Un estudio de NASA resuelve dos misterios sobre las oscilaciones de la Tierra
13/4/2016 de JPL / Science Advances
La Tierra no gira siempre alrededor de un eje que pasa por sus polos sino que oscila irregularmente con el paso del tiempo, desviándose hacia Norteamérica durante la mayor parte del siglo XX (flecha verde). Esa dirección ha cambiado drásticamente debido a cambios en la masa de agua de la Tierra. Crédito: NASA / JPL-Caltech.
Utilizando datos de satélite acerca de cómo se desplaza el agua por la Tierra, los científicos han resuelto dos misterios relacionados con oscilaciones en la rotación del planeta, uno nuevo y otro con más de un siglo de antigüedad. La investigación podría ayudar a mejorar nuestros conocimientos sobre el clima en el pasado y en el futuro.
Aunque una esfera terrestre de escritorio siempre gira suavemente alrededor del eje que pasa por sus polos norte y sur, un planeta real oscila. El eje de giro de la Tierra se mueve lentamente alrededor de los polos; lo más lejos que se ha ido desde que dieron comienzo las observaciones es 12 metros. Estas oscilaciones no afectan a nuestra vida diaria pero deben de ser tenidas en cuenta para obtener resultados precisos en el sistema GPS, los satélites de observación de la Tierra y los observatorios en tierra.
En un artículo publicado en Science Advances, Surendra Adhikari y Erik Ivins, del JPL de NASA, investigaron cómo el movimiento del agua por el planeta contribuye a las oscilaciones en la rotación de la Tierra. Estudios anteriores habían apuntado a la existencia de muchas conexiones entre procesos en el superficie o el interior de la Tierra y las derivas de nuestro planeta.
Alrededor del año 2000 el eje de la Tierra se volvió bruscamente hacia el este y se desplaza ahora casi el doble de rápido que antes a cerca de 17 cm por año. Los cálculos de Adhikari e Ivins demostraron que las grandes masas de la capa de hielo que se han fundido en Groenlandia y la Antártida no pueden por sí solas generar la enorme cantidad de energía necesaria para empujar el eje de giro tanto como se ha desplazado. Algo al este de Groenlandia debe de estar tirando también. Los investigadores encontraron la respuesta en Eurasia: el déficit de agua en el subcontinente indio y el área del mar Caspio.
Al mismo tiempo, los investigadores han resuelto otro problema inesperadamente. Cada 6 a 14 años, el eje de la Tierra se desplaza entre 0.5 y 1.5 metros hacia el este o el oeste de su dirección general de deriva. Nunca se había podido explicar esta enigmática oscilación. Ahora las observaciones en los cambios de masa del agua en tierra firme entre abril de 2002 y marzo de 2015 permiten predecir la oscilación este-oeste con precisión. El descubrimiento apunta a que el registro de 115 años de las oscilaciones este-oeste en el eje de giro de la Tierra podrían ser también un registro notable de los cambios en las reservas de agua en tierra. “Esto podría decirnos algo sobre el clima en el pasado, si la intensidad de la sequía o las precipitaciones se ha amplificado con el tiempo y en qué lugares”, afirma Adhikari.