Un trío de agujeros negros, objetivo prometedor en la caza de ondas gravitacionales
26/6/2014 de University of Cambridge / Nature
Chorros helicoidales salen de un agujero negro supermasivo, producidos por un compañero en órbita muy cercano (ver los puntos azules). El tercer agujero negro es parte del sistema, pero está más alejado y, por tanto, emite chorros relativamente rectos. Crédito: Roger Deane (la imagen grande); NASA Goddard (la caja abajo a la izquierda, que ha sido modificada respecto del original)
Un equipo internacional, que incluye investigadores de la Universidad de Cambridge, dirigido por el Dr. Roger Deane, de la Universidad de Ciudad del Cabo, examinó seis sistemas que se pensaba que albergaban dos agujeros negros supermasivos. El equipo descubrió que uno de ellos contenía tres agujeros negros supermasivos – el trío más cercano de agujeros negros que haya sido detectado a tan gran distancia – con dos de ellos en órbita uno alrededor del otro como en el caso de estrellas binarias. El descubrimiento sugiere que estos agujeros negros supermasivos muy cercanos son más comunes de lo que se pensaba.
El Dr. Roger Deane afirmaba: «Lo que todavía me resulta extraordinario es que estos agujeros negros, que son la manifestación extrema de la teoría de la relatividad general de Einstein, están en órbita alrededor uno del otro a 300 veces la velocidad del sonido en la Tierra. No sólo eso, sino que empleando señales combinadas de radiotelescopios en cuatro continentes podemos observar este sistema exótico situado a un tercio de la distancia al confín del Universo. Esto me entusiasma, pues es sólo rascar la superficie de una larga lista de descubrimientos que serán posibles con el Square Kilometre Array (SKA).»
El equipo empleó la técnica de Interferometría de Larga Base (VLBI) para descubrir los dos agujeros negros interiores del sistema triple. La técnica combina las señales de grandes radioantenas separadas hasta 10 000 km para observar detalles 50 veces más finos de lo que es posible con el telescopio espacial Hubble. El descubrimiento fue realizado con el European VLBI Network (una red de antenas europeas, chinas, rusas y sudafricanas), así como la antena de 305m del Observatorio de Arecibo, en Puerto Rico. Los radiotelescopios futuros como el SKA podrán medir las ondas gravitatorias de este tipo de sistemas de agujeros negros a medida que sus órbitas decrezcan.