Diciembre 2014
Enlaces con láser permiten la transmisión de información a alta velocidad
1/12/2014 de ESA
La imagen de Berlín captada por Sentinel-1A ha sido una de las primeras enviadas por el precursor del Sistema de Transmisión de Datos Europeo (EDRS, de sus siglas en inglés) usando Alphasat, que se encuentra en una órbita geoestacionaria a 36 000 km de altura sobre la Tierra. Crédito: Copernicus data/ESA (2014)
Por vez primera en el espacio, Sentinel-1 y Alphasat se han comunicado por láser a una distancia de casi 36000 kilómetros para transmitir imágenes de la Tierra sólo pocos momentos después de que fueran tomadas.
Este importante paso demuestra el potencial de la nueva ‘autopista de datos’ espaciales de Europa para transmitir grandes volúmenes de datos muy rápidamente de modo que la información de las misiones de observación de la Tierra esté disponible con mayor prontitud.
El tener un acceso rápido a las imágenes de la misión Sentinel-1, por ejemplo, es esencial para numerosas aplicaciones como seguridad marítima y ayuda en las respuesta frente a desastres naturales.
En órbita de polo a polo a una altura de 700 km, Sentinel-1 transmite datos de forma rutinaria, pero sólo cuando pasa sobre las estaciones en tierra de Europa. Sin embargo, los satélites geoestacionarios, colocados a 36 000 kilómetros por encima de la Tierra, tienen sus estaciones en tierra permanentemente a la vista de modo que pueden enviar datos a la Tierra todo el tiempo. Crear un enlace entre los dos tipos de satélites significa que se puede enviar a la Tierra más información, y de modo casi continuo. Los ingenieros han empleado la comunicación por medio de láser para conseguirlo.
Retrasada la misión japonesa Hayabusa-2 a un asteroide
1/12/2014 de Nature
Estaba previsto que Hayabusa-2 partiera el pasado 30 de noviembre en una misión al asteroide 1999 JU3. El objetivo de la misión es tomar muestras del asteroide y traerlas de regreso a la Tierra para su análisis. Crédito: Akihiro Ikeshita/JAXA
La agencia espacial japonesa anunció el retraso en el lanzamiento de la nave espacial Hayabusa-2 después de conocer las malas previsiones meteorológicas en la fecha planeada para el lanzamiento, el 30 de noviembre. La nueva fecha de lanzamiento no será antes del 1 de diciembre.
El objetivo de Hayabusa-2 es una roca espacial de 900 metros de largo que se piensa que alberga secretos químicos de la infancia del Sistema Solar. Se trata de un asteroide de tipo C, lo que significa que es más oscuro y probablemente sea más rico que el asteroide de tipo S Itokawa sobre el que aterrizó la misión Hayabusa en 2005, regresando a la Tierra cinco años después.
El objetivo es recoger material que ha permanecido relativamente inalterado durante 4500 millones de años, cuando el gas y el polvo se acumulaban formando partículas alrededor del Sol recién nacido. El asteroide podría contener compuestos orgánicos, trazas de agua o ambas cosas.
«Pensamos que los asteroides de tipo C han sido menos alterados que los otros» comenta Lucy McFadden del Goddard Space Flight Center de NASA. «Traer ese material y poder verlo en el laboratorio va a ser muy emocionante».
La misión JUICE obtiene luz verde para la siguiente fase de desarrollo
1/12/2014 de ESA
La misión JUICE (JUpiter ICy moons Explorer) de ESA ha recibido luz verde para proceder con la siguiente fase de desarrollo. Está previsto que la misión sea lanzada en 2022 para explorar Júpiter y sus lunas heladas potencialmente habitables.
Elegida por ESA en mayo de 2012 para ser la primera gran misión del Programa Visión Cósmica, está previsto que JUICE sea lanzada en 2022 y alcance Júpiter en 2030. La misión viajará por el planeta para estudiar su atmósfera, magnetosfera y tenue sistema de anillos y analizará las lunas heladas Ganímedes, Europa y Calixto. Cuando JUICE entre en órbita alrededor alrededor de Ganímedes se convertirá en la primera nave que orbite una luna helada y la estudie con detalle. Durante su vida, la misión nos proporcionará conocimientos profundos y sin parangón sobre el sistema joviano y estas lunas.
La misión irá equipada con cámaras, espectrómetros, un radar, un altímetro, experimentos científicos de radio y sensores para monitorizar el ambiente de plasma del sistema joviano.
El módulo de servicio del orbitador lunar de China alcanza el punto de Lagrange L2
1/12/2014 de SpaceDaily
La Tierra y la Luna vistas desde la nave espacial china Chang-e 5T1. Fuente: Xinhua News Agency/SpaceDaily
El módulo de servicio perteneciente al orbitador lunar no tripulado de China ha alcanzado el segundo punto de Lagrange (L2) del sistema Tierra-Luna. Hasta el pasado viernes, el módulo de servicio había viajado durante 28 días y se encontraba a 421000 kilómetros de la Tierra y a 63000 kilómetros de la Luna. Todos los experimentos siguen funcionando bien.
El módulo de servicio se separó de la cápsula de retorno del orbitador lunar de prueba de China, que regreso a la Tierra el 1 de noviembre, después de rodear la Luna durante su misión de ocho días ,lanzada el 24 de octubre. Se trató de la primera misión a la Luna de ida y vuelta en unos 40 años, y con ella China se ha convertido en la tercera nación que lo ha conseguido, tras la Unión Soviética y los Estados Unidos.
Después de dos transferencias orbitales, el módulo de servicio reentró en una órbita elíptica con un apogeo de 540 000 kilómetros y un perigeo de 600 kilómetros. El 23 de noviembre alcanzó el perilunio y con ayuda de la gravedad lunar pudo realizar una maniobra en órbita que lo envió al punto L2.
La detección desde tierra del tránsito de una súpertierra abre el camino a la exploración de pequeños exoplanetas
2/12/2014 de CfA
Esta ilustración muestra la supertierra 55 Cancri e (derecha) comparada con la Tierra (izquierda). Los astrónomos, empleando un telescopio instalado en tierra, han medido el tránsito de 55 Cancri e por primera vez. Es el tránsito menos profundo jamás detectado desde tierra. Crédito: NASA/JPL
Un equipo de astrónomos ha medido el paso de una supertierra por delante de una brillante estrella cercana similar al Sol, empleando telescopios instalados en tierra, por primera vez. El tránsito del exoplaneta 55 Cancri e es el más pequeño detectado desde el suelo hasta la fecha. Dado que detectar un tránsito es el primer paso para analizar la atmósfera de un planeta, este éxito es un buen augurio para el estudio de muchos planetas pequeños que se espera que sean descubiertos por las próximas misiones espaciales en los próximos años.
El equipo internacional de investigadores empleó el telescopio Nordic Optical Telescope de 2.5 metros en la isla de La Palma (España), un instrumento de tamaño medio para los estándares actuales pero que está equipado con instrumentos de última generación. Las observaciones anteriores del tránsito de este planeta tenían que realizarse con telescopios espaciales.
La estrella nodriza, 55 Cancri, está situada a sólo 40 años-luz de nosotros y es visible a simple vista. Durante su tránsito, el planeta cruza 55 Cancri y bloquea una diminuta fracción de la luz estelar, disminuyendo el brillo de la estrella en un 0.05% durante casi dos horas. Esto demuestra que el planeta tiene unas dos veces el tamaño de la Tierra, o que su diámetro es de unos 26000 kilómetros.
«Nuestras observaciones demuestran que podemos detectar los tránsitos de planetas pequeños alrededor de estrellas tipo Sol empleando telescopios instalados en tierra» afirma Ernst de Mooij de Queen’s University Belfast, director del estudio. «Con estas observaciones estamos también acercándonos a la detección de las atmósferas de planetas pequeños con telescopios en tierra» comenta Mercedes López-Morales, coautora del estudio del Harvard-Smithsonian Center for Astrophysics (CfA). «Estamos poco a poco siguiendo el camino que nos conducirá a la detección de bioseñales en planetas como la Tierra alrededor de estrellas cercanas».
La cápsula Orion de NASA lista para su primer lanzamiento de prueba
2/12/2014 de SpaceDaily
NASA continúa su programa de exploración del espacio profundo con el próximo lanzamiento de la cápsula Orion, con la que los astronautas podrían viajar hasta Marte. Crédito: Lockheed Martin
La cápsula Orion de NASA está preparada para su primer lanzamiento de prueba el próximo jueves, en un vuelo de demostración que aspira a impulsarla más alto de lo que ha llegado ninguna nave espacial pensada para transportar humanos en 40 años.
Después de su lanzamiento desde Cabo Cañaveral, Florida, sobre un potente cohete Delta IV a las 12:05 GMT, la nave no tripulada debería de circunvalar la Tierra dos veces y alcanzar una altura de 5800 kilómetros, más de 15 veces la altitud de la órbita de la Estación Espacial Internacional.
La cápsula de la tripulación caerá sobre el océano Pacífico unas cuatro horas y media más tarde. Las previsiones meteorológicas para el lanzamiento eran favorables en un 60% ayer lunes, con la posibilidad de que lluvias y vientos fuertes puedan poner en peligro el lanzamiento. La ventana de lanzamiento permanecerá abierta durante dos horas y 39 minutos.
La cápsula espacial Orion inicialmente iba a transportar astronautas a la Luna como parte del programa Constellation de NASA, que fue cancelado por el presidente Obama en 2010. NASA recuperó el diseño de la cápsula, y afirmó que podía fácilmente adaptarse para enviar personas a un asteroide o a Marte en las próximas décadas.
CATS de NASA observa nubes, humo y polvo desde la Estación Espacial
2/12/2014 de NASA
Distintos tipos de nubes pueden encontrarse a diferentes alturas en la atmósfera. Dependiendo de sus propiedades pueden tener variados efectos radiativos sobre el sistema del clima de la Tierra. Crédito: NASA
Mira la predicción meteorológica de cualquier estación local de televisión y verás un mapa de los lugares donde el cielo está azul o nublado. Pero para los científicos el tratar de averiguar cómo las nubes afectan al ambiente de la Tierra, lo que está ocurriendo dentro de la cambiante cubierta de nubes es fundamental y difícil de ver.
Para investigar las capas y composición de las nubes y partículas que están el aire de polvo, humo y otros aerosoles atmosféricos, los científicos del Goddard Space Flight Center de NASA, han desarrollado un instrumento llamado Sistema de Transporte Aerosol-Nube (CATS de sus siglas en inglés). El instrumento, que será lanzado a la Estación Espacial Internacional en diciembre de 2014 explorará nuevas tecnologías y podría ser también empleado en futuras misiones de satélites.
Actualmente los científicos tienen una imagen aproximada de las nubes y las condiciones de calidad del aire en la atmósfera y generan predicciones de la calidad del aire combinando datos de satélite, aviones y tomados desde tierra con sofisticados modelos de computadora. Sin embargo, la mayoría de los conjuntos de datos no proporcionan información sobre la estructura en capas de nubes y aerosoles.
CATS proporcionará datos sobre aerosoles a diferentes niveles de la atmósfera. Se espera que los datos mejoren la capacidad de los científicos para rastrear diferentes tipos de nubes y aerosoles por la atmósfera. Estos datos serán empleados para mejorar aspectos estratégicos y de alerta de eventos en tiempo real, como realizar el seguimiento de los penachos de tormentas de polvo, erupciones volcánicas y fuegos forestales. La información podría también ser introducida en modelos del clima para comprender mejor los efectos de las nubes y aerosoles sobre el balance energético de la Tierra.
Lluvia de meteoros de las Gemínidas
2/12/2014 de Space Weather
Un bólido de las Gemínidas explota sobre el desierto de Mojave en 2009. Crédito: Wally Pacholka / Atropics.com / TWAN
La Tierra está penetrando en una estela de escombros de grava procedentes del cometa 3200 Phaeton, origen de la lluvia anual de las Gemínidas. En la noche del 30 de noviembre al 1 de diciembre, la red de cámaras de cielo completo de NASA detectó tres bólidos de las Gemínidas sobre los Estados Unidos.
Los avistamientos de meteoros aumentarán en las próximas noches a medida que la Tierra se precipite a mayor profundidad en la estela de escombros. Está previsto que la lluvia alcance su máximo en la noche del 13 al 14 de diciembre cuando los observadores situados en lugares oscuros de ambos hemisferios podrían ver hasta 120 meteoros por hora.
Puede escuchar los ecos de las Gemínidas en directo con el radar de meteoros de Space Weather.
Podrían existir trazas de actividad biológica marciana encerradas en un meteorito
3/12/2014 de Ecole Polytechnique Fédérale de Lausanne (EPFL)
El meteorito marciano Tissint. Un equipo de científicos atribuye un origen biológico a las trazas de carbono encontradas en su interior, lo que apuntaría a la existencia de actividad biológica en Marte, por lo menos en el pasado. Crédito: Ecole Polytechnique Fédérale de Lausanne (EPFL)
Philippe Gillet, director del Laboratorio de Ciencias Planetarias y de la Tierra de la EPFL, junto con colaboradores de China, Japón y Alemania, ha realizado un análisis detallado de trazas de carbono orgánico en un meteorito marciano, llegando a la conclusión de que muy probablemente son de origen orgánico. Los científicos argumentan que el carbono podría haberse depositado en las fisuras de la roca cuando todavía se encontraba en Marte por la infiltración de un fluido rico en materia orgánica.
Expulsado de Marte al chocar un asteroide contra su superficie, el meteorito, llamado Tissint, cayó en el desierto de Marruecos el 18 de julio de 2011, ante la vista de varios testigos. Después de ser examinada, se encontró que la roca extraterrestre tenía pequeñas fisuras que albergaban materia que contenía carbono. Varios equipos de investigadores han demostrado ya que es de naturaleza orgánica. Pero todavía están debatiendo de dónde procedía el carbono.
Análisis químicos, microscópicos e isotópicos del material de carbono condujeron a los investigadores hacia varias explicaciones posibles acerca de su origen. Establecieron características que inequívocamente excluían un origen terrestre, y demostraron que el carbono se había depositado en las fisuras de Tissint antes de abandonar Marte.
Ahora los investigadores contradicen las conclusiones anteriores de otro grupo de científicos, que proponían que las trazas de carbono aparecieron por la cristalización a alta temperatura de magma. Según el nuevo estudio, una explicación más plausible es que líquidos que contenían compuestos orgánicos de origen biológico se infiltraron en la roca «madre» de Tissint a bajas temperaturas, cerca de la superficie marciana.
«Insistir en la certeza no es sabio, particularmente en un tema tan sensible» advierte Gillet. «Estoy completamente abierto a la posibilidad de que otros estudios puedan contradecir nuestros descubrimientos. Sin embargo, nuestras conclusiones son tales que reanimarán el debate acerca de la posible existencia de actividad biológica en Marte, por lo menos en el pasado».
Una extraña galaxia deja perplejos a los astrónomos
3/12/2014 de National Radio Astronomy Observatory
Superposición de imágenes tomadas en radio y el óptico de la galaxia J1649+2635. El amarillo corresponde a la imagen en luz visible; en azul se muestra la imagen en radio, indicando la presencia de chorros. Crédito: Mao et al., NRAO/AUI/NSF, Sloan Digital Sky Survey
Con la ayuda de ciudadanos científicos, un equipo de astrónomos ha descubierto un importante ejemplo nuevo de un tipo muy raro de galaxia que podría proporcionar datos valiosos acerca de cómo se desarrollaron las galaxias en el universo primitivo. La nueva técnica promete dar a los astrónomo muchos más ejemplos de este importante y misterioso tipo de galaxia.
La galaxia que estudiaron, llamada J1649+2635, a casi 800 millones de años-luz de la Tierra, es una galaxia espiral, como nuestra propia Vía Láctea, pero con prominentes «chorros» de partículas subatómicas expulsados desde su núcleo a casi la velocidad de la luz. El problema es que se supone que las galaxias espirales no tienen estos grandes chorros.
«La idea habitual es que estos chorros salen sólo de galaxias elípticas que se han formado por la unión de espirales. No sabemos cómo las espirales pueden tener estos grandes chorros», comentó Minnie Mao, del National Radio Astronomy Observatory(NRAO).
J1649+2635 es sólo la cuarta galaxia espiral que emite chorros descubierta hasta ahora. La primera fue encontrada en 2003, cuando los astrónomos combinaron la imagen de un radiotelescopio del Karl G. Jansky Very Large Array (VLA) y una imagen en luz visible del mismo objeto tomada por el telescopio espacial Hubble. La segunda apareció en 2011, en imágenes del Sloan Digital Sky Survey y del VLA, y la tercera, encontrada a principios de este año, fue también descubierta combinando imágenes en radio y luz visible.
