Una megapelícula reunirá las imágenes tomadas por voluntarios del eclipse solar de agosto
22/2/2017 de UC Berkeley
A solo seis meses de uno de los eclipses solares más esperados, la Universidad de California Berkeley y Google buscan científicos ciudadanos que documenten y registren el evento en una «megapelígula» y ayuden a los científicos a aprender cosas sobre el Sol al mismo tiempo.
El Proyecto de la Megapelícula del Eclipse busca más de mil astrónomos aficionados y fotógrafos que registren el eclipse solar total del 21 de agosto y suban sus fotos que serán unidas unas a otras, creando una película que documentará el camino de la totalidad, desde el primer contacto en Oregón hasta que la sombra de la Luna se deslice hacia el océano Atlántico por Carolina del Sur.
Aunque nadie en tierra verá el eclipse total durante más de 2 minutos 40 segundos, dependiendo de lo cerca que se encuentren del centro de la banda de totalidad, las imágenes tomadas por el equipo de voluntarios de la megapelígula será convertida en un largometraje del eclipse de 90 minutos sin precedente. Incluso un avión que viaje por la banda de totalidad puede, como mucho, captar una película de entre cuatro y cinco minutos, ya que la sombra se desplaza sobre el suelo a una velocidad de hasta 2400 km/h. La última vez que alguien intentó encadenar imágenes de eclipse de este modo puede haber sido en el S. XIX utilizando dibujos pintados a mano, sin las ventajas de la tecnología digital moderna.
Los voluntarios serán seleccionados y entrenados por el equipo del Proyecto, pero cualquiera que tenga un teléfono inteligente puede contribuir también. El público podrá descargar una app, que está previsto que se publique en abril, para tomar fotos con código temporal del eclipse y subirlas para ser incluidas en una segunda película de mucha menor resolución.
Ambas películas serán científicamente útiles, según el físico solar Hugh Hudson, que propuso la idea de la megapelícula en 2011 junto con Scott McIntosh. Hudson está principalmente interesado en estudiar la corona solar y su interacción con la cromosfera, más difícil de ver, que se encuentra en la base de la corona. Aunque la corona puede estudiarse con telescopios que bloquean el brillo del disco solar, la delgada cromosfera todavía se pierde entre el resplandor, así que quedan preguntas pendientes como qué hay en la cromosfera que genera los chorros de plasma que se observan en la corona. Las imágenes tomadas justo antes y después de que la Luna cubra el Sol pueden ser científicamente útiles también. El último destello antes de la totalidad y el primero después de ella (produciendo lo que se conoce como el efecto del anillo de diamantes) puede revelar formaciones en la Luna y ayudar a refinar las estimaciones del tamaño del Sol. La app del teléfono móvil será capaz de captar estos destellos automáticamente.