Etiquetado: agujeros negros primordiales
El agujero negro de Mrk 462 tiene una masa equivalente a unas 200 000 veces la masa de nuestro Sol, lo que le convierte en uno de los pequeños dentro de la categoría de supermasivos. Se trata de la primera vez que se ha encontrado un agujero negro supermasivo profundamente enterrado por gas y polvo en una galaxia enana.
Según este modelo, el Universo estaría lleno de agujeros negros por todas partes. Las estrellas empezarían a formarse alrededor de estas concentraciones de «materia oscura», creando sistemas solares y galaxias al cabo de miles de millones de años. Si las primeras estrellas se formaron realmente alrededor de agujeros negros primordiales, habrían existido en una época más temprana del Universo de lo que se espera según el modelo estándar de la cosmología.
«Este agujero negro recién descubierto podría ser una antigua reliquia (un agujero negro primordial) creado en el Universo primitivo antes de que se formaran las primeras estrellas y galaxias», explica Eric Thrane (Monash University).
Científicos de la Universidad de Harvard y de la Iniciativa Agujero Negro (BHI) han desarrollado un nuevo método para descubrir agujeros negros en el sistema solar exterior y, al mismo tiempo, determinar de una vez por todas la naturaleza verdadera del hipotético Planeta Nueve.
Los autores del estudio sugieren que el cuásar debería de haber tenido comienzo a partir de una «semilla» de agujero negro que ya contenía el equivalente a 10 000 soles tan solo 100 millones de años después del Big Bang.
Demostrando matemáticamente que su existencia fue posible en el Universo joven, los resultados de esta investigación reconcilian el tiempo necesario para el crecimiento de los agujeros negros supermasivos con los límites impuestos por la edad del Cosmos.
La teoría de que la materia oscura pudiera estar constituida por agujeros negros primordiales (formados una fracción de segundo después del Big Bang) con tamaños de una fracción de milímetro ha sido descartada.
20/12/2019 de ESO / The Astrophysical Journal Utilizando el Very Large Telescope de ESO, un equipo de astrónomos ha observado reservorios de gas frío alrededor de algunas de las primeras galaxias del universo. Estos halos...
Un equipo de astrofísicos de la universidad Western University (USA) ha encontrado pruebas de la formación directa de agujeros negros que no necesitan emerger de los restos de estrellas.
Los resultados han descartado la posibilidad de que la materia oscura esté compuesta en su mayor parte por agujeros negros primordiales más pequeños que una décima de milímetro.
Los agujeros negros primordiales no pueden constituir más del 40 por ciento de la materia oscura del Universo.
Si los halos de las galaxias, donde se supone que hay gran cantidad de materia oscura, están compuestos por agujeros negros, deberían de tener una distribución de la densidad diferente a si los halos estuvieran formados por partículas exóticas.