Observan un cometa que giraba rápido frenando durante su acercamiento a la Tierra
23/10/2017 de Lowell Observatory

Imágenes del cometa 41P/Tuttle-Giacobini-Kresak, obtenidas el 19 de marzo de 2017 con el telescopio Discovery Channel. La mayor parte de la emisión de la coma ha sido eliminada artificialmente para mostrar la estructura de los chorros. Hay una diferencia de seis horas entre las dos imágenes y ambos chorros están girando en dirección horaria. El débil chorro de la imagen de la izquierda aumenta de intensidad cuando la luz del sol incide sobre esta región, mientras el otro chorro casi desaparece por completo cuando su fuente en el núcleo pasa a la noche. Crédito: Schleicher/Lowell Observatory.
Astrónomos del Observatorio Lowell observaron el cometa 41P/Tuttle-Giacobini-Kresak la primavera pasada y notaron que la velocidad de su giro estaba descendido rápidamente. El equipo de investigadores, dirigido por David Schleicher, estudió el cometa cuando se hallaba más cerca de la Tierra de lo que nunca había estado desde su descubrimiento. El periodo rotacional del cometa se duplicó, pasando de 24 horas a más de 48 horas en seis semanas, un cambio mucho mayor de lo que se había observado nunca en un cometa. Si continúa frenando, podría detenerse completamente y empezar a girar en la dirección opuesta.
El cometa 41P/Tuttle-Giacobini-Kresak es un cometa de periodo corto que ahora completa una órbita alrededor del Sol cada 5.4 años. Descubierto inicialmente por H. Tuttle en 1858, se perdió durante años hasta que fue redescubierto por M. Giacobini en 1907. Perdido de nuevo, fue descubierto por tercera vez en 1951 por K. Kresak, y ahora el cometa lleva el nombre de sus tres descubridores.
Los astrónomos lo tuvieron difícil para estudiar este cometa en detalle hasta principios de 2017, cuando pasó a 21 millones de kilómetros de la Tierra, lo más cerca que había pasado desde su descubrimiento. Con un núcleo relativamente inactivo, cuyo tamaño estimado es de menos de 1.4 km, este cometa fue por fin suficientemente brillante como para realizar una extensa campaña de observación, que permitió estudiarlo con gran detalle durante ocho semanas, entre marzo y mayo.
Cuando un cometa se acerca al Sol y se evapora el hielo de su superficie, se forman chorros de gas y polvo que crean la coma o cabeza y la cola que les distinguen de asteroides y otros cuerpos celestes. Uno de los gases más comunes en los cometas es el radical cianógeno, una molécula compuesta de un átomo de carbono y un átomo de nitrógeno. Schleicher y su colaboradores midieron el movimiento de dos chorros de cianógeno expulsados del cometa 41P/Tuttle-Giacobini-Kresak. A partir de ellos determinaron que el periodo de rotación había cambiado de 24 horas en marzo a 48 horas a finales de abril.
El resultado implica que el cometa tiene una forma muy alargada, densidad baja, y que los chorros están situados cerca del extremo de su cuerpo, proporcionando la torsión necesaria para producir el cambio observado en la rotación.