Una andanada de pequeños impactos eliminó gran parte de la atmósfera primordial de la Tierra
3/12/2014 de MIT
Ilustración de la Tierra siendo golpeada por numerosas pequeñas rocas espaciales, o planetesimales, que habrían eliminado su atmósfera primordial. Crédito: NASA
La atmósfera de hoy en día conserva pocas trazas de su versión primordial. Los indicios geoquímicos sugieren que la atmósfera de la Tierra puede haber sido completamente destruida por lo menos dos veces desde su formación hace más de 4 mil millones de años. Sin embargo, no está claro cuáles son las fuerzas interplanetarias que produjeron una pérdida tan dramática.
Ahora investigadores del MIT, Hebrew University y Caltech han llegado a un escenario probable: un incansable bombardeo de pequeñas rocas espaciales, o planetesimales, puede haber acribillado la Tierra alrededor de la época en que se formó a Luna, golpeando nubes de gas con fuerza suficiente para expulsar pequeñas porciones de la atmósfera al espacio de forma permanente.
Decenas de miles de estos pequeños impactos, calculan los investigadores, habrían expulsado eficientemente la atmósfera primordial entera de la Tierra. Tales impactos pueden también haber azotado otros planetas, e incluso haber despojado de sus atmósferas a Venus y Marte.
De hecho, los investigadores encontraron que estos planetesimales pequeños pueden ser mucho más efectivos que los proyectiles gigantes para producir la pérdida atmosférica. Basándose en sus cálculos, se necesitaría un impacto gigante – casi tan masivo como la Tierra chocando contra sí misma – para dispersar la mayor parte de la atmósfera. Pero muchos impactos pequeños juntos tendrían el mismo efecto, empleando una diminuta fracción de la masa.
Los científicos cuantifican de forma precisa el polvo alrededor de planetas en busca de vida
3/12/2014 de Keck Observatory
Un sistema planetario polvoriento (izquierda) es comparado con otro sistema con poco polvo en esta ilustración. El polvo puede hacer difícil que los telescopios tomen imágenes de los planetas ya que el resplandor del polvo puede superar al de los planetas. El polvo refleja luz visible y brilla con su propia luz infrarroja, o resplandor térmico. Tal como muestra la ilustración, los planetas se ven mejor en el sistema planetario de la derecha con poco polvo. El nuevo estudio demuestra que las estrellas similares al Sol, maduras, parecen, en promedio, no ser demasiado polvorientas. Estas son buenas noticias para futuras misiones espaciales que persiguen tomar imágenes detalladas de planetas como la Tierra y buscar posibles señales de vida. Crédito: NASA/JPL-CALTECH
Un nuevo estudio realizado con el interferómetro del Keck, ha traído noticias excitantes para los cazadores de planetas. Después de estudiar casi 50 estrellas desde 2008 a 2011, los científicos han podido determinar con notable precisión cuánto polvo hay alrededor de estrellas lejanas, un gran paso adelante hacia el descubrimiento de planetas que podrían albergar vida.
«Esto fue realmente una hazaña matemática» afirma Peter Wizinowich. «Este equipo hizo algo que rara vez vemos en términos de emplear todas las técnicas estadísticas disponibles para evaluar un conjunto combinado de datos. Fueron capaces de reducir dramáticamente todas las barras de error en un factor de 10, para comprender realmente la cantidad de polvo presente alrededor de estos sistemas».
El interferómetro del Keck fue construido para buscar este polvo, y en última instancia ayudar a seleccionar objetivos para futuras misiones de búsqueda de planetas parecidos a la Tierra de NASA.
«El polvo es una espada de doble filo en lo que se refiere a tomar imágenes de planetas lejanos», explica Bertrand Mennesson, director del estudio. «La presencia de polvo es una señal del proceso de formación de planetas, pero demasiado polvo puede bloquear nuestro campo de visión».
Una extraña galaxia deja perplejos a los astrónomos
3/12/2014 de National Radio Astronomy Observatory
Superposición de imágenes tomadas en radio y el óptico de la galaxia J1649+2635. El amarillo corresponde a la imagen en luz visible; en azul se muestra la imagen en radio, indicando la presencia de chorros. Crédito: Mao et al., NRAO/AUI/NSF, Sloan Digital Sky Survey
Con la ayuda de ciudadanos científicos, un equipo de astrónomos ha descubierto un importante ejemplo nuevo de un tipo muy raro de galaxia que podría proporcionar datos valiosos acerca de cómo se desarrollaron las galaxias en el universo primitivo. La nueva técnica promete dar a los astrónomo muchos más ejemplos de este importante y misterioso tipo de galaxia.
La galaxia que estudiaron, llamada J1649+2635, a casi 800 millones de años-luz de la Tierra, es una galaxia espiral, como nuestra propia Vía Láctea, pero con prominentes «chorros» de partículas subatómicas expulsados desde su núcleo a casi la velocidad de la luz. El problema es que se supone que las galaxias espirales no tienen estos grandes chorros.
«La idea habitual es que estos chorros salen sólo de galaxias elípticas que se han formado por la unión de espirales. No sabemos cómo las espirales pueden tener estos grandes chorros», comentó Minnie Mao, del National Radio Astronomy Observatory(NRAO).
J1649+2635 es sólo la cuarta galaxia espiral que emite chorros descubierta hasta ahora. La primera fue encontrada en 2003, cuando los astrónomos combinaron la imagen de un radiotelescopio del Karl G. Jansky Very Large Array (VLA) y una imagen en luz visible del mismo objeto tomada por el telescopio espacial Hubble. La segunda apareció en 2011, en imágenes del Sloan Digital Sky Survey y del VLA, y la tercera, encontrada a principios de este año, fue también descubierta combinando imágenes en radio y luz visible.
Una andanada de pequeños impactos eliminó gran parte de la atmósfera primordial de la Tierra
3/12/2014 de MIT
Ilustración de la Tierra siendo golpeada por numerosas pequeñas rocas espaciales, o planetesimales, que habrían eliminado su atmósfera primordial. Crédito: NASA
La atmósfera de hoy en día conserva pocas trazas de su versión primordial. Los indicios geoquímicos sugieren que la atmósfera de la Tierra puede haber sido completamente destruida por lo menos dos veces desde su formación hace más de 4 mil millones de años. Sin embargo, no está claro cuáles son las fuerzas interplanetarias que produjeron una pérdida tan dramática.
Ahora investigadores del MIT, Hebrew University y Caltech han llegado a un escenario probable: un incansable bombardeo de pequeñas rocas espaciales, o planetesimales, puede haber acribillado la Tierra alrededor de la época en que se formó a Luna, golpeando nubes de gas con fuerza suficiente para expulsar pequeñas porciones de la atmósfera al espacio de forma permanente.
Decenas de miles de estos pequeños impactos, calculan los investigadores, habrían expulsado eficientemente la atmósfera primordial entera de la Tierra. Tales impactos pueden también haber azotado otros planetas, e incluso haber despojado de sus atmósferas a Venus y Marte.
De hecho, los investigadores encontraron que estos planetesimales pequeños pueden ser mucho más efectivos que los proyectiles gigantes para producir la pérdida atmosférica. Basándose en sus cálculos, se necesitaría un impacto gigante – casi tan masivo como la Tierra chocando contra sí misma – para dispersar la mayor parte de la atmósfera. Pero muchos impactos pequeños juntos tendrían el mismo efecto, empleando una diminuta fracción de la masa.
Los científicos cuantifican de forma precisa el polvo alrededor de planetas en busca de vida
3/12/2014 de Keck Observatory
Un sistema planetario polvoriento (izquierda) es comparado con otro sistema con poco polvo en esta ilustración. El polvo puede hacer difícil que los telescopios tomen imágenes de los planetas ya que el resplandor del polvo puede superar al de los planetas. El polvo refleja luz visible y brilla con su propia luz infrarroja, o resplandor térmico. Tal como muestra la ilustración, los planetas se ven mejor en el sistema planetario de la derecha con poco polvo. El nuevo estudio demuestra que las estrellas similares al Sol, maduras, parecen, en promedio, no ser demasiado polvorientas. Estas son buenas noticias para futuras misiones espaciales que persiguen tomar imágenes detalladas de planetas como la Tierra y buscar posibles señales de vida. Crédito: NASA/JPL-CALTECH
Un nuevo estudio realizado con el interferómetro del Keck, ha traído noticias excitantes para los cazadores de planetas. Después de estudiar casi 50 estrellas desde 2008 a 2011, los científicos han podido determinar con notable precisión cuánto polvo hay alrededor de estrellas lejanas, un gran paso adelante hacia el descubrimiento de planetas que podrían albergar vida.
«Esto fue realmente una hazaña matemática» afirma Peter Wizinowich. «Este equipo hizo algo que rara vez vemos en términos de emplear todas las técnicas estadísticas disponibles para evaluar un conjunto combinado de datos. Fueron capaces de reducir dramáticamente todas las barras de error en un factor de 10, para comprender realmente la cantidad de polvo presente alrededor de estos sistemas».
El interferómetro del Keck fue construido para buscar este polvo, y en última instancia ayudar a seleccionar objetivos para futuras misiones de búsqueda de planetas parecidos a la Tierra de NASA.
«El polvo es una espada de doble filo en lo que se refiere a tomar imágenes de planetas lejanos», explica Bertrand Mennesson, director del estudio. «La presencia de polvo es una señal del proceso de formación de planetas, pero demasiado polvo puede bloquear nuestro campo de visión».
Detectan emisión de hidrógeno atómico en galaxias a distancias de récord
4/11/2014 de Royal Astronomical Society
Imágenes de cuatro galaxia lejanas observadas con el radiotelescopio de Arecibo, que se ha visto que albergan grandes reservas de gas de hidrógeno atómico. Crédito: Sloan Digital Sky Survey.
Empleando el mayor radiotelescopio del mundo, dos astrónomos de la Swinburne University of Technology de Australia han detectado la débil señal emitida por gas de hidrógeno atómico en galaxias a 3 mil millones de años-luz de la Tierra, superando el anterior récord de distancia en 500 millones de años-luz.
Empleando el radiotelescopio de 305 m de diámetro de Arecibo (Puerto Rico) la Dra. Barbara Catinella y el Dr. Luca Cortese midieron el contenido en gas hidrógeno de casi 40 galaxias a distancias de hasta 3 mil millones de años-luz. Y al hacerlo han descubierto una población única de galaxias que albergan enormes reservas de gas hidrógeno, el combustible para formar nuevas estrellas como nuestro Sol.
Estos sistemas muy ricos en gas contienen, cada uno, entre 20 mil millones y 80 mil millones de veces la masa del Sol. Tales galaxias son raras, pero los astrónomos piensan que fueron más habituales en el pasado, cuando el Universo era más joven. «El gas de hidrógeno atómico es el combustible a partir del cual se forman nuevas estrellas, así que se trata de un componente crucial a estudiar si queremos entender cómo se forman y evolucionan las galaxias», comenta la directora del estudio, la Dra. Catinella. «Debido a las limitaciones de los instrumentos actuales, los astrónomos aún sabemos muy poco acerca del contenido en gas de galaxias más allá de nuestro vecindario local».
«No sólo detectamos señales de radio emitidas por galaxias lejanas cuando el Universo era 3 mil millones de años más joven, sino que sus reservas de gas resultaron ser inesperadamente grandes, unas 10 veces mayores que la masa de hidrógeno de nuestra Vía Láctea. Una cantidad tan enorme de combustible podrá alimentar la formación de estrellas en estas galaxias durante varios miles de millones de años en el futuro». Los próximos estudios tendrán que responder por qué estas galaxias no han convertido todavía una gran parte de su gas en estrellas.
Exoplanetas que provocan la ilusión de ser como la Tierra, podrían haber quemado sus posibilidades de albergar vida
4/12/2014 de University of Washington
Ilustración de una estrella de baja masa, una enana de clase M, vista desde un planeta rocoso en órbita. Crédito: NASA/JPL
Los planetas en órbitas cercanas a estrellas de baja masa- las más comunes del Universo – son el objetivo principal en la búsqueda de vida extraterrestre.
Pero una nueva investigación, dirigida por un estudiante graduado de la Universidad de Washington, indica que tales planetas podrían haber perdido hace mucho su oportunidad de albergar vida debido al intenso calor que sufrieron durante los años de su formación.
Las estrellas de baja masa, también llamadas enanas de clase M, son más pequeñas que el Sol, y también mucho menos luminosas, así que su zona habitable tiende a estar muy cerca de ellas. La zona habitable es la región del espacio con las condiciones correctas para que exista agua líquida en la superficie de un planeta en órbita, dando así una oportunidad a la vida.
Pero en un artículo publicado en la revista Astrobiology, Rodrigo Luger y Rory Barnes descubren, con simulaciones por computadora, que algunos planetas cercanos a estrellas de masa baja probablemente perdieron sus atmósferas por el calor mientras aún se estaban formando. «Todas las estrellas se forman en el colapso de una nube gigante de gas interestelar, que emite energía en forma de luz a medida que encoge» comenta Luger. «Pero debido a sus masas bajas, y por tanto gravedades menores, las enanas de tipo M tardan más en colapsar del todo – del orden de muchos cientos de millones de años». «Los planetas pueden formarse alrededor de estas estrellas en menos de 10 millones de años, por lo que ya existen cuando las estrellas todavía son extremadamente brillantes. Y esto no es bueno para su habitabilidad, dado que esos planetas van a estar inicialmente muy calientes, con temperaturas en la superficie de más de mil grados. Cuando esto ocurre, tus océanos hierven y toda tu atmósfera se convierte en vapor». La luz ultravioleta y de rayos X procedente de la estrella calienta el gas, que se expande rápidamente y abandona el planeta, perdiéndose en el espacio.
Viajar por el espacio, un poco más seguro de lo que se pensaba
4/12/2014 de EurekAlert/ The Henryk Niewodniczanski Institute of Nuclear Physics Polish Academy of Sciences
El maniquí MATROSHKA presentado por los astronautas S. Krikaliew y J. Philips a bordo de la Estación Espacial Internacional. Crédito: NASA
El análisis de datos del experimento MATROSHKA, las primeras medidas completas sobre la exposición de larga duración de los astronautas a la radiación cósmica, ha sido completado. Este experimento, realizado a bordo y fuera de la Estación Espacial Internacional, demostró que el cosmos puede ser menos hostil para los viajeros espaciales de lo esperado.
Entre los muchos peligros mortales que afrontará un viajero espacial, la radiación cósmica es uno muy importante, limitando considerablemente el tiempo que los astronautas pueden permanecer en el espacio sin incurrir en un riesgo excesivo para su salud por una dosis demasiado alta de esta radiación ionizante. Para determinar las dosis reales de radiación a las que están sometidos los astronautas en un viaje espacial largo la Agencia Espacial Europea (ESA) en colaboración con instituciones de investigación de Alemania, Polonia, Austria, Suecia y Rusia, diseñó y llevó a cabo el experimento MATROSHKA. A un maniquí que imitaba el cuerpo humano se le insertaron varios miles de detectores. Estos detectores registraron las dosis de radiación cósmica dentro de la Estación Espacial Internacional y fuera de ella – en el espacio abierto – durante varios años. El esmerado análisis de los datos de MATROSHKA acaba de completarse, proporcionando algunos resultados inesperados.
«Se podría decir que hemos descubierto que el espacio abierto es menos hostil para los humanos de lo esperado. Las dosis efectivas relacionadas con un riesgo para la salud de los astronautas y calculadas a partir de medidas con nuestros detectores, fueron menores que las indicadas por dosímetros llevados por los astronautas» afirma el Dr. Paweł Bilski. Los dosímetros individuales que lleva la tripulación de la ISS sobreestimaron la dosis real medida dentro del maniquí en un 15%. Sin embargo, en el espacio abierto esta sobreestimación superó el 200%.
Éxito en el lanzamiento del vehículo H-IIA No. 26 con «Hayabusa2» a bordo
4/12/2014 de JAXA
Lanzamiento de vehículo H-IIA No. 26 (H-IIA F26) con el explorador de asteroides «Hayabusa2» a bordo, desde el centro espacial Tanegashima. Crédito: JAXA
Mitsubishi Heavy Industries, Ltd. y la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) han lanzado con éxito el vehículo de lanzamiento H-IIA No. 26 (H-IIA F26) con el explorador de asteroides «Hayabusa2» a bordo, desde el centro espacial Tanegashima. El vehículo de lanzamiento voló tal como estaba planeado, y aproximadamente una hora, 47 minutos y 21 segundos después del despegue, la separación de Hayabusa2 para tomar una trayectoria de escape de la Tierra fue confirmada.
