La nave Rosetta registró la erupción de chorros de polvo en 67P/Chruyumov-Gerasimenko
26/10/2017 de Max Planck Institute for Solar System Research / Monthly Notices of the Royal Astronomical Society
Los impresionantes chorros de polvo que los cometas emiten al espacio durante su viaje alrededor del Sol no son producidos solamente por la sublimación de agua congelada. Según un estudio nuevo, otros escenarios posibles incluyen la liberación de gas presurizado almacenado bajo la superficie o la conversión de un tipo de agua congelada en otro energéticamente más favorable.
Cuando el Sol amaneció sobre la región de Imhotep del cometa de Rosetta el 3 de julio de 2016, todo estaba donde debía: a medida que la superficie se calentaba y empezaba a emitir polvo al espacio, la trayectoria de Rosetta condujo la sonda justo a través de la nube. Al mismo tiempo, el campo de visión del sistema de la cámara científica OSIRIS se dirigió, por casualidad, precisamente hacia la región de la superficie del cometa en la que se originó la emisión. Un total de cinco instrumentos de la sonda lograron documentar el fenómeno durante las horas siguientes.
«Fue un asombroso golpe de suerte. Es imposible planear algo como esto», comenta Jessica Agarwal (MPS). Después de todo, las erupciones de polvo aparecen normalmente sin aviso previo. Por tanto, la mayoría de los eventos como éste observados por Rosetta durante sus más de dos años de estancia en el cometa, habían podido ser registrados solo con un instrumento desde lejos. En los casos raros en que Rosetta atravesó por casualidad el chorro de polvo, no se tomaron imágenes del lugar clave en la superficie del cometa. «A partir de los extensos datos medidos el 3 de julio de 2016, hemos conseguido reconstruir el progreso y características de la erupción con más detalle que nunca», explica Agarwal.
En general, los científicos asumen que los gases congelados en la superficie de un cometa, como el agua, son responsables de la producción de polvo. Sin embargo, el estudio actual demuestra que este proceso solo no puede explicar lo que ocurrió el 3 de julio. Con una producción de aproximadamente 18 kg por segundo, el chorro fue mucho más polvoriento de lo predicho por los modelos convencionales. Es concebible, por ejemplo, que bajo la superficie del cometa existan cavidades llenas de gas comprimido. Al amanecer, la radiación calienta la superficie que tienen encima, aparecen fracturas y el gas escapa. O bien existen bajo la superficie depósitos de hielo amorfo, que se transforma en hielo cristalino, un estado energéticamente más favorable, y al hacerlo libera energía.