Hallan pruebas de una conmoción planetaria primitiva
11/9/2018 de Southwest Research Institute / Planetary Science
Investigadores del Southwest Research Institute han estudiado una pareja inusual de asteroides, descubriendo que su existencia apunta a una redistribución temprana de planetas en nuestro Sistema Solar.
Estos cuerpos, llamados Patroclus y Menoetius, son objetivos de la próxima misión Lucy de NASA, Giran uno alrededor del otro y son el único asteroide binario conocido en la población de asteroides troyanos. Los dos enjambres de troyanos que existen giran alrededor del Sol aproximadamente a la misma distancia de nuestra estrella que Júpiter, un grupo por delante y el otro por detrás del gigante de gas.
«Los troyanos fueron probablemente capturados durante un dramático periodo de inestabilidad, cuando se produjo una refriega entre los planetas gigantes del Sistema Solar – Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno», explica David Nesvorny (SwRI). Esta conmoción empujó a Urano y Neptuno hacia afuera, donde se encontraron con una gran población primordial de cuerpos pequeños que se piensa que fueron el origen de los objetos del actual Cinturón de Kuiper, cuyas órbitas están en los límites del Sistema Solar. «Muchos cuerpos pequeños de este Cinturón de Kuiper primordial fueron dispersados hacia el interior y unos cuantos de ellos quedaron atrapados dando origen a los asteroides troyanos».
En este trabajo, los investigadores demuestran que la inestabilidad dinámica entre los planetas gigantes tiene que haber ocurrido durante los primeros 100 millones de años de la formación del Sistema Solar. Si se hubiera producido más tarde, como sugieren algunos modelos de evolución, las colisiones en el interior del disco primordial de cuerpos pequeños habrían destruido estos binarios relativamente frágiles y no habría quedado ninguno que fuera luego capturado convirtiéndose en troyano.