Un telescopio gigante observa un lago de lava en la luna Io de Júpiter
5/5/2015 de Large Binocular Telescope Observatory / The Astronomical Journal
La imagen de Loki Patera del LBT (naranja) sobreimpuesta a una imagen de la nave Voyager de la depresión volcánica. La emisión (en color naranja) marca la posición de dos formaciones volcánicas que han entrado en actividad recientemente. Crédito: LBTO-NASA.
Io, la luna más interior de las cuatro de Júpiter descubiertas por Galileo en enero de 1610, es solamente poco mayor que nuestra propia Luna, pero es el cuerpo geológicamente más activo de nuestro Sistema Solar. Cientos de áreas volcánicas salpican su superficie, que está cubierta en su mayor parte por azufre y dióxido de azufre.
La mayor de estas formaciones volcánicas, llamada Loki por el dios nórdico, asociado con el fuego y el caos, es una depresión volcánica llamada patera en la cual la corteza de lava más densa que solidifica sobre un lago de lava de vez en cuando se hunde en el lago, lo que produce un aumento en emisión térmica que ha sido observada con regularidad desde la Tierra. Loki, de sólo 200 km de diámetro y a 600 millones de kilómetros de la Tierra era, hasta hace poco, demasiado pequeño para ser visto con detalle desde un telescopio óptico o infrarrojo instalado en la Tierra.
Con sus espejos de 8.4m instalados en la misma montura y separados 6m, el Gran Telescopio Binocular (LBT de sus iniciales en inglés), combinando la luz con técnicas de interferometría proporciona imágenes con el mismo nivel de detalle que alcanzaría un telescopio de 22.8 m. Gracias al Interferómetro del Gran Telescopio Binocular (LBTI), un equipo internacional de investigadores consiguió observar detalles en Loki Patera nunca antes vistos desde la Tierra. «Combinamos la luz de dos grandes espejos de manera coherente de modo que se convierten en un único espejo extremadamente grande», afirma Al Conrad, director del estudio.
En las imágenes, «dos de las formaciones volcánicas se encuentran en lugares nuevos de actividad», explica Katherine de Kleer, de la Universidad de California en Berkeley. «Están localizadas en una región llamada Colchis Regio, donde una enorme erupción tuvo lugar justo pocos meses antes, y pueden representar las consecuencias de dicha erupción. La alta resolución del LBTI nos permite distinguir sitios activos específicos en la actividad residual de esta región, que podrían ser flujos de lava o erupciones cercanas».