Un trabajo de casi tres años, realizado por investigadores del Instituto de Astrofísica de Canarias y la Universidad de La Laguna, crea la imagen más profunda del Universo tomada desde el espacio, recuperando una enorme cantidad de luz alrededor de las galaxias más grandes del Campo Ultra Profundo del Hubble.
Los agujeros negros masivos se forman en regiones densas sin estrellas que están creciendo rápidamente.
Esta importante publicación de datos del sondeo Sloan Digital Sky Survey incluye mapas de galaxias, nuevas herramientas de visualización y acceso a los datos y una enorme «biblioteca estelar».
Ingenieros del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de NASA han empezado a transmitir una nueva serie de comandos al róver Opportunity en un intento por obligar al explorador marciano de 15 años de edad a contactar con la Tierra.
Por primera vez, los astrónomos han detectado un cuerpo de 1.3 km de radio en los confines del Sistema Solar.
En las fases más tempranas que sólo se pueden estudiar con cuásares, los investigadores encuentran una discrepancia entre la evolución observada del Universo y lo que se espera en base al modelo cosmológico estándar.
Esto permitirá a los astrónomos y usuarios públicos del archivo buscar en el sondeo completo fenómenos explosivos de alta energía en el cosmos, descubrir objetos en movimiento de nuestro Sistema Solar y explorar la evolución temporal del Universo.
Escáneres cerebrales de astronautas antes y después de vuelos espaciales muestran cambios de la sustancia blanca en áreas que controlan el movimiento y procesan la información de los sentidos.
La luz oblicua de esta imagen revela nuevos detalles topográficos a lo largo de la línea de separación entre el día y la noche (llamada terminador) cerca de la parte superior.
Las extrañas órbitas de algunos objetos que están en las afueras de nuestro Sistema Solar, que según algunos astrónomos podrían ser debidas a un noveno planeta desconocido, pueden ser explicadas por la fuerza gravitatoria combinada de objetos pequeños en órbita más allá de Neptuno, en el llamado Cinturón de Kuiper.
as diferencias son probablemente debidas a la compresión de la magnetocola de la Tierra provocada por el viento solar y el campo magnético del Sol.
Las simulaciones aportan nuevos datos sobre qué es lo que controla los potentes chorros de plasma.