El explorador de asteroides Hayabusa2 es un sucesor de Hayabusa, que verificó varias tecnologías nuevas de exploración y que regresó a la Tierra en junio de 2010. Hayabusa2 se encuentra en un viaje que busca clarificar el origen y evolución del sistema solar así como de la vida.
Púlsares con agujeros negros pueden guardar el ‘santo grial’ de la gravedad
5/12/2014 de SINC
Descubrir un pulsar orbitando un agujero negro podría ser el ‘santo grial’ para testear la gravedad. / SKA Organisation/Swinburne Astronomy Productions
La luz intermitente que emiten los púlsares, los relojes más precisos del universo, sirve a los científicos para verificar la teoría de la relatividad de Einstein, sobre todo cuando estos objetos se emparejan con otra estrella de neutrones o una enana blanca e interfiere su gravedad. Pero esta teoría se podría analizar mucho mejor si se encontrara un púlsar con un agujero negro, salvo en dos casos puntuales, según informan investigadores de España y la India.
Los púlsares son estrellas de neutrones superdensas del tamaño de una ciudad –su radio ronda la docena de kilómetros– que, como faros en el universo, emiten potentes haces de radiación gamma o X cuando rotan hasta cientos de veces por segundo. Estas características los hacen ideales para poner a prueba la validez de la teoría general de la relatividad, publicada por Einstein entre 1915 y 1916.
“Los púlsares actúan como relojes muy precisos, por lo que cualquier desviación en los tiempos de llegada de sus pulsos se puede detectar”, explica a Sinc Diego F. Torres, investigador ICREA del Instituto de Ciencias del Espacio (IEEC-CSIC). “Si comparamos las medidas reales con las correcciones al modelo que tenemos que implementar para que las predicciones sean correctas, podemos poner cotas o detectar directamente la desviación de la teoría base”.
Estas desviaciones se pueden producir si cerca del púlsar se encuentra un objeto masivo, como otra estrella de neutrones o una enana blanca, el remanente estelar que queda cuando estrellas como nuestro Sol agotan su combustible nuclear. Los sistemas binarios compuestos por un púlsar y una estrella de neutrones (incluida los sistemas púlsar-púlsar) o bien con una enana blanca se han utilizado con mucho éxito para verificar la teoría de la gravedad. Sin embargo, los científicos buscan otros emparejamientos que puedan ser más efectivos, en particular el de un púlsar orbitando un agujero negro ‘normal’, es decir, con una masa similar a la de las estrellas.
Aún no se ha visto ningún caso así, y el trabajo ahora publicado señala que podría haber dos excepciones: cuando se viola el denominado principio de equivalencia fuerte (el movimiento gravitacional de un cuerpo que ponemos a prueba depende solo de su posición en el espacio-tiempo y no de lo que esté constituido) y si se plantea una posible variación de la constante gravitacional, aquella que determina la intensidad de la fuerza de atracción gravitatoria entre los cuerpos. En estos dos casos específicos, la combinación púlsar-agujero negro no sería el perfecto ‘santo grial’, pero, en cualquier caso los científicos ansían encontrar esta pareja, porque se podría utilizar para analizar la mayoría de las desviaciones.
Planck: nuevas noticias sobre materia oscura y neutrinos del fondo cósmico
5/12/2014 de Interactions.org
Mapa de temperatura de la radiación cósmica de fondo (abajo izquierda) y ampliaciones mostrando, en relieve, la polarización de la luz en el canal de 353 GHz (los colores corresponden a la intensidad de la emisión térmica del polvo galáctico). Crédito: ESA – Planck collaboration.
La colaboración Planck, que incluye entre otros a CNRS, CEA, CNE y varias universidades francesas, ha anunciado, en un congreso en Ferrara (Italia) los resultados de cuatro años de observaciones del satélite Planck de ESA. El satélite tiene como objetivo estudiar la radiación del fondo cósmico, la luz más antigua del Universo. Esta luz ha sido medida con precisión en todo el cielo por primera vez tanto en intensidad como en polarización, produciendo así la imagen más antigua del Universo. Esta luz primordial nos permite «ver algunas de las partículas más escurridizas del Universo: la materia oscura y los neutrinos del fondo cósmico de neutrinos.
Ya en 2013 se publicó un mapa de las variaciones en la intensidad de la luz, mostrando dónde se encontraba la materia en el cielo 380 000 años después del Big Bang. Gracias a la medida de la polarización de esta luz, Planck puede ahora ver cómo se movía este material. Nuestra visión del Universo primitivo se ha hecho dinámica. Esta nueva dimensión, y la calidad de los datos, nos permite comprobar numerosos aspectos de la cosmología del modelo estándar. En particular, iluminan las partículas más escurridizas: la materia oscura y los neutrinos.
Los nuevos resultados son incluso más interesantes cuando son comparados con medidas realizadas por otros instrumentos. Los satélites Fermi y Pamela, así como el experimento AMS-02 a bordo de la Estación Espacial Internacional, han observado un exceso de rayos cósmicos, que podría interpretarse como una consecuencia de la aniquilación de la materia oscura. Sin embargo, ahora hay que considerar una explicación alternativa a estas medidas de AMS-02 o de Fermi, pues las observaciones de Planck no encuentran ninguna influencia en la evolución de la materia en el universo temprano de la gran cantidad de energía que esta aniquilación habría producido.
Las observaciones de Planck han detectado, por primera vez y de forma clara, el efecto de los neutrinos primordiales en los mapas del fondo cósmico. Los neutrinos detectados por Planck fueron emitidos un segundo después del Big Bang, cuando el Universo era todavía opaco a la luz, pero ya transparente a estas partículas, que pueden escapar libremente de ambientes que son opacos para los fotones, como el núcleo del Sol. 380 000 años más tarde, cuando fue emitida la radiación primordial, llevaba la marca de los neutrinos pues los fotones habían interaccionado gravitacionalmente con estas partículas. Así, observar los fotones más antiguos ha hecho posible confirmar las propiedades de los neutrinos. Las observaciones de Planck están en buen acuerdo con el modelo estándar de la física de partículas. Esencialmente excluyen la existencia de una cuarta familia de neutrinos, que había sido considerada como una posibilidad a partir de los datos del satélite WMAP, predecesor de Planck.
Lanzamiento de Orion
5/2/2014 de NASA
Ilustración en la que se muestra la cápsula Orion en su vuelo de prueba en órbita alrededor de la Tierra. Crédito: NASA
Las probabilidades de que las condiciones meteorológicas sean aceptables para el despegue de la cápsula Orion durante la ventana de lanzamiento de hoy han bajado a un 40%. La preocupación está centrada en un sistema de lluvias de procede del sur de Cabo Cañaveral. El sistema podría traer lluvia o vientos más fuertes que podrían impedir el despegue hoy.
Mientras, el equipo de lanzamiento ha empezado el proceso de repostaje del cohete Delta IV de modo que esté listo para el lanzamiento durante la ventana de lanzamiento de 2 horas y 39 minutos que se abre a las 13:05h CET.
Luz verde para la construcción del E-ELT
5/12/2014 de ESO
Ilustración que muestra al European Extremely Large Telescope (E-ELT) en su estructura de protección. El E-ELT será un telescopio óptico infrarrojo con una apertura de 39 metros situado en Cerro Armazones, en el Desierto de Atacama (Chile), a 20 kilómetros del Very Large Telescope de ESO, en Cerro Paranal. Será el “ojo más grande del mundo para mirar el cielo”. Crédito: ESO /L. Calçada.
En una reunión mantenida recientemente, el Consejo de ESO, su principal órgano directivo, aprobó la construcción del European Extremely Large Telescope (E-ELT) en dos fases. Se autorizó el gasto de cerca de mil millones de euros para la primera fase, que incluye los costes de construcción de un telescopio plenamente operativo, unido a un conjunto de potentes instrumentos, con el objetivo de lograr su “primera luz” en un plazo de diez años. El E-ELT permitirá enormes avances científicos en los campos de los exoplanetas, las poblaciones estelares de galaxias cercanas y el universo profundo. El mayor contrato jamás suscrito por ESO, que abarcará la cúpula del telescopio y su estructura principal, se adjudicará el próximo año.
El E-ELT será un telescopio óptico infrarrojo con una apertura de 39 metros, situado en Cerro Armazones, en el Desierto de Atacama (Chile), a 20 kilómetros del Very Large Telescope de ESO, en Cerro Paranal. Será el “ojo más grande del mundo para mirar el cielo”.
“La decisión adoptada por el Consejo significa que podemos comenzar la construcción del telescopio y que disponemos de los fondos necesarios para realizar las principales obras de edificación industrial del E-ELT y proceder de acuerdo a lo planificado. Ya se han logrado importantes progresos en la cumbre de Armazones en Chile, y los siguientes años serán muy estimulantes”, declaró el Director General de ESO, Tim de Zeeuw.
La construcción del E-ELT había sido aprobada por el Consejo de ESO en junio de 2012 bajo la condición de que los contratos que superaran los 2 millones de euros fueran adjudicados solamente una vez que el coste total del telescopio (estimado en el año 2012 en 1083 millones de euros) estuviera financiado en un 90%. Se concedió una excepción para las obras civiles, que comenzaron en junio de 2014 con la ceremonia de tronadura de la montaña, y que han seguido avanzando.
Observando una «erupción» galáctica
9/12/2014 de University of Hertfordshire / Nature
El gas está siendo conducido hasta distancias de decenas de miles de años-luz por la intensa presión ejercida sobre él por la radiación de las estrellas que se están formando rápidamente en el centro de la galaxia. Ello está teniendo un impacto importante en la evolución de la galaxia.
El equipo utilizó el radiotelescopio Institut de Radioastronomie Millimétrique (IRAM) Plateau de Bure Interferometer, instalado en los Alpes franceses. Detectando la molécula de monóxido de carbono, pudieron calcular la cantidad de gas de hidrógeno presente. Las estrellas nacen en nubes de hidrógeno, así que eliminando este gas la galaxia puede poner fin rápidamente a su formación de estrellas. Hay suficiente gas en el material expulsado como para formar el equivalente a más de mil millones de soles.
El Dr. Geach, quien recibe financiación de la Royal Society, explicó: «Este descubrimiento pone de relieve la casualidad de la investigación científica. Inicialmente sólo estábamos intentando medir la cantidad de gas denso en SDSS J0905+57. Lo que encontramos fue algo sorprendente – una gran fracción del gas estaba siendo expulsada de la galaxia por la concentración de estrellas que se formaban en el centro de la galaxia.
«Estamos siendo testigos del final agresivo de la formación de estrellas, y el mecanismo por el cual esto está ocurriendo es una nueva pista importante en nuestra comprensión de la evolución de las galaxias».
Las dunas de Titán necesitan de vientos firmes para moverse
9/12/2014 de Arizona State University
Líneas de dunas se arrastran por la superficie de Titán, la luna mayor de Saturno, en una imagen por radar que muestra las dunas como líneas oscuras. Los experimentos realizados en el túnel de viento de Arizona State University indican que las partículas de las dunas se mueven solamente bajo vientos que soplen más fuerte de lo que pensaban los científicos anteriormente. Crédito: NASA/JPL-Caltech/ASI
La mayor de las lunas de Saturno, Titán, es uno de los pocos cuerpos del Sistema Solar – y la única luna planetaria – que se sabe que posee campos de dunas producidas por el viento en su superficie (los otros son Venus, la Tierra y Marte).
Nuevas investigaciones, empleando resultados experimentales en un túnel de viento de alta presión en el laboratorio Planetary Aeolian Laboratory, de la Universidad del Estado de Arizona, han descubierto que las estimaciones anteriores de lo fuerte que tienen que soplar los vientos para mover partículas del tamaño de las de arena por Titán son un 40 por ciento demasiado bajas.
Las dunas se empiezan a formar cuando el viento recoge partículas sueltas del suelo y las conduce botando, en dirección a favor del viento. Una parte clave para entender las dunas es identificar el umbral de velocidad del viento a partir del cual éste provoca que las partículas de las dunas empiecen a moverse. Los geólogos habían encontrado el umbral de velocidad para arena y polvo bajo diferentes condiciones en la Tierra, Marte y Venus. Pero para Titán, con sus extrañas condiciones, éste seguía sin conocerse.
En Titán, donde la temperatura en la superficie es de -178ºC, incluso la «arena» probablemente no se parezca a la de la Tierra, Marte o Venus. A partir de las observaciones de Cassini y otros datos, los científicos piensan que está compuesta por partículas pequeñas de hidrocarburos sólidos (o hielo envuelto en hidrocarburos), con una densidad de un tercio de la de la arena terrestre. Además, la gravedad en Titán es baja, aproximadamente un séptimo de la que tiene la Tierra. Al combinar esto con la baja densidad de las partículas, se obtiene que tienen un peso de sólo un cuatro por ciento del peso de la arena terrestre, o aproximadamente, tan ligeras como granos de café congelados.
Los nuevos experimentos en el túnel de viento han demostrado que, cerca de la superficie de Titán, las partículas del tamaño de la arena que se mueven con más facilidad necesitan que el viento sople a por lo menos 1.4 metros por segundo para empezar a desplazarse.
El robot Curiosity de Marte encuentra pruebas acerca de cómo el agua ayudó a modelar el paisaje marciano
9/12/2014 de JPL
Esta roca con capas regulares fotografiada por la cámara Mastcam del rover Curiosity en Marte de NASA, el pasado 7 de agosto de 2014, muestra un patrón típico de un depósito sedimentario en el fondo de un lago no muy lejos de donde el agua que fluía entraba en el lago. Crédito: NASA/JPL-Caltech/MSSS
Las observaciones del robot Curiosity de NASA indican que el Monte Sharp de Marte fue construido por sedimentos depositados en una gran cuenca de un lago a lo largo de decenas de millones de años.
Esta interpretación de los descubrimientos de Curiosity en el cráter Gale sugiere que el Marte antiguo mantenía un clima que podría haber producido lagos de larga duración en muchos lugares del Planeta Rojo.
«Si nuestra hipótesis sobre Monte Sharp se confirma, desafía la idea de que las condiciones húmedas y templadas fueron pasajeras, locales o sólo subterráneas en Marte» afirma Ashwin Vasavada. «Una explicación más radical es que la antigua atmósfera más gruesa de Marte elevara las temperaturas por encima del punto de congelación de forma global, pero hasta ahora no sabemos cómo la atmósfera hizo eso».
La razón por la que esta montaña formada por capas se encuentra en un cráter ha sido una pregunta difícil para los investigadores. El Monte Sharp tiene una altura de 5 km, sus flancos más bajos muestran cientos de capas de rocas. Las capas de rocas – alternando entre depósitos de lago, río y viento – son testigos del repetido llenado y evaporación de un lago marciano mucho mayor y más duradero que ninguno antes examinado de cerca.
A las puertas de Plutón, la nave espacial New Horizons de NASA despierta para su encuentro
9/12/2014 de NASA
En el centro de operaciones de New Horizons, la directora de operaciones Alice Bowman y el miembro del equipo de operaciones Karl Whittenburg miran las pantallas que confirman que la nave espacial New Horizons ha pasado del modo de hibernación al modo activo. Crédito: NASA .
Después de un viaje de casi nueve años y 5 mil millones de kilómetros – lo más lejos que ninguna misión espacial ha llegado para alcanzar su objetivo principal, la nave espacial New Horizons de NASA salió de hibernación el pasado 6 de diciembre, preparándose para su largamente esperado encuentro con el sistema de Plutón.
Los operadores del Applied Physics Laboratory de la Universidad Johns Hopkins confirmaron que New Horizons, funcionando bajo comandos de ordenador preprogramados, había pasado del modo de hibernación al modo activo. Desplazándose a la velocidad de la luz, la señal de radio de New Horizons, actualmente a más de 4600 millones de kilómetros de la Tierra, y sólo a poco más de 261 millones de kilómetros de Plutón, necesitó 4 horas y 26 minutos para alcanzar la estación de espacio profundo de la NASA en Canberra (Australia).
«Este es un suceso clave que marca el fin del periplo de New Horizons cruzando un vasto océano de espacio hasta la misma frontera de nuestro Sistema Solar, y el principio del objetivo primario de su misión: la exploración de Plutón y sus muchas lunas en 2015», afirma Alan Stern, investigador principal de New Horizons del Southwest Research Institute.
