Tubos de lava: escondrijos para los hábitats humanos del futuro en la Luna y Marte
3/10/2017 de Europlanet
Tubos de lava, cuevas subterráneas creadas por actividad volcánica, podrían proporcionar hábitats resguardados suficientemente grandes como para albergar calles en Marte o incluso ciudades en la Luna. Además un estudio paralelo demuestra que la próxima generación de orbitadores lunares serán capaces de utilizar radares para localizar estas estructuras bajo la superficie de la Luna.
Los tubos de lava pueden formarse de dos maneras: los tubos con mucha corteza se forman cuando lava de viscosidad baja fluye bastante cerca de la superficie, desarrollando una corteza dura que engorda y crea un techo sobre la corriente de lava que se mueve. Cuando finalizan las erupciones, el conducto se vacía, dejando un túnel a varios metros de profundidad por debajo de la superficie. Los tubos «soplados» son estructuras complejas y profundas que se forman cuando se inyecta lava en fisuras existentes entre capas de roca o cavidades creadas en flujos anteriores. La lava se expande y crea una enorme red de galerías conectadas entre sí a medida que se abre camino hacia la superficie.
Se encuentran tubos de lava en muchas zonas volcánicas de la Tierra, incluyendo Lanzarote, Hawái, Islandia, el norte de Queensland (Australia), Sicilia y las islas Galápagos. Las redes de tubos subterráneas puedan alcanzar los 65 kilómetros. Las misiones espaciales han observado también cadenas de fosas colapsadas y claraboyas en la Luna y Marte que pueden ser interpretadas como indicadores de la presencia de tubos de lava. Recientemente, la misión GRAIL de NASA proporcionó datos de gravedad detallados de la Luna que sugieren la presencia de enormes vacíos subterráneos relacionados con tubos de lava bajo los «maria» lunares, llanuras de basalto formadas en erupciones volcánicas a principios de la historia de la Luna.
«La comparación entre ejemplos terrestres, lunares y marcianos demuestra que, como podrías esperar, la gravedad tiene una gran influencia sobre el tamaño de los tubos de lava. En la Tierra pueden tener hasta 30 m de amplitud. En el ambiente de menor gravedad de Marte, vemos indicios de tubos de lava que tienen 250 metros de ancho. En la Luna, estos túneles podrían tener un kilómetro o más de ancho y muchos cientos de kilómetros de largo», explica el Dr. Riccardo Pozzobon (Universidad de Padua). «Estos resultados tienen importantes consecuencias para la habitabilidad y la exploración humana de la Luna, pero también para la búsqueda de vida extraterrestre en Marte. Los tubos de lava son ambientes protegidos frente a la radiación cósmica y el flujo de micrometeoritos, que podrían proporcionar hábitats seguros para las futuras misiones humanas. También son, en principio, suficientemente grandes como para albergar grandes asentamientos humanos: se podría meter gran parte del centro histórico de la ciudad de Riga en el interior de un tubo de lava lunar».