Los minerales de arcilla de Marte pueden haberse formado en un baño de vapor primordial
11/12/2017 de Brown University / Nature
Científicos planetarios de la Universidad de Brown han propuesto un nuevo escenario para la formación de antiguos minerales de arcilla en Marte que de ser confirmado podría reescribir la historia temprana del planeta rojo.
Existen miles de afloramientos de filosilicatos antiguos en la superficie marciana. Los filosilicatos (silicatos en láminas) o arcillas, se forman por la interacción del agua con roca volcánica, lo que lleva a muchos científicos a concluir que debió de existir agua de forma permanente en la superficie, agua subterránea o sistemas hidrotermales activos en algún momento de la historia marciana. Pero la nueva investigación sugiere que las arcillas podrían haberse formado durante la creación de la propia corteza marciana, mucho antes de que fluyera agua sobre el planeta.
Basándose en experimentos de laboratorio y modelos por computadora, los investigadores han propuesto el escenario siguiente. En el sistema solar primitivo, se piensa que Marte y otros planetas rocosos estuvieron cubiertos por océanos de magma fundido. Cuando el océano de magma empezó a enfriarse y solidificar, el agua y otros volátiles disueltos en él escaparían en forma de gas a la superficie, formando una gruesa atmósfera de vapor que rodeó el planeta. La humedad y el calor de este baño de vapor a alta presión habría convertido grandes extensiones de la superficie recién solidificada en arcilla. Mientras el planeta evolucionaba durante el transcurso de miles de millones años, la actividad volcánica y el bombardeo de asteroides habrían cubierto las arcillas en algunos lugares, excavándolas en otros, produciendo la distribución amplia pero irregular observada actualmente en la superficie.
Si este proceso tuvo lugar realmente, podría tener algunas consecuencias interesantes para la historia marciana temprana. Además de proporcionar un mecanismo para la formación de arcillas incluso aún cuando Marte hubiera sido tan frío y helado como sugieren los modelos climáticos, el escenario sugiere la presencia (quizás incluso en la actualidad) de grandes depósitos de arcilla bajo la superficie. Esos depósitos podrían explicar por qué la corteza marciana es menos densa de lo esperado para una corteza basáltica, señalan los investigadores. Los depósitos servirían también como grandes almacenes subterráneos de agua.