Desde su lanzamiento el 19 de enero de 2006 New Horizons a pasado 1873 días – unos dos tercios del tiempo de vuelo – en hibernación. Sus 18 periodos de hibernación separados, de mitad de 2007 a finales de 2014, tuvieron duraciones de entre 36 días y 202 días. El equipo empleó la hibernación para evitar el desgaste de los componentes de la nave y reducir el riesgo de fallos en el sistema.
Identifican espirales de gas como viveros de estrellas gemelas
10/12/2014 de ALMA
Discos de gas y polvo alrededor del sistema binario de protoestrellas L1551 NE, observado por ALMA. Crédito: ALMA (ESO/NAOJ/NRAO)/Takakuwa et al.
Observaciones realizadas con el Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA) han permitido a un equipo de astrónomos dirigidos por Shigehisa Takakuwa, del Institute of Astronomy and Astrophysics, Academia Sinica (ASIAA), Taiwan, encontrar brazos espirales de gas molecular y polvo alrededor de estrellas gemelas infantes, protoestrellas binarias. También identificaron los movimientos del gas que proporcionan material a las gemelas. Los resultados de estas observaciones desvelan, por primera vez, el mecanismo de nacimiento y crecimiento de estrellas binarias, que se encuentran por todas partes en el Universo.
Las estrellas se forman en nubes interestelares de gas molecular y polvo. Los estudios anteriores de formación estelar se han centrado sobre todo en la formación de estrellas individuales como el Sol, estableciéndose una teoría estándar. Según esta teoría, una densa condensación de gas en una nube interestelar colapsa gravitacionalmente y forma una sola protoestrella en el centro. De hecho las observaciones han descubierto movimientos de gas en colapso que aporta material a las protoestrellas centrales.
Ahora, el equipo dirigido por Shigehisa Takakuwa ha empleado el telescopio ALMA para observar la estrella gemela bebé L1551 NE, situada en la constelación de Tauro. Encontraron una componente del gas asociada con cada estrella del sistema binario, y un disco rodeando ambas estrellas, el disco circumbinario, con un radio de 300 unidades astronómicas (la unidad astronómica es la distancia media de la Tierra al Sol). Y por primera vez han conseguido tomar imágenes detalladas de las estructuras del disco circumbinario, descubriendo que este disco tiene una estructura en forma de U al sur, y emisiones en la parte norte dirigidas hacia el noroeste y el noreste.
Los investigadores construyeron un modelo teórico de formación de binarias en el caso de L1551 NE. Las estructuras observadas por ALMA pueden explicarse con una pareja de brazos espirales que salen de cada estrella gemela. También han identificado movimientos más rápidos en las regiones interiores de los brazos y movimientos giratorios más lentos en las regiones entre los brazos. Las regiones entre brazos muestran gas que cae hacia las estrellas bebé gemelas centrales, es el mecanismo que aporta materiales a las estrellas bebé. Estos resultados demuestran que las estrellas gemelas «agitan» el disco circumbinario que las rodea e inducen la caída del gas para alimentar con materiales a las gemelas bebé. «Nuestra observación en alta resolución con ALMA ha desvelado imágenes en directo del crecimiento de gemelas bebé por primera vez», afirma Takakuwa.
El despojamiento molecular explica las buckybolas en el espacio
10/12/2014 de NOVA
Ilustración que muestra cómo un gran HPA (arriba izquierda) comienza con un desnudo molecular, quitándose los átomos de hidrógeno uno a uno, hasta que sólo queda el esqueleto de carbono desnudo. La buckybola C60 está abajo a la derecha. Crédito: Leiden University Linnartz/Tielens
Científicos de la Universidad de Leiden han demostrado en el laboratorio cómo las buckybolas (o futboleno) – pelotas de fútbol moleculares – se forman en el espacio. Los experimentos realizados son especiales ya que están basados en un nuevo concepto químico- de arriba a abajo, de grande a pequeño – transfiriendo largas cadenas aromáticas a grafenos, fullerenos y jaulas de carbono interestelares.
Los buckminsterfullerenos C60 fueron descubiertos en el espacio en 2010, casi 15 años después de que su descubrimiento en el laboratorio recibiera el premio Nobel. Con su descubrimiento, el C60 también se convirtió en la molécula más grande identificada en el medio interestelar. No estaba claro, sin embargo, cómo podía formarse una molécula tan compleja. Debido a la naturaleza altamente diluida de la materia en el espacio, es muy poco probable que se forme siguiendo una secuencia de pasos, a partir de una molécula más pequeña. En el laboratorio de astrofísica del Observatorio de Leiden se ha encontrado ahora una respuesta.
Las estrellas agonizantes expulsan grandes cantidades de los llamados HPA, hidrocarbuos policíclicos aromáticos. Estas son las mismas partículas que son emitidas por los coches en la Tierra, contribuyendo a la contaminación del aire. Un HPA contiene un esqueleto de carbono plano, con átomos de hidrógeno en los bordes. Se supone que son omnipresentes en el espacio ya que su señal espectral se observa por todas partes en el Universo.
En Leiden se construyó un instrumento que permite atrapar HPA muy grandes en una trampa molecular. Los científicos posteriormente irradiaron los HPA con luz, descubriendo que sufría un despojamiento molecular, perdiendo átomos de hidrógeno uno a uno, hasta que sólo quedó el esqueleto de carbono desnudo: un copo de grafeno. Durante este proceso se forman nuevas especies, entre ellas C60. «Los experimentos demuestran que es posible transformar HPA en pelotas de fútbol moleculares, y esto puede explicar por qué encontramos C60 en el espacio. Los experimentos también demuestran que la complejidad del medio interestelar no tiene que explicase necesariamente a través de la fusión de componentes menores, sino que la fragmentación de algo mayor puede ser igualmente importante», señala el profesor Xander Tielens.
El gas caliente arroja «agua fría» al proceso de formación de estrellas de una galaxia
10/12/2014 de JPL
Una nueva característica en la evolución de las galaxias ha sido captada en esta imagen de interacciones galácticas. Las dos galaxias vistas aquí, NGC 3226 arriba y NGC 3227 abajo, se encuentran entre los restos de una tercera galaxia desaparecida, canibalizada por la gravedad de las galaxias supervivientes. La ola de gas que fluye hacia NGC 3226, que se aprecia como un filamento azul, parece estar deteniendo la formación de estrellas en esta galaxia, perturbando el gas frío necesario para hacer estrellas. Crédito: NASA/CFHT/NRAO/JPL-Caltech/Duc/Cuillandre
Para crear nuevas estrellas un ambiente frío cósmico es lo ideal. Tal como sugiere un nuevo estudio, una ola de gas caliente dirigida hacia una galaxia cercana – restos de otra galaxia que ha sido devorada – han extinguido la formación de estrellas perturbando el gas frío que estaba disponible para ello.
Los astrónomos quieren comprender por qué las galaxias del Universo local pertenecen a una de dos categorías principales: espirales jóvenes y que forman estrellas (como nuestra Vía Láctea), y elípticas viejas, en las que la formación de estrellas ha cesado. La galaxia del nuevo estudio, NGC 3226, se encuentra en un terreno intermedio, así que aprender sobre su formación estelar es muy importante.
«Hemos explorado el fantástico potencial de los grandes archivos de datos de los telescopios Hubble y Spitzer de NASA y Herschel de ESA, para construir una imagen de una galaxia elíptica que ha sufrido enormes cambios en su pasado reciente debido a violentas colisiones con sus vecinas» afirma Philip Appleton. «Estas colisiones no sólo están modificando su estructura y color, sino también las condiciones del gas que reside en ella, haciendo difícil – por el momento – que la galaxia forme muchas estrellas».
NGC 3226 está relativamente cerca, a sólo 50 millones de años-luz. Varios bucles de gas tachonados de estrellas emanan de NGC 3226. También hay filamentos entre ella y una galaxia compañera, NGC 3227. Estos flujos de material sugieren que allí existió una tercera galaxia hasta hace poco, esto es, hasta que NGC 3226 la devoró, esparciendo fragmentos de la galaxia destruida por toda la zona. Sus restos permanecen formando un disco templado que ha apagado la formación de nuevas estrellas, por lo menos hasta que se enfríe y alcance otra vez temperaturas adecuadas, reiniciándose de nuevo la formación estelar.
Observan dos estrellas tan próximas que acabarán fusionándose en una sola supermasiva
10/12/2014 de RUVID
En la imagen, representación artística del sistema MY Cam. Las proporciones entre las componentes reflejan los resultados del análisis. Las estrellas están deformadas por su rapidísima rotación y la atracción gravitatoria de la compañera. Crédito: Universidad de Alicante.
Un estudio sobre el sistema binario “MY Camelopardalis”, publicado por la revista Astronomy & Astrophysics, demuestra que las estrellas más masivas se forman por fusión de otras más pequeñas, como predecían los modelos teóricos
En nuestra galaxia, gran parte de las estrellas se han formado en sistemas binarios o múltiples y algunos de ellos reciben el atributo de “eclipsantes”, es decir, formados por dos o más estrellas que, observadas desde la Tierra, sufren eclipses y tránsitos mutuos por tener su plano orbital orientado hacia nuestro planeta. Uno de estos sistemas es la binaria eclipsante MY Camelopardalis (MY Cam). Sobre ella, una de las más masivas que se conocen, la revista Astronomy & Astrophysics (A&A) publica un artículo con los resultados de observaciones realizadas en el Observatorio de Calar Alto (Almería) y firmado por astrónomos de la Universidad de Alicante, del Centro de Astrobiología del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CAB-CSIC) y del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), junto con astrónomos aficionados.
En este artículo concluyen que MY Cam es la binaria más masiva observada cuyas componentes, dos estrellas de tipo espectral O (de color azul, muy calientes y luminosas), de 38 y 32 veces la masa del Sol, están todavía en la secuencia principal y se encuentran muy próximas entre sí, con un periodo orbital de menos de 1,2 días, el periodo orbital más corto en este tipo de estrellas.
La combinación de estos dos últimos puntos indica que la binaria se formó prácticamente como se encuentra ahora, es decir, que las estrellas estaban ya casi en contacto en el momento en que se formaron.
La previsible evolución del sistema es la fusión de ambas componentes en un único objeto de más de 60 masas solares antes de que ninguna de ellas tenga tiempo de evolucionar significativamente. De ahí que estos resultados demuestren la viabilidad de algunos modelos teóricos que sugieren que las estrellas más masivas deben formarse por fusión de estrellas menos masivas.
Resultados de Rosetta avivan la discusión sobre el origen de los océanos de la Tierra
11/12/2014 de ESA / Science
Los diferentes valores de la proporción deuterio a hidrógeno (D/H) en agua observada en varios cuerpos del Sistema Solar. Los puntos están agrupados por color, con planetas y lunas en azul, meteoritos condríticos del Cinturón de Asteroides en gris, cometas de la nube de Oort en púrpura y cometas de la familia de Júpiter en rosa. El cometa de la familia de Júpiter visitado por Rosetta está en amarillo. Crédito: Altwegg et al. 2014
La nave espacial Rosetta ha descubierto que el vapor de agua de su cometa es significativamente diferente del de la Tierra. El descubrimiento aviva el debate acerca del origen de los océanos de nuestro planeta.
Las medidas fueron realizadas durante el mes siguiente a la llegada de la nave espacial al cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko, el pasado 6 de agosto. Era uno de los resultados iniciales más esperados de la misión, porque el origen del agua de la Tierra es todavía una cuestión abierta.
Una de las hipótesis preferidas mantiene que la Tierra estaba demasiado caliente cuando se formó hace 4600 millones de años, y cualquier cantidad de agua presente inicialmente se habría evaporado. Pero hoy en día dos tercios de la superficie están cubiertas por agua, ¿así que de dónde vino? Según este escenario, habría sido transportada después de que nuestro planeta se enfriase, con mucha probabilidad, por colisiones con cometas y asteroides. La contribución relativa de cada clase de objeto a la reserva de agua de nuestro planeta, sin embargo, todavía es discutida.
La clave para determinar dónde se originó el agua está en su ‘sabor’, en este caso, la proporción de deuterio – una forma de hidrógeno con un neutrón adicional – respecto al hidrógeno normal (D/H). La proporción D/H medida por Rosetta es la mayor encontrada en cualquier cometa de la familia de cometas de Júpiter (a la que pertenece) e incluso a las medidas en cometas de la nube de Oort. Y también mayor que la medida en el agua de la Tierra.
«Este sorprendente resultado podría indicar un origen diferente para los cometas de la familia de Júpiter. Quizás se formaron a un intervalo de distancias en el joven Sistema Solar mayor de lo que se pensaba», afirma Kathrin Altwegg, directora del estudio. «Nuestro descubrimiento también descarta que los cometas de la familia de Júpiter contengan sólo agua como la de los océanos de la Tierra, y añade peso a los modelos que ponen más énfasis en los asteroides como principales contribuyentes a los océanos de la Tierra».
Dawn toma su mejor imagen hasta la fecha del planeta enano Ceres
11/12/2014 de JPL
Desde una distancia tres veces mayor que la distancia entre la Tierra y la Luna, la nave espacial Dawn de NASA espía su destino final, el planeta enano Ceres. Crédito: NASA/JPL-Caltech/UCLA/MPS/DLR/IDA
La nave espacial Dan ha enviado un atisbo de Ceres, el mayor cuerpo del cinturón principal de asteroides, en una nueva imagen tomada a 1.2 millones de kilómetros del planeta enano. Esta es la mejor imagen de Ceres obtenida por la nave mientras se dirige hacia este mundo inexplorado.
«Ahora, finalmente, tenemos una nave espacial a punto de desvelarnos este misterioso mundo alienígena. Pronto revelará la miríada de secretos que Ceres ha escondido desde el amanecer del Sistema Solar», comenta Marc Rayman, ingeniero jefe y director de misión de la misión Dawn.
Dawn será capturada en la órbita de Ceres en marzo, siendo la primera vez que un un planeta enano sea visitado por una nave espacial. Hasta ahora, las mejores imágenes de Ceres proceden del telescopio espacial Hubble. Pero a principios de 2015 Dawn empezará a enviar imágenes con resolución mucho más alta.
Desde su lanzamiento en 2007, Dawn ya ha visitado Vesta, un protoplaneta gigante actualmente situado a 168 millones de kilómetros de Ceres. La distancia es mayor que la que hay entre la Tierra y el Sol. Durante sus 14 meses en órbita alrededor de Vesta, la nave espacial obtuvo resultados científicos sin precedentes, incluyendo imágenes de su superficie llena de cráteres e importantes datos sobre su historia geológica. Vesta y Ceres son los dos cuerpos más masivos del cinturón principal de asteroides.
La lluvia de meteoros de las Gemínidas regresa las noches del 13 y 14 de diciembre
11/12/2014 de Sky&Telescope
Los meteoros de las Gemínidas pueden aparecer en cualquier lugar del cielo. Pero si rastreas su trayectoria hacia atrás lo suficiente, parecerá que divergen desde un punto en la constelación de Géminis. ¡No esperes ver varios meteoros a la vez! Este diagrama sólo pretende mostrarte su divergencia desde el punto radiante. Crédito: Sky & Telescope / Gregg Dindermann
Si las noches del sábado y el domingo están despejadas, mira hacia lo alto para ver las «estrellas fugaces» de la lluvia de meteoros de las Gemínidas. «Las Gemínidas son normalmente una de las mejores lluvias de meteoros del año», afirma Alan MacRobert, editor senior de la revista Sky & Telescope. «A veces son más impresionantes que las más famosas Perseidas de agosto».
Bajo un cielo despejado y oscuro, podrías ver una estrella fugaz cada minuto, desde las 10 de la noche, hora local, hasta el amanecer. Si vives bajo el resplandor artificial de la contaminación lumínica verás un número menor, pero los meteoros brillantes todavía serán apreciables. Habrá otra interferencia también debida a la Luna menguante, que aparecerá alrededor de la medianoche.
Las noches anteriores y posteriores a las de los días 13 y 14 de diciembre deberían de verse ya Gemínidas, aunque en número menor.
Para observar meteoroos no necesitas más equipo que tus ojos. Busca un lugar oscuro con una vista amplia del cielo y sin luces cerca. Abrígate todo lo que puedas, con muchas capas. «Sal afuera al caer la tarde, colócate en una tumbona de jardín, y mira las estrellas» aconseja MacRobert. «Relájate, ten paciencia, y deja que tus ojos se adapten a la oscuridad». Las Gemínidas pueden aparecer desde cualquier punto del cielo, así que lo mejor es mirar hacia donde sea que tu cielo esté más oscuro, probablemente justo encima de ti.
