Las tormenta solares pueden eliminar carga eléctrica sobre la Tierra
11/4/2017 de JPL
Una nueva investigación sobre tormentas solares ha descubierto que no solamente pueden causar regiones de carga eléctrica excesiva en la alta atmósfera sobre los polos de la Tierra, sino que también pueden hacer exactamente lo contrario: provocar regiones carentes casi por completo de partículas con carga eléctrica. El descubrimiento se suma a nuestros conocimientos de cómo las tormentas solares afectan a la Tierra y podría posiblemente conducir a mejoras en los sistemas de navegación y comunicación por radio para el Ártico.
Las tormentas solares a menudo incluyen una erupción en el Sol llamada expulsión de materia de la corona. Se trata de una inmensa nube de partículas con carga eléctrica lanzada al espacio que perturba el campo magnético interplanetario de nuestro Sistema Solar. Cuando estas partículas y las perturbaciones magnéticas se encuentran con el campo magnético de la Tierra, interactúan a través de una serie de procesos complejos y producen perturbaciones en el campo magnético de la Tierra. Esas perturbaciones son las llamada tormentas geomagnéticas. Las interacciones pueden causar zonas inestables con exceso de electrones en la ionosfera, una región atmosférica que empieza a 80 km de altura sobre la superficie de la Tierra y que ya contiene iones y electrones de modo natural.
La tormenta geomagnética estudiada en esta investigación alcanzó la Tierra el 19 de febrero de 2014 y fue resultado de dos potentes expulsiones de materia de la corona dirigidas directamente hacia la Tierra. La tormenta inicialmente produjo regiones de electrones extra en la ionosfera sobre el norte de Groenlandia, como es habitual. Pero justo al sur de esas zonas, los científicos se sorprendieron al hallar amplias regiones de entre 500 y 1000 kilómetros de extensión, donde los electrones habían sido «aspirados» casi por completo, en palabras de Per Hoeg (Universidad Técnica de Dinamarca). Estas áreas permanecieron vacías de electrones durante varios días.
«No sabemos exactamente qué produce la desaparición», explica Attila Komjathy (JPL). «Una explicación posible es que los electrones se recombinan con iones de carga positiva hasta que ya no sobran electrones. Podría también producirse una redistribución, electrones que sean desplazados y alejados de la región, no horizontalmente sino en vertical».