La gran estrella que no pudo convertirse en supernova
26/5/2017 de The Ohio State University / Monthly Notices of the Royal Astronomical Society
Por primera vez en la historia, un equipo de astrónomos ha sido capaz de observar cómo una estrella agonizante ha renacido como agujero negro. Se apagó con un gemido en lugar de una explosión. La estrella, que era 25 veces más masiva que nuestro Sol, debería de haber explotado como una supernova muy brillante. Pero en cambio, se apagó dejando un agujero negro.
Los «fallos masivos» como éste en una galaxia cercana podrían explicar por qué los astrónomos rara vez observan supernovas en las estrellas más masivas, según explica Christopher Kochanek (The Ohio State University). Hasta un 30 por ciento de dichas estrellas, parece, pueden colapsar silenciosamente en agujeros negros, sin necesidad de supernova. «La imagen típica es que una estrella puede formar un agujero negro sólo después de explotar como supernova», explica Kochanek. «Si una estrella no llega a supernova pero todavía se convierte en agujero negro ayudaría a explicar por qué no vemos supernovas en las estrellas más masivas».
Entre las galaxias que Kochanek y su equipo han estado observando se encuentra NGC 6946, una galaxia a 22 millones de años-luz de distancia apodada la «galaxia de los fuegos artificiales», porque en ella se producen supernovas con frecuencia (de hecho, SN 2017eaw, descubierta el 14 de mayo, está ahora brillando con intensidad máxima). Empezando en 2009, una estrella particular de esta galaxia, llamada N6946-BH1, empezó a aumentar un poco de brillo. En 2015 parecía haber dejado de existir. No pudo ser ya detectada ni con el telescopio espacial Hubble ni con Spitzer.
«N6946-BH1 es la única supernova fallida probable que hemos encontrado en los primeros siete años de nuestro estudio. Durante este periodo, seis supernovas normales se han producido en las galaxias que hemos estado monitorizando, lo que sugiere que entre un 10 y un 30 por ciento de las estrellas masivas mueren como supernovas fallidas», explica Scott Adams (Caltech).