La nave espacial Orion de NASA completa su primer vuelo de prueba
11/12/2014 de SpaceDaily
El cohete pesado Delta IV de United Launch Alliance con la nave espacial Orion de NASA montada sobre él, despega del complejo de lanzamiento espacial 37 de la Estación de las Fuerzas Aéreas en Cabo Cañaveral, Florida. Crédito: NASA/Bill Ingalls.
El pasado viernes NASA marcó un importante hito en su viaje a Marte, cuando la nave espacial Orion completó su primer vuelo al espacio, viajando más lejos que ninguna otra nave diseñada para transportar astronautas en los últimos 40 años.
Orion despegó del complejo de lanzamiento 37 de la Estación de la Fuerza Aérea en Cabo Cañaveral, Florida, con un cohete Delta IV de United Launch Alliance. El módulo de tripulación de Orion cayó al agua aproximadamente 4.5 horas más tarde en el Océano Pacífico.
Durante la prueba no tripulada Orion cruzó dos veces el cinturón de Van Allen, donde experimentó niveles de radiación alta, y alcanzó una altura de 5800 kilómetros sobre la Tierra. Orion alcanzó también velocidades de 32000 kilómetros por hora, y soportó temperaturas cercanas a los 2200 ºC al entrar en la atmósfera de la Tierra.
Orion abrirá el espacio entre la Tierra y Marte para la exploración con astronautas. Estas pruebas son de gran importancia para comprobar las funciones que necesitarán las futuras misiones humanas a Marte. La nave espacial fue probada en el espacio para permitir que los ingenieros tomaran datos cruciales para evaluar su funcionamiento y mejorar su diseño.
Enjambres de objetos del tamaño de Plutón levantan polvo alrededor de una estrella adolescente parecida al Sol
12/12/2014 de National Radio Astronomy Observatory
Impresión artística del disco de escombros alrededor de HD 107146. Este sistema estelar adolescente muestra signos de que en las regiones exteriores hay enjambres de objetos del tamaño de Plutón perturbando otros objetos pequeños cercanos, haciendo que choquen y levanten una cantidad considerable de polvo. Crédito: A. Angelich (NRAO/AUI/NSF)
Un equipo de astrónomos, usando el Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA), puede haber detectado las huellas polvorientas de una familia entera de objetos del tamaño de Plutón pululando alrededor de una versión adolescente de nuestro propio Sol.
Realizando observaciones detalladas del disco protoplanetario que rodea la estrella conocida como HD 107146, los astrónomos detectaron un aumento inesperado en la concentración de granos de polvo del tamaño de milímetros en las regiones exteriores del disco. Este sorprendente incremento, que comienza notablemente lejos, a unos 13 mil millones de kilómetros de la estrella nodriza, puede ser el resultado de planetesimales del tamaño de Plutón removiendo la región, provocando que los objetos más pequeños choquen entre sí y se destruyan.
«El aspecto sorprendente es que se trata de lo contrario a lo que vemos en discos primoridales jóvenes, en los que el polvo es más denso hacia la estrella. Es posible que hayamos pillado este disco de escombros en particular en una fase en la que planetesimales del tamaño de Plutón están formándose ahora mismo en el disco exterior, mientras otros cuerpos del tamaño de Plutón ya se han formado más cerca de la estrella», comenta Luca Ricci, astrónomo del Harvard-Smithsonian Center for Astrophysics.
Según los modelos por computadora actuales, la observación de que la densidad de polvo es mayor en las regiones exteriores del disco sólo puede ser explicada por la presencia de cuerpos del tamaño de Plutón formados recientemente. Su gravedad pertubaria a los planetesimales más pequeños, produciendo colisiones más frecuentes que generan el polvo observado con ALMA.
Detectan una posible señal de materia oscura
12/12/2014 de ScienceDaily
¿Podría haberse encontrado por fin una evidencia tangible de la existencia de materia oscura en el Universo? Después de analizar grandes cantidades de datos en rayos X, un equipo de científicos cree que podría haber identificado la señal de la partícula de materia oscura. Crédito: Image courtesy of Ecole Polytechnique Fédérale de Lausanne
Científicos de la Escuela Politécnica Federal de Lausana y de la Universidad de Leiden creen haber identificado la señal de una partícula de materia oscura. Oleg Ruchayskiy y Alexey Boyarsky han alcanzado esta conclusión analizando rayos X de dos objetos celestes – el cúmulo de galaxias de Perseo y la galaxia de Andrómeda. Después de haber recogido miles de señales del telescopio XMM-Newton de ESA y haber eliminado todas las procedentes de partículas y átomos conocidos, detectaron una anomalía que, aun considerando la posibilidad de un error instrumental o de medida, captó su atención.
La señal aparece en el espectro de rayos X como una emisión débil y atípica de fotones que no puede ser atribuida a ninguna forma conocida de materia oscura. Sobre todo, «la distribución de la señal por la galaxia corresponde exactamente a lo que esperamos de la materia oscura, esto es, concentrada e intensa en el centro de los objetos, y más débil y difusa en los bordes» explica Ruchayskiy. «Con el objetivo de verificar nuestros descubrimientos, miramos en datos de nuestra propia galaxia, la Vía Láctea, y realizamos las mismas observaciones», dice Boyarsky.
La señal procede de un suceso muy raro en el Universo: un fotón emitido debido a la destrucción de una partícula hipotética, posiblemente lo que se conoce como un neutrino estéril. Si se confirma el descubrimiento, éste abrirá nuevos caminos de investigación en física de partículas.
ATV ve la Estación Espacial como no había sido vista hasta ahora
12/12/2014 de SpaceDaily
El vehículo de transferencia automático (ATV) Georges Lemaitre, visto desde la Estación Espacial Internacional mientras se acerca para atracar en agosto de 2014. A la derecha del logo de la ESA, tres cámaras alrededor del cono frontal forman parte del instrumento LIRIS. Crédito: ESA/NASA/Roscosmos-O. Artemyev.
El quinto vehículo de transferencia automático (ATV) de ESA probó una técnica nueva antes de atracar en la Estación Espacial Internacional el pasado mes de agosto, revelando al mismo tiempo el complejo orbital bajo una nueva luz.
ATV Georges Lemaitre probó una serie de sensores europeos que ofrecen mejoras futuras en el encuentro y atraque autónomo que estos ferris han completado cinco veces desde 2008. El objetivo de ESA es realizar un encuentro automático más lejos de casa, quizás cerca de Marte o con un objetivo que no coopere, como un objeto inerte.
Durante el encuentro el experimento de sensores de láser infrarrojo LIRIS fue dirigido hacia la Estación durante dos horas y media y a 3500 m de distancia. Todos los sensores funcionaron tal como se esperaba y se registró una gran cantidad de datos. Esta información está siendo ahora analizada y comparada con los resultados de los sensores de navegación normales del ATV.
Con el ATV-5 apuntando directamente a la Estación, las cámaras infrarrojas LIRIS siguieron al complejo científico orbital perfectamente, a pesar de varios periodos de 30 minutos en oscuridad, cuando el Sol quedaba eclipsado por la Tierra y las cámaras tradicionales se habrían quedado a ciegas.
Desarrollan un observatorio solar para su uso en misiones espaciales suborbitales tripuladas
12/12/2014 de Southwest Research Institute (SwRI)
El instrumento SwRI Solar Instrument Pointing Platform (SSIPP), que estudiará ultrasonidos en el Sol. Crédito: Southwest Research Institute
Southwest Research Institute (SwRI) va a desvelar un nuevo observatorio solar en miniatura, portátil, para su uso a bordo de naves espaciales comerciales suborbitales tripuladas, el instrumento SwRI Solar Instrument Pointing Platform (SSIPP).
«El desarrollo y prueba de la instrumentación espacial ha permanecido esencialmente inalterada desde la Segunda Guerra Mundial: nuevos instrumentos acoplados a cohetes sonda, hechos a mano, naves espaciales en miniatura que volarán en misiones de cinco minutos pero requieren que pasen meses, y a veces años, entre dos vuelos porque normalmente necesitan ser reacondicionadas después de cada vuelo.
Los vuelos tripulados comerciales poseen el potencial de cambiar completamente todo esto proporcionando una plataforma estable y completamente reutilizable que es 30 veces menos cara por vuelo que los cohetes sonda y que pueden volar muchas veces a la semana», declaró el Dr. Craig DeForest.
El primer vuelo espacial de SSIPP buscará ultrasonidos solares, un fenómeno que, según comenta DeForest, fue observado por primera vez a principio de la década de los años 2000, por la nave espacial Transitional Region and Coronal Explorer (TRACE). El «utrasonido» son ondas sonoras con un periodo de 10 segundos, unas 18 octavas por debajo de un ultrasonido en la Tierra, y forma ondas visibles en las capas superficiales del Sol. Las ondas son difíciles de detectar sin instrumentación espacial debido a que las rápidas y diminutas fluctuaciones no pueden separarse de la influencia de la turbulencia en la atmósfera de la Tierra.
El mineral más abundante de la Tierra finalmente tiene nombre
15/12/2014 de Argonne National Laboratory / Science
Imagen tomada con un microscopio electrónico de barrido de un agregado de bridgmanita y akimotoita. La imagen revela los cristales con tamaños por debajo del micrómetro de bridgmanita y akimotoita incrustados en cristal de (Mg,Fe)SiO3 dentro de una vena fundida por choques del meteorito Tenham. Crédito: Tschauner et et al, Science (2014).
Un antiguo meteorito y rayos X de alta energía han ayudado a los científicos a poner fin a medio siglo de esfuerzos para encontrar, identificar y caracterizar un mineral que constituye el 38 por ciento de la Tierra.
Y al hacerlo, un equipo de científicos dirigido por Oliver Tschauner, minerólogo de la Universidad de Las Vegas, clarificó la definición del mineral más abundante de la Tierra, una forma de silicato de hierro y magnesio de alta densidad ahora llamado Bridgmanita, y definió las condiciones para su formación.
El mineral ha recibido su nombre del premio Nobel de 1964, pionero en investigaciones de alta presión, Percy Bridgman.
Para determina la composición de la capas interiores de la Tierra, los científicos necesitaron someter materiales a temperaturas y presiones extremas. Durante décadas los científicos pensaron que una estructura densa de perovskita constituye hasta el 38 por ciento del volumen de la Tierra, y que las propiedades físicas y químicas de la Bridgmanita tienen una gran influencia en cómo los elementos y el calor fluyen a través del manto de la Tierra. Pero dado que el mineral no sobrevive el viaje hasta la superficie, nadie había sido capaz de demostrar su existencia, una condición necesaria para obtener un nombre oficial de la Asociación Mineralógica Internacional.
La compresión que se produce en choques entre asteroides del Sistema Solar crea las mismas condiciones hostiles que hay en las profundidades de la Tierra – temperaturas de aproximadamente unos 2100 grados centígrados, y presiones unas 240000 veces mayores que la presión a nivel del mar. El choque se produce lo suficientemente rápido como para inhibir la destrucción de la Bridgmanita, destrucción que sí tiene lugar cuando se enfría a presiones menores , como las de la superficie de la Tierra. Parte de los escombros de estas colisiones caen a la Tierra en forma de meteoritos, que llevan la Bridgmanita «congelada» dentro de venas fundidas por los choques.
Ahora, el estudio con nuevas técnicas no destructivas del meteorito Tenham, una L condrita que cayó en Australia en 1879, ha permitido identificar Bridgmanita en su interior.
Fragmentos nucleares podrían ayudar a descubrir los orígenes de los planetas que alberguen vida
15/12/2014 de University of Surrey
Por primera vez, un equipo de investigadores de la Universidad de Surrey, el centro RIKEN Nishina de Japón y la Universidad de Beihang ha conseguido observar los isótopos de ciertos elementos químicos formados cuando una estrella explota. Los isótopos de estos elementos (samario y gadolinio) son trazadores sensibles del modo en que una estrella explota, y pueden por tanto ayudar a comprender el origen de los elementos pesados que son necesarios para mantener la vida en el Universo.
El profesor Phil Walker, de la Universidad de Surrey, comenta:»Nuestro trabajo consistió en recrear algunos de los isótopos que se forman cuando una estrella explota. Esto lo conseguimos acelerando uranio al 70 por ciento de la velocidad de la luz, haciéndolo chocar luego contra un objetivo de metal. Analizando los fragmentos resultantes empleando un microscopio de rayos gamma, descubrimos que esta reacción había creado isótopos exóticos cuya estructura nunca antes había sido estudiada. Esto ayuda a crear un mapa de los procesos que conducen a la creación de elementos que son esenciales para mantener la vida».
«Nuestro estudio demuestra esencialmente cómo el polvo de las estrellas – los escombros de las estrellas que han explotado – juega un papel en la formación de planetas que alberguen vida. Es sólo un descubrimiento dentro de un largo proceso, pero es un primer paso en el camino para comprender las condiciones necesarias para que haya vida en el Universo».
Una reunión galáctica crea un impresionante espectáculo de luces
15/12/2014 de Chandra
NGC 2207 y IC 2163 son dos galaxias espirales en proceso de fusión. Esta pareja contiene una gran colección de objetsos superbrillantes en rayos X llamados fuentes ultraluminosas de rayos X (los puntos rosa de la imagen). Crédito: Rayos X: NASA/CXC/SAO/S.Mineo et al, Óptico: NASA/STScI, Infrarrojo: NASA/JPL-Caltech.
Situadas a unos 130 millones de años-luz de la Tierra, en la constelación de Canis Major, esta pareja de galaxias espirales ha sido captadas rozándose en el espacio. NGC 2207 y IC 2163 han albergado tres explosiones de supernova en los últimos 15 años, y han producido una de las colecciones más abundantes de luces superluminossa en rayos X conocidas. Estos objetos especiales – conocidos como fuentes ultraluminosas de rayos X (ULX de sus siglas en inglés) han sido encontradas empleando datos del observatorio de rayos X Chandra de NASA.
Como ocurre en nuestra Vía Láctea, NGC 2207 y IC 2163 están salpicadas de muchos sistemas conocidos como binarias de rayos X, que consisten en una estrella en una órbita muy cercana alrededor de una estrella de neutrones o de un agujero negro de masa estelar. La potente gravedad de la estrella de neutrones o del agujero negro atrae materia de la estrella compañera. Mientras esta materia se precipita hacia la estrella de neutrones o agujero negro, se calienta a millones de grados y genera rayos X.
Las ULX poseen rayos X mucho más brillantes que los de la mayoría de binarias de rayos X ‘normales’. La naturaleza real de las ULX aún es tema de debate, pero probablemente se trate de un tipo peculiar de binaria de rayos X. Los agujeros negros de algunas ULX pueden ser más pesados que los agujeros negros estelares y podrían ser representantes de una categoría de agujeros negros de masa intermedia, cuya existencia es todavía solo una hipótesis.
La imagen compuesta de NGC 2207 y IC 2163 contiene datos de Chandra en rosa, datos en luz óptica del telescopio espacial Hubble en rojo, verde y azul (que se ven como azul, blanco, naranja y marrón), y datos infrarrojos del telescopio espacial Spitzer, en rojo.
El verdadero color del cometa de Rosetta
15/12/2014 de Max Planck Institute
Imagen en color del cometa de Rosetta 67P/Churyumov-Gerasimenko, compuesta por tres imágenes tomadas por el sistema de imágenes científico OSIRIS con filtros rojo, verde y azul, el pasado 6 de agosto de 2014, desde una distancia de 120 kilómetros. Crédito: ESA/Rosetta/MPS for OSIRIS Team MPS/UPD/LAM/IAA/SSO/INTA/UPM/DASP/ID .
Como muchos objetos pequeños del espacio, por ejemplo la mayoría de los asteroides, el cometa de Rosetta, 67/P, se ve gris. Esto es lo que se observa en imágenes obtenidas por el sistema de imagen científico OSIRIS después de un cuidadoso procesado. Para crear una imagen que revele los colores «reales» de 67P, los científicos superpusieron imágenes tomadas con los filtros rojo, verde y azul de la cámara.
El sistema de imágenes está equipado con varios filtros de color permitiendo que sólo los atraviese luz dentro de un limitado rango de longitudes de onda. Como resultado, las variaciones de intensidad observadas en OSIRIS están basadas sólo en una pequeña parte de la luz reflejada por el cometa. «Para cuestiones científicas, estas imágenes son superiores a las que contienen todas las longitudes de onda» explica Holger Sierks, del Instituto Max Planck de Investigación del Sistema Solar. Por ejemplo, las huellas que ciertos minerales o procesos como la erosión espacial dejan en la luz reflejada del cometa pueden ser estudiadas de este modo.
