Ponen en duda la habitabilidad de Proxima b
28/2/2018 de Carnegie / The Astrophysical Journal Letters
Un equipo de astrónomos detectó una fulguración estelar masiva (una energética explosión de radiación) emitida por la estrella más cercana a nuestro Sol, Proxima Centauri, que ocurrió el pasado mes de marzo. El descubrimiento pone en duda la habitabilidad de nuestro vecino exoplanetario más cercano, Proxima b, en órbita alrededor de Proxima Centauri.
En el máximo de luminosidad, la fulguración llegó a ser 10 veces más brillante que las mayores fulguraciones de nuestro Sol, observadas a longitudes de onda similares. La fulguración elevó el brillo de Proxima Centauri un factor 1000 en solo 10 segundos. Fue precedida por una fulguración menor. Consideradas de forma conjunta, el episodio completo duró menos de dos minutos de las 10 horas durante las que el conjunto de radiotelescopios ALMA observó la estrella entre enero y marzo de 2017.
«Es probable que Proxima b se viera inundada por radiación de alta energía durante esta fulguración», explica Meredith MacGregor (Carnegie Institution for Science), añadiendo que ya se sabía que Proxima Centauri experimenta fulguraciones de rayos X regulares, aunque más pequeñas. «A lo largo de los miles de millones de años transcurridos desde que Proxima b se formó, fulguraciones como ésta podrían haber evaporado cualquier atmósfera u océano y esterilizado la superficie, sugiriendo que la habitabilidad puede implicar algo más que sólo hallarse a la distancia correcta de la estrella progenitora para albergar agua líquida».
Los datos de ALMA han permitido también a los astrónomos observar que no existe una cantidad importante de polvo alrededor de Proxima Cen, y tampoco parece albergar un sistema planetario rico como el nuestro.