuertemente los vientos de la primavera durante una época de clima frío y húmedo en Europa. En combinación con estudios modelo, los investigadores sugieren un mecanismo que puede explicar la relación entre el Sol débil y el cambio climático. «El cambio y fortalecimiento de los sistemas de vientos de la troposfera están probablemente relacionados con procesos estratosféricos que a su vez son afectados por la radiación ultravioleta del Sol», explica Achim Brauer, fundador del estudio. «Esta compleja cadena de procesos actúa de este modo como un mecanismo de retroalimentación positiva que podría explicar por qué variaciones en la actividad solar que parecen demasiado pequeñas han causado cambios climáticos regionales».