¿Pero cuál es el color ‘verdadero’ de 67P? Para crear una imagen tal como sería vista por el ojo humano, el equipo de OSIRIS superpuso tres imágenes tomadas con filtros rojo, verde y azul, un método empleado también en monitores de computadora y televisión. «Resulta que 67P es de color gris oscuro, en realidad, casi tan negro como el carbón», afirma Sierks.
Los primeros análisis muestran que el cometa de Rosetta refleja la luz roja con eficiencia algo superior a otras longitudes de onda. Éste es un fenómeno bien conocido en otros muchos cuerpos pequeños y se debe al pequeño tamaño de los granos de la superficie. Ello no significa, sin embargo, que el cometa se vea rojizo. Dado que en la luz solar natural las componentes rojas están ligeramente suprimidas, ambos efectos combinados hacen que tenga un aspecto grisáceo para el ojo humano.
La misión Fermi ayuda a profundizar en los rayos gamma de las tormentas
16/12/2014 de NASA
En esta fotografía, tomada en mayo de 2008 mientras el telescopio espacial de rayos gamma Fermi era preparado para su lanzamiento, están marcados los detectores del monitor de estallidos de rayos gamma. Este monitor consiste en un conjunto de 14 cristales detectores diseñados para captar estallidos de rayos gamma de baja energía como los TGF. Crédito: NASA/Jim Grossmann.
Cada día las tormentas producen por todo el mundo miles de estallidos rápidos de rayos gamma, que se cuenta entre la radiación de mayor energía que se produce de forma natural en la Tierra. Combinando registros de episodios observados por el telescopio espacial de rayos gamma Fermi con datos de radares en tierra y detectores de relámpagos, los científicos han completado el análisis más detallado de los tipos de tormentas involucrados.
«Hemos descubierto que cualquier tormenta puede producir rayos gamma, incluso aquéllas que parecen ser tan débiles que un meteorólogo ni se fijaría en ellas» afirma Themis Chronis, director del estudio.
Los estallidos, llamados destellos de rayos gamma terrestres (TGF de sus siglas en inglés) fueron descubiertos en 1992 por el observatorio de rayos gamma Compton de NASA, que funcionó hasta 2000. Los TGF se producen inesperadamente, con duraciones de menos de una milésima de segundo, y siguen siendo muy poco conocidos.
A finales de 2012, científicos de Fermi emplearon nuevas técnicas que mejoraron de forma efectiva el monitor de estallidos de rayos gamma del satélite, haciéndolo 10 veces más sensible a los TGF, permitiéndole registrar episodios débiles que habían pasado desapercibidos anteriormente. «Como resultado de esta mejora en el ritmo de descubrimientos, pudimos demostrar que la mayoría de TGF también generan fuertes estallidos de ondas de radio como las que producen los relámpagos», comenta Michael Briggs.
Los científicos sospechan que los TGF se producen en potentes campos eléctricos cercanos a las regiones superiores de las tormentas. Las corrientes de aire ascendentes y descendentes dentro de las tormentas provocan choques entre la lluvia, la nieve y el hielo, haciendo que adquieran carga eléctrica. Normalmente, la carga positiva se acumula en la parte superior de la tormenta, y la carga negativa se acumula abajo. Cuando el campo eléctrico de la tormenta se hace tan intenso que rompe la propiedades aislantes del aire, se produce una descarga en forma de rayo. Bajo las condiciones correctas, la parte superior de un rayo en el interior de una nube perturba el campo eléctrico de la tormenta en modo tal que una avalancha de electrones asciende a alta velocidad. Cuando estos electrones que se desplazan rápidamente son desviados por moléculas del aire, emiten rayos gamma y crean un TGF.
Voyager: el «tsunami» persiste en el espacio interestelar
16/12/2014 de JPL
Esta ilustración artística muestra la nave espacial Voyager de NASA frente a un tapiz de estrellas. Crédito: NASA/JPL-Caltech.
El «tsunami» que la nave espacial Voyager 1 de NASA empezó a percibir a principios de este año todavía se está propagando hacia afuera, según resultados nuevos. Es la onda de choque de más larga duración que los investigadores han observado en el espacio interestelar.
«La mayoría de personas habrían creído que el medio interestelar sería suave y tranquilo. Pero estas ondas de choque parecen ser más comunes de lo que pensábamos», afirma Don Gurnett, profesor de física de la Universidad de Iowa.
Un «tsunami» se produce cuando el Sol emite materia de la corona, expulsando una nube magnética de plasma desde su superficie. Esto genera una onda de presión. Cuando la onda alcanza el plasma interestelar – las partículas con carga eléctrica que se encuentran en el espacio libre entre estrellas – se produce una onda de choque que perturba el plasma.
«El tsunami hace que el gas ionizado que hay allí resuene – ‘cante’ o vibre como una campana», comenta Ed Stone, científico de proyecto de la misión Voyager.
Se trata de la tercera onda de choque que Voyager 1 ha experimentado. El primer episodio tuvo lugar entre octubre y noviembre de 2012, y la segunda ola entre abril y mayo de 2013 reveló una densidad de plasma aún mayor. Voyager 1 detectó la más reciente en febrero, y todavía está activa, según los datos de noviembre. La nave espacial se ha alejado unos 400 millones de kilómetros durante el tercer episodio.
«Este suceso notable provoca nuevas preguntas que servirán de estímulo para los estudios sobre la naturaleza de las ondas de choque en el medio interestelar», comenta Leonard Burlaga, del Goddard Spaceflight Center.
La misión MAVEN de NASA identifica eslabones de una cadena que conduce a la pérdida de atmósfera
16/12/2014 de NASA
La misión MAVEN de NASA está observando la alta atmósfera de Marte para ayudar a comprender el cambio climático en el planeta. MAVEN inició su fase científica el pasado 16 de noviembre de 2014. Crédito: NASA’s Goddard Space Flight Center .
Los primeros descubrimientos del orbitador más nuevo de NASA en Marte está revelando datos clave acerca de la pérdida de la atmósfera del planeta al espacio con el paso del tiempo.
Estos datos son los primeros que envía la misión Mars Atmosphere and Volatile Evolution (MAVEN), que inició su fase científica el pasado 16 de noviembre. Incluyen las primeras medidas globales de la composición de la alta atmósfera de Marte y su ionosfera cargada eléctricamente. Los resultados ofrecen también una imagen sin precedentes de los iones mientras adquieren energía, que les permitirá escapar de la atmósfera.
«Empezamos a ver los eslabones en una cadena que empieza con procesos producidos por el Sol en el gas de la alta atmósfera, y que conducen a la pérdida atmosférica», comenta Bruce Jakosky, investigador principal de MAVEN. «A lo largo de la misión completa seremos capaces de completar esta imagen y comprender realmente los procesos por los que la atmósfera cambió con el transcurso del tiempo».
En cada órbita alrededor de Marte, MAVEN se zambulle en la ionosfera – la capa de iones y electrones que se extiende desde 120 kilómetros a casi 500 kilómetros sobre la superficie. Esta capa sirve como una especie de escudo alrededor del planeta, desviando el viento solar, un intenso flujo de partículas calientes y de alta energía procedentes del Sol.
Opportunity operando fuera del modo «flash», por el momento
16/12/2014 de JPL
El robot de exploración de Marte Opportunity continua su travesía hacia el sur del borde occidental del cráter Endeavour durante el otoño de 2014, deteniéndose por el camino para investigar objetivos de interés científico. Crédito: NASA/JPL-Caltech .
Persistentes reinicios de la computadora y episodios de «amnesia» del rover de exploración de Marte Opportunity que se han producido después de reformatear la memoria flash del robot, han provocado un cambio en el modo de trabajo que evita el sistema flash de almacenamiento de datos.
El reformateo más reciente de la memoria flash de Opportunity se realizó la semana pasada. Después de esto, su funcionamiento ha sido intermitente, y la dificultad para introducir datos en la memoria produjo varios reinicios de la computadora durante el fin de semana.
La memoria flash retiene información incluso si el rover se apaga, durante su tiempo de «dormir» por la noche que le permite ahorrar energía. En el modo sin flash el robot puede continuar con sus operaciones normales de observaciones científicas y seguir desplazándose, pero no puede almacenar datos durante su periodo de letargo nocturno. Los datos tomados cada día marciano son guardados en memoria volátil, que en Opportunity es una memoria de acceso aleatorio, o RAM. Los datos almacenados en el sistema volátil de memoria son enviados a la Tierra antes del descanso nocturno porque se pierden en cuanto el rover se apaga.
El equipo de control del rover está desarrollando una serie de comandos para restablecer la memoria flash a través de un procedimiento más extenso que el reformateo empleado hasta el momento. Los incidentes en que la memoria flash de Opportunity ha rechazado datos para su almacenamiento se han producido sólo en uno de los siete bancos de microchips flash del robot. El equipo planea enviar órdenes al rover para que ignore ese banco completo.
Rover de NASA descubre una antigua y activa química orgánica en Marte
17/12/2014 de JPL / Science
La primera detección definitiva de compuestos orgánicos marcianos en material de la superficie de Marte ha llegado a través del análisis de una muestra de polvo tomada por el robot Curiosity de NASA en esta roca limolita, apodada «Cumberland». Crédito: NASA/JPL-Caltech/MSSS.
El rover Curiosity de NASA ha medido un pico de diez veces en metano (un compuesto químico orgánico) en la atmósfera a su alrededor, y ha detectado otras moléculas orgánicas en una muestra de polvo de roca recogida por la perforadora del laboratorio robótico.
«Este incremento temporal en el metano – subida brusca y bajada de nuevo – nos indica que debe de haber una fuente relativamente localizada» comenta Sushil Atreya, de la Universidad de Michigan, miembro del equipo científico del rover Curiosity. «Hay muchas fuentes posibles, biológicas y no biológicas, como la interacción de agua y roca».
Los investigadores han utilizado el laboratorio Sample Analysis at Mars (SAM) a bordo de Curiosity una docena de veces durante un periodo de 20 meses para oler el metano en la atmósfera. Durante dos de esos meses, a finales de 2013 y principios de 2014, cuatro medidas dieron como promedio siete partes por mil millones. Antes y después de eso, las lecturas indicaban sólo una décima parte de ese nivel.
Curiosity también detectó diferentes compuestos orgánicos químicos marcianos en polvo obtenido en la perforación de una roca apodada Cumberland, constituyendo la primera identificación definitiva de compuestos orgánicos en materiales de la superficie de Marte. Estos materiales orgánicos pueden haberse formado en Marte, o haber sido transportados a Marte por meteoritos.
Las moléculas orgánicas, que contienen carbono y normalmente hidrógeno, son los ladrillos químicos de la vida, aunque pueden existir sin la presencia de vida. Los descubrimientos de Curiosity no revelan si en Marte alguna vez hubo microbios vivos, pero el descubrimiento arroja luz acerca de un Marte moderno químicamente activo y sobre condiciones favorables para la vida en el Marte antiguo.
Los datos de MESSENGER sugieren una lluvia de meteoros recurrente sobre Mercurio
17/12/2014 de NASA
Mercurio parece estar sufriendo una lluvia de meteoros recurrente, quizás cuando su órbita cruza la estela de escombros dejada por el cometa Encke (ilustración artística). Crédito: NASA’s Goddard Space Flight Center.
El planeta más cercano al Sol parece estar siendo golpeado por una lluvia de meteoros periódica, posiblemente asociada con un cometa que produce episodios múltiples anualmente en la Tierra.
Las pistas que apuntan a la lluvia en Mercurio fueron descubiertas en el halo muy delgado de gases que forma la exosfera del planeta, y que está siendo estudiada por la nave MErcury Surface, Space ENvironment, GEochemistry, and Ranging (MESSENGER) de NASA.
«El posible descubrimiento de una lluvia de meteoros en Mercurio es realmente excitante y especialmente importante porque el ambiente de plasma y polvo alrededor de Mercurio está relativamente inexplorado», comenta Rosemary Killen, científico planetario de NASA.
Una lluvia de meteoros se produce cuando un planeta atraviesa un enjambre de escombros depositados por un cometa, o a veces un asteroide. Los fragmentos más pequeños de polvo, roca y hielo sienten la fuerza de la radiación solar, que los empuja alejándolos del Sol, creando la a veces espectacular cola del cometa. Los fragmentos más grandes quedan depositados como una estela de migas de pan a lo largo de la órbita del cometa.
En Mercurio, la señal de la posible lluvia de meteoros es un aumento regular de la cantidad de calcio en la exosfera, cuyo origen se sospecha que es una lluvia de pequeñas moléculas que golpean el planeta, arrancando moléculas con calcio de la superficie. Este proceso, llamado vaporización por impacto, renueva continuamente los gases en la exosfera de Mercurio gracias al polvo interplanetario y a los meteoroides que se precipitan sobre el planeta. Sin embargo, el fenómeno ahora observado sugiere la existencia de una fuente adicional de polvo, como por ejemplo un campo de escombros cometarios. «El planeta se encuentra sitiado de forma continua por el polvo interplanetario y, además, atraviesa regularmente otra tormenta de polvo, que pensamos que procede del cometa Encke».
Venus Express se dirige tranquilamente hacia la oscuridad
17/12/2014 de ESA
Ilustración de Venus Express durante la maniobra de aerofrenado en la cual la nave redujo la altura de su órbita hasta una altitud de 130-135 km, entre el 18 de junio y el 11 de julio. Crédito: ESA–C. Carreau.
Venus Express de ESA ha finalizado su misión de ocho años después de exceder con mucho su tiempo de vida previsto. La nave espacial agotó su combustible en un serie de encendidos de los motores para elevar su órbita después de la maniobra de aerofrenado a baja altitud que realizó a mediados de este año.
Entre mayo y junio de 2014, el punto más bajo de la órbita fue reduciéndose gradualmente hasta unos 130-135 km, llevándose a cabo la parte principal de la campaña de aerofrenado entre el 18 de junio y el 11 de julio.
Después de este mes zambulléndose y saliendo de la atmósfera a bajas altitudes, el punto más bajo de la órbita fue subido de nuevo por medio de una serie de 15 encendidos breves de los motores, de modo que el 26 de julio estaba de nuevo en los 460 km, proporcionándole un periodo orbital de poco más de 22 horas.
La misión continuó en una fase reducida de ciencia, mientras el máximo acercamiento de la nave a Venus decrecía de nuevo naturalmente bajo la fuerza de la gravedad del planeta.
Asumiendo que quedaba un poco de combustible todavía, se tomó la decisión de corregir este decaimiento natural con una serie de maniobras de elevación del 23 al 30 de noviembre, en un intento por prolongar la misión hasta 2015. Pero el contacto completo con Venus Express se perdió el 28 de noviembre. Desde entonces los enlaces de telemetría y telecomando fueron parcialmente restablecidos, pero eran muy inestables y sólo se podía conseguir información limitada. «La información disponible indica que la nave espacial está perdiendo control de altitud, debido principalmente a problemas de impulso durante las maniobras de elevación», comenta Patrick Martin, responsable de la misión Venus Express de ESA.
Sin combustible, sin embargo, no es ya posible controlar la altitud ni orientar Venus Express hacia la Tierra para mantener las comunicaciones. Tampoco se puede elevar más su altitud, lo que significa que la nave se hundirá de forma natural en la atmósfera durante las próximas semanas.
Europa propone viajes conjuntos con Rusia a la Luna
17/12/2014 de Nature
Imagen del polo sur de la Luna, tomada por la sonda Clementine de NASA. Éste es un territorio todavía sin explorar. Crédito: BMDO/NRL/LLNL/SPL
Los ministros de ciencia de Europa han resucitado los planes para explorar la superficie de la Luna, y la única estrategia actualmente sobre la mesa es unirse a dos misiones rusas no tripuladas. La idea, que surge después del archivo del proyecto de una sonda lunar de la ESA hace dos años, llega en medio de las crecientes tensiones políticas entre Rusia y las naciones occidentales.
La propuesta es que la ESA contribuya al Luna-Resource Lander de Roscosmos, también conocido como Luna 27, cuyo lanzamiento está previsto para 2019, así como al Lunar Sample Return, planeado para principios de la década de 2020. El primero estudiará el suelo lunar y la atmósfera en el polo sur; el segundo traerá muestras a la Tierra. ESA proporcionaría equipo de aterrizaje de precisión y de comunicaciones, así como instrumentos de perforación y análisis.
La decisión ministerial, en principio, significa que ESA puede empezar a financiar trabajos para incorporar estas tecnologías a la misión – aunque todavía falta acordar si al final esto se hará. La fase preliminar se estima que costará hasta unos 50 millones de euros. El precio total será mucho más elevado, quizás cientos de millones de euros.
