En construcción: una lejana galaxia produce estrellas a un ritmo notable
9/12/2016 de Chandra / The Astrophysical Journal
Este gráfico muestra una simulación por computadora (imagen principal) y datos astronómicos (recuadro) de una galaxia lejana que está sufriendo una extraordinaria explosión de formación estelar. La galaxia, de nombre SPT0346-52, se halla a 12 700 millones de años-luz de la Tierra. Esto significa que la estamos observando en una fase crítica de la evolución de las galaxias, unos mil millones de años-luz después del Big Bang. Crédito: rayos X de NASA/CXC/Univ of Florida/J.Ma et al; óptico de NASA/STScI; infrarrojo de NASA/JPL-Caltech; radio de ESO/NAOJ/NRAO/ALMA; simulación de Simons Fdn./Moore Fdn./Flatiron Inst./Caltech/C. Hayward & P. Hopkins.
Un equipo de astrónomos ha utilizado el observatorio de rayos X Chandra de NASA y otros telescopios para demostrar que una galaxia recientemente descubierta está sufriendo una extraordinaria explosión de construcción estelar. La galaxia se halla a 12 700 millones de años-luz de la Tierra y la observamos en una fase crítica de la evolución de las galaxias, unos mil millones de años después del Big Bang.
Después de que los astrónomos descubrieran la galaxia, conocida como SPT 0346-52, con el Telescopio del Polo Sur (SPT), la volvieron a observar con varios telescopios en el espacio y en tierra. Los datos previos de ALMA revelaban una emisión en el infrarrojo extremadamente brillante, lo que sugería que la galaxia está sufriendo un tremendo brote de nacimiento de estrellas. Sin embargo, existía una explicación alternativa: gran parte de la radiación en el infrarrojo podría estar producida por un agujero negro supermasivo en rápido crecimiento en el centro de la galaxia. El gas que se precipita hacia el agujero negro se calienta y aumenta de brillo, provocando que el polvo y el gas de los alrededores brillen en luz infrarroja.
Pero no han sido descubiertos rayos X u ondas de radio, por lo que los astrónomos han podido descartar que el responsable de la mayor parte de la emisión infrarroja sea un agujero negro. “Ahora sabemos que esta galaxia no tiene un agujero negro voraz sino que brilla intensamente con la luz de estrellas recién nacidas”, afirma Jingzhe Ma (Universidad de Florida). “Esto nos proporciona información acerca de cómo las galaxias y las estrellas de su interior evolucionaron durante algunas de las épocas iniciales del Universo”.
Las estrellas se están formando a un ritmo de 4500 veces la masa del Sol cada año en SPT0346-52, siendo éste uno de los ritmos más altos vistos en una galaxia. Esto contrasta con galaxias como la Vía Láctea que solo forma cerca de una masa solar de estrellas nuevas al año. Este ritmo alto de formación de estrellas implica la presencia de una gran reserva de gas frío en la galaxia que está siendo convertido en estrellas con una eficiencia inusualmente alta.