La fusión de una estrella de neutrones supone un nuevo enigma para los astrofísicos
24/1/2018 de McGill / Astrophysical Journal Letters
El brillo del proceso de fusión de dos estrellas de neutrones detectada el pasado agosto continua aumentando, para sorpresa de los astrofísicos que estudian el resultado de la colisión masiva que tuvo lugar a 138 millones de años-luz de distancia y que emitió ondas gravitacionales por el Universo. Las nuevas observaciones realizadas con el observatorio de rayos X orbital Chandra de NASA indican que el estallido de rayos gamma desatado por la colisión es más complejo de lo que habían pensado los científicos inicialmente.
«Usualmente cuando vemos una explosión corta de rayos gamma, la emisión en chorro generada aumenta de brillo durante un corto espacio de tiempo mientras choca contra el medio que la rodea, y luego disminuye a medida que el sistema deja de inyectar energía al chorro», explica Daryl Haggard (McGill University). «Este es diferente; decididamente no se trata de un simple y llano chorro estrecho».
Los datos nuevos podrían ser explicados utilizando modelos más complejos de los restos de una fusión de estrellas de neutrones. Una posibilidad es que la fusión lanzó un chorro que calentó los escombros gaseosos, creando una envoltura caliente alrededor del chorro que ha brillado en rayos X y luz de radio durante muchos meses.