A largo plazo, Ian Crawford, un científico lunar de Birkbeck, Universidad de Londres, piensa que Europa debería de mirar más allá de la colaboración con Roscosmos. Añade que la agencia espacial China, que el año pasado se convirtió en la primera desde los años 70 en colocar una sonda en la Luna, es la única que tiene científicos e ingenieros en activo que tienen experiencia en el aterrizaje en la Luna. «Podría ocurrir», comenta, «que la ESA ampliara su colaboración con otras naciones con potencial en el espacio».
Estrellas dentro de cúmulos de edad mediana tienen edades similares, sorprendiendo a los astrónomos teóricos
18/12/2014 de The Kavli Foundation / Nature
NGC 1615, un cúmulo de estrellas de edad mediana situado en la Gran Nube de Magallanes, contiene estrellas que tienen una edad más uniforme de lo que se pensaba anteriormente. Crédito: NASA/ESA Hubble Space Telescope/Fabian RRRR.
Una mirada detenida del cielo nocturno revela que a las estrellas no les gusta estar solas: por el contrario, se reúnen en cúmulos, en algunos casos conteniendo incluso varios millones de estrellas. Hasta hace poco, los más viejos de estos poblados cúmulos estelares se consideraban bien conocidos. Se pensba que las estrellas de cada grupo que se habían formado en momento diferentes, a lo largo de periodos de más de 300 millones de años. Sin embargo, una nueva investigación publicada electrónicamente en la revista Nature sugiere que la formación de las estrellas en estos cúmulos es más compleja.
Empleando datos del telescopio espacial Hubble, un equipo de astrónomos del Instituto Kavli de Astronomía y Astrofísica (KIAA) de la Universidad de Peking y de los Observatorios Astronómicos de la Academia China de Ciencias de Beijing, ha descubierto que, al menos en grandes cúmulos de edad mediana todas las estrellas parecen tener la misma edad.
Las observaciones anteriores de cúmulos masivos de estrellas mostraron una variación relativamente importante en la temperatura de las estrellas próximas a agotar el hidrógeno en su núcleo, sugiriendo que las estrellas variaban en edad en 300 millones de años o más. Así que los investigadores se sorprendieron al encontrar muy poca variación en el brillo de las estrellas de temperaturas similares cuando estudiaron estrellas ya habían agotado el hidrógeno en el centro y habían empezado a quemarlo en una capa superior. La ausencia de variación entre estas estrellas llevó a concluir que las estrellas del cúmulo estudiado, NGC 1651, deben de tener todas edades que no se diferencian en más de 80 millones de años – un rango muy pequeño para un cúmulo tan viejo.
«NGC 1651 es el mejor ejemplo que hemos encontrado hasta ahora de una verdadera población estelar con la misma edad», afirma Richard de Grijs, de KIAA. «Desde entonces hemos identificado un puñado más de cúmulos de edad mediana que parecen tener propiedades similares».
La investigación sugiere que, en el caso de cúmulos de edad mediana por lo menos, la hipótesis convencional está equivocada y podría ser común que todas las estrellas de un mismo cúmulo tengan aproximadamente la misma edad.
Un estudio sugiere que la Tierra antigua produjo su propia agua, geológicamente
18/12/2014 de The Ohio State University
Este diagrama de la tectónica de placas del Byrd Polar and Climate Research Center muestra cómo la circulación en el manto suministra rocas nuevas a la corteza por las cordilleras que hay en medio de los océanos. La nueva investigación sugiere que esa circulación del manto también aporta agua a los océanos. Crédito: Byrd Polar and Climate Research Center.
Un nuevo estudio ha contribuido a responder a una antigua pregunta que recientemente ha adquirido protagonismo en las ciencias de la Tierra: ¿pudo nuestro planeta crear su propia agua a través de procesos geológicos, o nos llegó el agua por medio de cometas helados procedentes de lejanas regiones del Sistema Solar?
La respuesta probablemente es sí a las dos opciones, según investigadores de The Ohio State University, y la misma cantidad de agua que llena actualmente el océano Pacífico podría estar enterrada en el interior de nuestro planeta ahora mismo.
En la reunión de la American Geophysical Union (AGU) de esta semana, estos científicos han anunciado el descubrimiento de un proceso geoquímico hasta ahora desconocido por el que la Tierra puede secuestrar agua en su interior durante miles de millones de años y también liberar pequeñas cantidades a la superficie a través de la tectónica de placas, alimentando a los océanos desde dentro.
Intentando comprender la formación de la Tierra primitiva, algunos investigadores han sugerido que el planeta era seco e inhóspito para la vida hasta que los cometas helados apedrearon la Tierra, depositando agua en su superficie. Pero la Dra. Wendy Panero y el estudiante de doctorado Jeff Pigott han comprobado una hipótesis diferente: que la Tierra se formó con océanos enteros de agua en su interior, y que ha estado suministrando agua de forma continua a la superficie a través de la tectónica de placas desde entonces.
Las estrellas azules calientes de Messier 47
18/12/2014 de ESO
Esta espectacular imagen del cúmulo estelar Messier 47 fue tomada con la cámara Wide Field Imager, instalada en el telescopio MPG/ESO de 2,2 metros, en el Observatorio La Silla de ESO (Chile). Este joven cúmulo abierto está dominado por un puñado de brillantes estrellas azules, pero, en contraste, también contiene algunas estrellas gigantes rojas. Crédito: ESO.
Esta espectacular imagen del cúmulo estelar Messier 47 fue tomada con la cámara Wide Field Imager, instalada en el telescopio MPG/ESO de 2,2 metros, en el Observatorio La Silla de ESO (Chile). Este joven cúmulo abierto está dominado por un puñado de brillantes estrellas azules, pero, en contraste, también contiene algunas estrellas gigantes rojas.
Messier 47 está situado, aproximadamente, a 1.600 años luz de la Tierra, en la constelación de Puppis (la popa de la nave mitológica Argo). Fue observada por primera vez antes de 1664 por el astrónomo italiano Giovanni Battista Hodierna, y más tarde descubierta por Charles Messier, quien, al parecer, no tenía conocimiento de la observación previa llevada a cabo por Hodierna.
Los brillantes colores blancoazulados de estas estrellas son una indicación de la temperatura, con estrellas más calientes que se ven en tonos más azules y estrellas más frías que tienden a colores más rojizos. Esta relación entre el color, el brillo y la temperatura se puede visualizar por medio de la curva de Planck. Pero un estudio más detallado de los colores de las estrellas usando la espectroscopía, también dice a los astrónomos mucho más — incluyendo con qué velocidad giran las estrellas y sus composiciones químicas. En la imagen, también hay unas brillantes estrellas rojas — se trata de estrellas gigantes rojas que atraviesan ciclos de vida más cortos que las estrellas azules, menos masivas y de vidas más largas.
Una «tormenta perfecta» suprime la formación de estrellas alrededor de un agujero negro supermasivo
18/12/2014 de National Radio Astronomy Observatory
Ilustración artística de la región central de NGC 1266. Los chorros que salen del agujero negro central están creando una turbulencia en el gas molecular de los alrededores, deteniendo la formación de estrellas en lo que de otro modo sería el ambiente ideal para formar nuevas estrellas. Crédito: B. Saxton (NRAO/AUI/NSF).
Chorros de alta energía alimentados por agujeros negros supermasivos pueden expulsar el combustible que tiene una galaxia para formar estrellas, dando lugar a las llamadas «galaxias rojas y muertas»: ésas que bullen con antiguas estrellas rojas aunque contienen poco o nada de gas de hidrógeno para crear nuevas.
Ahora los astrónomos que utilizan el Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA) han descubierto que el agujero negro no tiene que ser muy potente para apagar la formación de estrellas. Observando el polvo y el gas en el centro de NGC 1266, una galaxia lenticular cercana con un agujero negro central relativamente modesto, los astrónomos han detectado una «tormenta perfecta» de turbulencia que está deteniendo la formación de estrellas en una región que, de otro modo, sería una fábrica estelar ideal.
Esta turbulencia es producida por chorros procedentes del agujero negro central de la galaxia que chocan contra una envoltura de gas increíblemente densa. Esta densa región, que puede ser el resultado de una fusión reciente con otra galaxia más pequeña, bloquea casi el 98 por ciento del material expulsado por los chorros que escapan del centro galáctico.
«Como una fuerza imparable que se encuentra con un objeto inamovible, las partículas de estos chorros encuentran tanta resistencia cuando golpean el gas denso de los alrededores que son casi detenidas por completo en su camino» afirma Katherine Alatalo, astrónoma del California Institute of Technology. Esta colisión energética produce una potente turbulencia en el gas de los alrededores, perturbando la primera fase crítica de la formación estelar. «Así que lo que hemos visto es la supresión más intensa de formación de estrellas jamás observada», señala Alatalo.
Chandra ‘pesa’ el cúmulo de galaxias más masivo del Universo lejano
19/12/2014 de Chandra
El cúmulo XDCP J0044.0-2033, apodado el «Gioiello», formado sólo 3300 millones de años después del Big Bang, es el más masivo encontrado en una época tan temprana del Universo, pesando 400 billones de veces la masa del Sol. Crédito: rayos X: NASA/CXC/INAF/P.Tozzi, et al; Optico: NAOJ/Subaru y ESO/VLT; Infrarrojo: ESA/Herschel
Empleando el observatorio de rayos X Chandra de NASA, los astrónomos han determinado por primera vez la masa y otras propiedades de un cúmulo de galaxias joven y lejano.
El estudio de Chandra muestra que el cúmulo de galaxias, observado a una edad relativamente joven de 800 millones de años, es el cúmulo conocido más masivo con esta edad o más joven. Debido a que se trata de las mayores estructuras conocidas que están ligadas gravitacionalmente, los cúmulos de galaxias son ejemplos cruciales de cómo ha evolucionado el Universo con el tiempo.
El cúmulo fue descubierto inicialmente por el observatorio XMM-Newton de ESA, y se encuentra a unos 9600 millones de años-luz de la Tierra. Los astrónomos emplearon datos de rayos X obtenidos con Chandra que, combinados con modelos científicos, proporcionan un peso preciso del cúmulo, que alcanza los 400 billones de veces la masa del Sol. Los científicos piensan que el cúmulo se formó unos 3300 millones de años después del Big Bang.
El cúmulo tiene el nombre oficial de XDCP J0044.0-2033, pero los investigadores lo han apodado «Gioiello», que es la palabra italiana para «joya». Han elegido este nombre debido a que una imagen de este cúmulo contiene muchos puntos de colores relucientes debidos al gas caliente que emite en rayos X y a varias galaxias con formación de estrellas que están en el cúmulo.
«El encontrar este enorme cúmulo de galaxias en una época tan temprana significa que podría haber más allá afuera» afirma Paolo Tozzi, del Insituto Nacional de Astrofísica (INAF) de Florencia, quien ha dirigido el nuevo estudio. «Este tipo de información podría tener consecuencias en nuestras teorías acerca de cómo se formó y evolucionó la estructura a gran escala del Universo».
Descubierto el origen de las auroras de latitudes altas
19/12/2014 de ESA
La cara nocturna de la magnetosfera terrestre forma una magnetocola estructurada, que consiste en una capa de plasma a bajas latitudes que se encuentra atrapada entre dos regiones llamadas lóbulos de la magnetocola. Los lóbulos son regiones en las que las líneas del campo magnético de la Tierra están conectadas directamente con el campo manético transportado por el viento solar. Se observan diferentes poblaciones de plasma en estas regiones -el plasma en los lóbulos está muy frío, mientras que la capa de plasma es más energética. Crédito: ESA/NASA/SOHO/LASCO/EIT .
Las auroras son la manifestación más visible del efecto del Sol sobre la Tierra, pero muchos aspectos de estas espectaculares manifestaciones son todavía poco comprendidos. Gracias a los satélites Cluster de ESA e Image de NASA, que han trabajado juntos, un tipo particular de auroras de muy alta latitud ha sido ahora explicado.
Aunque separados unos 150 millones de kilómetros, el Sol y la Tierra están conectados por el viento solar. Este flujo de plasma – partículas atómicas con carga eléctrica – es lanzado por el Sol y viaja a través del Sistema Solar, transportando con él su campo magnético. Dependiendo de cómo este «campo magnético interplanetario» esté alineado con el campo magnético de la Tierra cuando llega, los resultados pueden ser diferentes.
En el punto de encuentro entre los dos campos, el campo magnético de la Tierra apunta al norte. Si el campo interplanetario está apuntando al sur, se produce la ‘reconexión magnética’, en la que las líneas de campo magnético con direcciones opuestas se rompen de forma espontánea y reconectan con otras líneas de campo cercanas. Esto abre la puerta a que el plasma del viento solar penetre en la magnetosfera – la ‘burbuja’ magnética de la Tierra.
Pero cuando el campo magnético interplanetario apunta al norte, las auroras pueden producirse a latitudes más altas de lo normal. Una clase de estas auroras es la llamada ‘aurora theta’ porque vista desde arriba parece la letra griega theta – un óvalo con una línea cruzándolo por el centro.
La nueva investigación ha descubierto que las auroras theta se producen debido a un mecanismo que atrapa el plasma solar en la magnetosfera durante el proceso de reconexión magnética que se produce en la cara nocturna de la Tierra.
Kepler demuestra que todavía puede descubrir planetas
19/12/2014 de CfA
Esta ilustración artística muestra el primer planeta descubierto por la nave espacial Kepler durante su misión K2. Un tránsito del planeta fue encontrado entre los ruidosos datos que se obtienen en la misión K2, empleando ingeniosos algoritmos de computadora desarrollados por un investigador del CfA. El planeta recién descubierto, HIP 116454b, tiene un diámetro de 32000 kilómetros (dos veces y media el tamaño de la Tierra) y pesa 12 veces más. Completa una órbita alrededor de su estrella cada 9.1 días. Crédito: David A. Aguilar (CfA) .
Parafraseando a Mark Twain, el anuncio de la muerte de la nave espacial Kepler fue grandemente exagerado. A pesar de que un fallo de funcionamiento que puso fin a su misión primaria en mayo de 2013, Kepler aún está viva y trabajando. La evidencia que lo confirma es el descubrimiento de una nueva supertierra usando datos tomados durante la «segunda vida» de Kepler.
«Como un fénix alzándose de las cenizas, Kepler ha renacido y continua realizando descubrimientos. Aún más, el planeta que ha encontrado es adecuado para realizar más estudios sobre él», afirma Andrew Vanderburg del Harvard-Smithsonian Center for Astrophysics (CfA).
El planeta recién descubierto, HIP 116454b, tiene un diámetro de 32000 kilómetros, dos veces y media el tamaño de la Tierra. El espectrógrafo HARPS-North del Telescopio Nazionale Galileo en las Islas Canarias mostró que pesa casi 12 veces más que la Tierra. Esto convierte a HIP 116454b en una supertierra, una clase de planetas que no existe en nuestro Sistema Solar. La densidad promedio sugiere que este planeta puede ser o bien un mundo de agua (compuesto en unas tres cuartas partes de agua y una de roca) o bien un minineptuno con una extensa atmósfera gaseosa.
Concurso público para poner nombre a cráteres de Mercurio
19/12/2014 de IAU
Imagen con colores realzados del planeta Mercurio, tomada por la sonda MESSENGER. Estos colores no son los que veríamos sino que se utilizan para resaltar las diferencias químicas, mineralógicas y físicas entre las rocas que componen la superficie de Mercurio. Crédito: NASA/Johns Hopkins University Applied Physics Laboratory/Carnegie Institution of Washington
El equipo de educación y divulgación de la misión MESSENGER y la Unión Astronómica Internacional (IAU) han lanzado esta semana un concurso para poner nombre a cinco cráteres de impacto de Mercurio. El concurso está abierto a todo el mundo, a excepción de los miembros de dicho equipo. Estará en marcha del 15 de diciembre al 15 de enero.
La IAU estipula que todos los nuevos cráteres en Mercurio deben de tener el nombre de un artista, compositor o escritor que haya sido famoso durante más de 50 años y lleve muerto por lo menos tres. Puede consultar la lista actual de cráteres de Mercurio con nombre en http://planetarynames.wr.usgs.gov/SearchResults?target=MERCURY&featureType=Crater,%20craters .
La nave espacial MESSENGER ha permanecido en órbita alrededor de Mercurio desde marzo de 2011, superando con creces la duración de la misión y la calidad y cantidad de datos obtenidos. El objetivo de MESSENGER era tomar 2500 imágenes del planeta, pero ha enviado más de 250 000. La misión finalizará la próxima primavera cuando la diminuta nave caiga sobre Mercurio.
