¿Rocosas o gaseosas? Científicos desvelan los misterios de las supertierras
9/2/2018 de Carnegie Institution
Una estrella que se halla a unos 100 años-luz en la constelación de Piscis, GJ 9827, alberga lo que podría ser una de las supertierrras más masivas y densas detectadas hasta ahora. Los datos sobre ella ayudarán a los astrónomos a comprender mejor el proceso por el que se forman los planetas.
La estrella GJ 9827 realmente alberga un trio de planetas, descubiertos por la misión Kepler/K2, y los tres son ligeramente mayores que la Tierra. Éste es el tamaño que la misión Kepler ha determinado que es el más común en la galaxia, con periodos de rotación alrededor de la estrella que van desde varios días a varios cientos de días. No existen planetas así en nuestro Sistema Solar, lo que hace que los científicos sientan curiosidad por las condiciones bajo las cuales se forman y evolucionan.
Una clave importante para determinar la historia de un planeta es determinar su composición. Para ello, los científicos necesitan medir tanto su masa como su radio, lo que les permite determinar su densidad. Al cuantificar los planetas de este modo, los astrónomos se dieron cuenta de que hay una tendencia. Resulta que los planetas con radios mayores que 1.7 veces el de la Tierra poseen una envoltura gaseosa, como Neptuno, y los de radio menor son rocosos, como nuestro planeta. Algunos investigadores proponen que esta diferencia se debe a la fotoevaporación, que arranca de la envoltura que rodea a los planetas las llamadas sustancias volátiles (como el agua y el dióxido de carbono que tienen puntos bajos de ebullición), creando planetas de radios más pequeños. Pero es necesaria más información para comprobar realmente esta teoría.
Las observaciones realizadas por el equipo de Carnegie indican que el planeta b tiene unas ocho veces la masa de la Tierra, lo que le constituye en la supertierra más masiva y densa que se ha descubierto. Las masa de los planetas c y d se estima que son unas dos veces y media y cuatro veces la de la Tierra, respectivamente, aunque con mucha incertidumbre. Esto sugiere que el planeta d posee una envoltura de volátiles importante y deja abierta la cuestión de si el planeta c posee una envoltura volátil o no. Pero los datos para el planeta b sugieren que está compuesto en un 50% por hierro.