Un revoltijo de estrellas exóticas
11/1/2013 de ESO
Esta nueva imagen infrarroja del telescopio VISTA de ESO, muestra el cúmulo globular 47 Tucanae con un detalle sorprendente. Este cúmulo contiene millones de estrellas, y hay muchas anidadas en su núcleo que son muy exóticas y tienen propiedades inusuales. Estudiar los objetos que se encuentran en cúmulos como 47 Tucanae puede ayudarnos a comprender cómo se forman e interaccionan estos extraños objetos. Esta imagen tiene mucha profundidad y precisión debido al tamaño, sensibilidad y ubicación de VISTA, que se encuentra en el Observatorio Paranal, en Chile.
Los cúmulos globulares son enormes nubes esféricas de estrellas viejas unidas por la gravedad. Se encuentran girando alrededor de los núcleos de las galaxias, como satélites orbitando la Tierra. Estos grupos de estrellas contienen muy poco gas y polvo — se cree que la mayor parte ha sido expulsado del cúmulo por vientos y explosiones de las estrellas que contiene, o que ha sido arrancado por el gas interestelar que ha podido interaccionar con el cúmulo. Cualquier material remanente se fusionó para formar estrellas miles de millones de años atrás.
Estos cúmulos globulares despiertan mucho interés en los astrónomos — 47 Tucanae, también conocido como NGC 104, es un enorme y anciano cúmulo globular que se encuentra a unos 15.000 años luz de nosotros, y es conocido porque contiene muchos sistemas y estrellas extraños e interesantes.
Ubicado en la constelación austral de Tucana (El Tucán), 47 Tucanae orbita nuestra Vía Láctea. De unos 120 años luz de tamaño, es tan grande que, pese a la distancia, parece tan grande como la Luna llena. Alberga millones de estrellas, es visible a simple vista y es uno de los cúmulos globulares más brillantes y masivos de los que se conocen. Entre el revoltijo de estrellas de su núcleo se encuentran muchos sistemas intrigantes, incluyendo fuentes de rayos X, estrellas variables, estrellas vampiro, estrellas rezagadas azules que brillan de un modo inesperadamente “normal”, y diminutos objetos conocidos como púlsares de milisegundo, pequeñas estrellas muertas que giran a una velocidad increíble.