Encuentran indicios meteoríticos de una reserva de agua en Marte
22/12/2014 de NASA
Esta ilustración muestra reservas de agua marcianas. Investigaciones recientes proporcionan datos acerca de la existencia de una tercera reserva que posee una composición isotópica intermedia entre la del manto del Planeta Rojo y su atmósfera actual. Estos resultados apoyan la hipótesis de que gran parte de la cantidad inicial de agua de Marte se halla en una criosfera enterrada. Crédito: NASA
NASA y un equipo internacional de científicos planetarios han encontrado indicios en meteoritos caídos a la Tierra que indican que Marte posee una reserva de agua o hielo global y diferenciada, cerca de su superficie.
Aunque el origen, abundancia e historia del agua en Marte es controvertido, este descubrimiento ayuda a resolver la cuestión acerca de dónde puede haber ido el agua que «falta» en Marte. Los científicos continúan estudiando el registro histórico del planeta, intentando comprender el aparente paso de un clima primitivo cálido y húmedo a las condiciones secas y frías de hoy en día.
La existencia de la reserva puede también ser clave para comprender la historia del clima y el potencial para la vida en Marte.
Los investigadores han estudiado tres meteoritos marcianos. Las muestras revelan agua compuesta por átomos de hidrógeno con proporciones de sus isótopos distintas de las encontradas en agua del manto del Planeta Rojo y en la atmósfera actual. Los isótopos son átomos del mismo elemento pero con un número distinto de neutrones. Además, el estudio se ha realizado sobre meteoritos de edades diferentes para demostrar que una cantidad importante de agua-hielo puede haber permanecido intacta frente al paso del tiempo.
No detectan «plumas» en Europa en los datos de Cassini
22/12/2014 de JPL
La luna helada Europa de Júpiter muestra signos de actividad, incluyendo su corteza fracturada y multitud de cráteres de impacto. Los científicos continúan buscando la confirmación de actividad de plumas. Crédito: NASA/JPL-Caltech/SETI Institute
Una nueva revisión de datos obtenidos por la misión Cassini de NASA durante su paso por Júpiter en 2001 muestra que la tenue atmósfera de Europa es incluso más fina de lo que se pensaba, y también sugiere que la delgada capa de gas caliente que rodea la luna no muestra evidencias de chorros de material que se produjeran en el momento de la aproximación. Esta nueva investigación proporciona una instantánea del estado de actividad de Europa en aquel momento, y sugiere que, si hay actividad de chorros o «plumas» en ese momento, sugiriendo que, si existe actividad de plumas, es probablemente intermitente.
Miembros del equipo del espectrógrafo ultravioleta de Cassini UVIS analizaron los datos tomados por su instrumento durante el breve tiempo en que pudo observar Europa en 2001, mientras Cassini cruzaba el sistema de Júpiter de camino a Saturno. Las observaciones muestran que la mayor parte del gas caliente excitado, o plasma, que hay alrededor de Europa no se origina en la propia luna, sino en volcanes de la cercana luna Io. De hecho, a partir de sus datos, los investigadores calcularon que Europa aporta 40 veces menos oxígeno de lo que se pensaba al ambiente que la rodea.
«Nuestro trabajo muestra que los investigadores han sobrestimado bastante la densidad de la atmósfera de Europa » afirma Don Shemansky, director del estudio. El equipo descubrió que la tenue atmósfera de la luna, que ya se pensaba que era millones de veces menos densa que la atmósfera de la Tierra, es de hecho unas 100 veces menos densa de lo señalado en esas estimaciones previas.
Esta revisión a la baja de la cantidad de oxígeno que Europa bombea al ambiente alrededor de Júpiter haría menos probable que la luna expulsara regularmente chorros o plumas de vapor de agua a órbita, especialmente cuando se tomaron los datos.
Grupos compactos de galaxias revelan detalles de sus encuentros cercanos
22/12/2014 de National Optical Astronomy Observatory
El Grupo Compacto de Galaxias conocido como el Sexteto de Seyfert. Cuatro de estas galaxias están en interacción. La quinta galaxia está situada al fondo y la sexta es realmente material expulsado en la interacción, lo que la convierte en la mejor candidata del Universo local a ostentar el título de galaxia enana de marea. Crédito: Dane Kleiner
Las galaxias rara vez se encuentran aisladas, sino que suelen estar en grupos dispersos. Pero ocasionalmente se encuentran en concentraciones densas, a menudo situadas en el centro de cúmulos gigantes, pero también, extrañamente, en grupos compactos más aislados (sí, llamados Grupos Galácticos Compactos, GGC). Las galaxias de estos grupos compactos muestran importantes diferencias en el modo en que evolucionan y cambian con el tiempo, comparadas con galaxias situadas en ambientes más aislados. ¿Por qué es esto? Las colisiones entre las galaxias de estos grupos densos son comunes, conduciendo a una rápida formación de estrellas, pero parece que hay más piezas en este rompecabezas.
Un equipo dirigido por el Dr. Iraklis Konstantopoulos del Australian Astronomical Observatory (AAO) ha obtenido ahora imágenes espectaculares de algunos grupos compactos con la cámara Dark Energy instalada en el telescopio Blanco de 4 m del Observatorio Interamericano de Cerro Tololo (CTIO).
«Las nuevas imágenes son absolutamente fantásticas, y revelan débiles flujos de gas y estrellas llamados colas de marea, creados por la interacción gravitacional mutua entre dos galaxias que sufren un encuentro cercano». Las colas, una delante y la otra detrás de la galaxia, persisten un largo tiempo después del encuentro, y esto permite a los astrónomos calcular cuánto hace que se produjo este suceso.
«Las imágenes revelan la historia de ensamblaje de estas galaxias que viven tan cerca a través de sus interacciones previas» afirma el Dr. Konstantopoulos. «Buscamos colas de escombros y determinamos de manera aproximada sus edades. La época en que las interacciones crearon los escombros y la posición de estos ‘fósiles’ nos indica qué galaxias interaccionaron y cuándo».
XMM-Newton observa un agujero negro monstruoso escondido en una diminuta galaxia
22/12/2014 de ESA
Esta imagen muestra emisión en rayos X de la galaxia enana J1329+3234 (en el centro de esta imagen) y de un AGN situado al fondo (abajo izquierda), medidos por XMM-Newton en junio de 2013. Crédito: ESA/XMM-Newton/N. Secrest, et al. (2015)
Las primeras impresiones pueden ser engañosas: los astrónomos han encontrado con el satélite de rayos X XMM-Newton de ESA, un agujero negro masivo alimentándose frenéticamente dentro de una diminuta galaxia enana, a pesar de que no había rastro de este agujero negro en las observaciones en el óptico.
La galaxia, una enana irregular llamada J1329+3234, es una de las galaxias más pequeñas con indicios de albergar un agujero negro masivo. Situada a más de 200 millones de años-luz, la galaxia es parecida en tamaño a la Pequeña Nube de Magallanes, una de nuestras galaxias vecinas más cercanas, y contiene unos pocos millones de estrellas.
En 2013, un equipo internacional de astrónomos quedó perplejo al descubrir señales en el infrarrojo de un agujero negro acretando materia dentro de J1329+3234, cuando estudiaban esta galaxia con el satélite Wide-Field Infrared Survey Explorer (WISE). El mismo equipo ha estudiado más esta galaxia ahora, empleando XMM-Newton de ESA para buscar este agujero negro en rayos X, encontrando algo muy sorprendente.
«La emisión en rayos X de J1329+3234 es más de 100 veces más potente de lo esperado para esta galaxia» afirma Nathan Secrest de George Mason University, director del trabajo. «Típicamente esperaríamos encontrar un nivel bajo en la emisión de rayos X debida a agujeros negros de masa estelar en el interior de la galaxia, pero lo que hemos encontrado, en cambio, fue emisión propia de un agujero negro muy masivo».
La nueva vecina de la Vía Láctea
23/12/2014 de Royal Astronomical Society
Una imagen en negativo de Kks 3, obtenida con la cámara Advanced Camera for Surveys del telescopio espacial Hubble. El centro de la galaxia es el objeto oscuro de la derecha en la parte superior central de la imagen, cuyas estrellas están dispersas, cubriendo una gran zona alrededor de él. Crédito: D. Makarov
La Vía Láctea, la galaxia en la que vivimos, forma parte de un cúmulo de más de 50 galaxias que constituyen el «Grupo Local», una colección que incluye la famosa galaxia de Andrómeda y muchos otros objetos mucho más pequeños. Ahora, un equipo ruso-americano ha encontrado una diminuta galaxia enana aislada a casi 7 millones de años-luz de distancia, que también forma parte de este grupo.
Los investigadores, dirigidos por el Profesor Igor Karachentsev del Observatorio Astrofísico de Karachai-Cherkessia, Rusia, han encontrado la nueva galaxia, llamada Kks 3, usando la cámara Advanced Camera for Surveys (ACS) del telescopio espacial Hubble, en agosto de 2014. Kks3 está situada en el cielo del hemisferio sur, en la dirección a la constelación de la Hidra, y sus estrellas sólo suman una diezmilésima de la masa de la Vía Láctea.
Kks 3 es una enana esferoidal o galaxia dSph, a la que le faltan estructuras como los brazos espirales que encontramos en nuestra propia galaxia. Estos sistemas carecen de los materiales básicos (gas y polvo) necesarios para crear nuevas generaciones de estrellas, quedando en ellas reliquias más viejas y poco brillantes. En casi todos los casos, este material en bruto parece haber sido arrancado por galaxias masivas cercanas, como Andrómeda, así que la mayoría de objetos dSph se encuentran cerca de compañeras mucho mayores.
Los objetos aislados deben de haberse formado de otro modo, siendo una posibilidad que tuvieran un brote de formación estelar temprano que agotó los recursos de gas disponibles. Los astrónomos están especialmente interesados en encontrar objetos dSph para comprender la formación de las galaxias en el Universo en general, ya que incluso el HST tiene dificultades para observarlos más allá del Grupo Local. La ausencia de nubes de gas hidrógeno en nebulosas también hace que sean más difíciles de encontrar en rastreos, así que los científicos intentan localizarlas encontrando estrellas individuales. Por esta razón, hasta ahora sólo se había encontrado otra galaxia enana esferoidal aislada, Kkr 25, en el Grupo Local.
El Sol chisporrotea en rayos X de alta energía
23/12/2014 de JPL
Flujos de rayos X salen del Sol en esta imagen que muestra las observaciones del telescopio espacial Nuclear Spectroscopic Telescope Array, o NuSTAR, de NASA, sobre una fotografía tomada por el Solar Dynamics Observatory (SDO) de NASA: Crédito: NASA/JPL-Caltech/GSFC
Por primera vez, una misión diseñada para poner sus ojos en agujeros negros y otros objetos lejos de nuestro Sistema Solar ha vuelto su mirado más cerca de casa, captando imágenes de nuestro Sol. El telescopio espacial Nuclear Spectroscopic Telescope Array, o NuSTAR, de NASA, ha tomado su primera imagen del Sol, produciendo el retrato solar más sensible jamás tomado en rayos X de alta energía.
«NuSTAR nos proporcionará una mirada única al Sol, desde las zonas más profundas a las más altas de su atmósfera», afirma David Smith, un físico solar miembro del equipo NuSTAR de la Universidad de California, Santa Cruz.
La primera imagen solar de NuSTAR ha demostrado que, realmente, el telescopio puede tomar datos del Sol. Y ha aportado información sobre cuestiones como las temperaturas notablemente altas que encontramos sobre las manchas solares – zonas oscuras y frías del Sol. Las próximas imágenes proporcionarán mejores datos mientras el Sol se va calmando a lo largo del ciclo solar.
«Llegaremos a nuestro objetivo cuando el Sol quede tranquilo» afirma Smith, explicando que la actividad solar bajará durante los próximos años. NuSTAR tiene el potencial de observar nanofulguraciones, versiones hipotéticas más pequeñas de las fulguraciones gigantes del Sol que explotan con partículas cargadas y radiación de alta energía. Las nanofulguraciones, si existen, podrían explicar por qué la atmósfera exterior del Sol, llamada corona, está abrasadoramente caliente, un misterio llamado el «problema del calentamiento de la corona». La corona se encuentra en promedio a 1 millón de grados Celsius, mientras que la superficie del Sol está relativamente fría, a 6000 grados Celsius. Es como una llama saliendo de un cubito de hielo. Las nanofulguraciones, en combinación con las fulguraciones, pueden ser fuente de un intenso calor.
Científicos rusos cartografían vapor de agua en la atmósfera marciana
23/12/2014 de EurekAlert
Esta gráfica muestra la distribución en latitud de la humedad de la atmósfera de Marte durante el año, según los datos tomados por los instrumentos de SPICAM. Crédito: Alexander Trokhimovsky
Científicos rusos del Instituto de Investigaciones Espaciales de la Academia Rusa de las Ciencias y del Instituto de Física y Tecnología de Moscú, junto con otros colaboradores de Francia y Estados Unidos, han creado un «mapa» de la distribución del vapor de agua en la atmósfera de Marte. Su investigación incluye observaciones de variaciones estacionales en las concentraciones atmosféricas, empleando datos acumulados durante diez años por el espectrómetro ruso-francés SPICAM a bordo del orbitador Mars Express. Se trata del periodo de observación más largo disponible, y constituye el mayor volumen de datos sobre vapor de agua en Marte.
Las condiciones presentes en Marte (bajas temperaturas y baja presión atmosférica) no permite la existencia de agua en forma líquida en reservas al descubierto, como ocurre en la Tierra. Sin embargo, en Marte existe una importante capa de permafrost, con grandes reservas de agua congelada concentradas en los casquetes polares. Existe vapor de agua en la atmósfera, aunque con niveles muy bajos comparados con los de la Tierra. Si el volumen completo de agua de la atmósfera fuera distribuido de forma regular por la superficie del planeta, el grosor de la capa de agua no superaría las 10-20 micras, mientras que tal capa en la Tierra sería miles de veces más gruesa.
Los datos del experimento SPICAM han permitido a los científicos crear una imagen del ciclo anual de la variación de la concentración del vapor de agua en la atmósfera.
El contenido de vapor de agua en la atmósfera alcanza un nivel máximo de 60-70 micras de agua liberada en las regiones del norte durante el verano. El máximo veraniego del hemisferio sur es significativamente menor- unas 20 micras. Los científicos han constatado también una importante reducción en la concentración de vapor de agua durante las tormentas de arena globales, que está probablemente conectada con la eliminación de vapor de agua de la atmósfera debido a procesos de adsorción y condensación sobre superficies.
Hubble observa una desordenada fábrica de estrellas, Markarian 209
23/12/2014 de SpaceRef
La galaxia enana compacta Markarian 209, vista por el telescopio espacial Hubble. La imagen es una combinación de imágenes tomadas en luz ultravioleta, visible e infrarroja. La nube azul arriba a la derecha es una región de intensa formación estelar. Crédito: NASA/ESA/STSCI
Esta mancha de purpurina cósmica es una galaxia enana compacta conocida como Markarian 209. Las galaxias de este tipo tienen tonalidades azules, son de tamaño compacto, ricas en gas y con pocos elementos pesados. A menudo se emplean para estudiar la formación de estrellas, ya que sus condiciones son similares a las que se piensa que existieron en el Universo primitivo.
Markarian 209 en particular ha sido muy estudiada. Está llena de gas difuso, salpicada con regiones de formación estelar hacia su núcleo. Esta imagen la capta sufriendo un brote particularmente dramático de formación estelar, visible en la región neblinosa azul claro de la parte superior derecha de la galaxia. Esta zona está llena de estrellas recién nacidas, muy jóvenes y calientes.
Al principio se pensó que esta galaxia era joven y que estaba sufriendo su primer episodio de formación estelar, pero investigaciones posteriores demostraron que Markarian 209 es de hecho muy vieja, con una historia casi continua de formación de nuevas estrellas. Se piensa que nunca ha tenido un periodo tranquilo, un lapso de tiempo que durara más de 100 millones de años y durante el que no se formaran nuevas estrellas.
Las observaciones empleadas para crear esta imagen fueron tomadas usando las cámaras Wide Field Camera 3 y Advanced Camera for Surveys del Hubble, y cubren las partes ultravioleta, visible, e infrarroja del espectro. Por el resto de la imagen hay dispersas otras galaxias brillantes, incluyendo el resplandeciente óvalo dorado que podría, debido a un truco de la perspectiva, pensarse erróneamente que es parte de Markarian 209, y que realmente es una galaxia situada al fondo.