Una imagen espacial nueva revela un «bastón de caramelo» cósmico
Los astrónomos han detectado el filamento emisor de luz en radio más prominente del centro galáctico.
Los astrónomos han detectado el filamento emisor de luz en radio más prominente del centro galáctico.
Gracias a estas nuevas observaciones, los astrónomos han encontrado evidencias de un acontecimiento dramático en la vida de la Vía Láctea: un estallido de formación estelar tan intenso que resultó en más de cien mil explosiones de supernovas.
Nuevas observaciones de la galaxia NGC 1068 han arrojado luz sobre cómo las galaxias espirales como la nuestra consiguen su peculiar forma.
4/12/2012 de Science in public / Monthly Notices of the Royal Astronomical Society Los terremotos estelares registrados por el telescopio espacial Kepler de NASA han ayudado a determinar la edad del «disco grueso» de la...
Un radiotelescopio instalado en Australia Occidental ha captado una espectacular imagen nueva del centro de la galaxia en la que vivimos, la Vía Láctea.
onstruido a partir de 208 imágenes tomadas durante el primer año de operaciones científicas de la misión y completado el pasado 18 de julio, el panorama revela tanto la belleza del paisaje cósmico como el alcance de las cámaras de TESS.
El gas podría provenir del medio intergaláctico, o bien la Vía Láctea puede que esté robando gas de sus pequeñas galaxias satélite, usando su atracción gravitatoria considerablemente superior.
Varias de las galaxias pequeñas (o «enanas») que están en órbita alrededor de la Vía Láctea pueden haber sido robadas a su galaxia vecina la Gran Nube de Magallanes, incluyendo varias enanas ultradébiles pero también galaxias satélite relativamente brillantes y bien conocidas como Carina y Fornax.
Un titánico haz de energía surgió cerca del agujero negro supermasivo del centro de la Vía Láctea hace tan solo 3.5 millones de años, lanzando un cono de radiación desde los dos polos de la Galaxia hacia el espacio profundo.
Los flujos de partículas emitidos por las estrellas, llamados vientos estelares, así como la presión de la luz que producen las estrellas, pueden empujar el material hacia el exterior, creando a veces burbujas con un perímetro definido.
El mapa confirma que el disco de la Vía Láctea no es plano sino que está alabeado a distancias mayores de 25 000 años-luz del centro galáctico.
El enorme agujero negro del centro de nuestra galaxia está engullendo una cantidad inusualmente grande de gas y polvo interestelares y los investigadores aún desconocen la razón de ello.