Procesos regionales, no globales, causaron las grandes inundaciones marcianas
2/10/2015 de Planetary Science Institute / Nature Scientific Report
Porción central del Osuga Valles donde inundaciones catastróficas en el pasado excavaron canales que desembocan en una región de terreno caótico en la parte inferior de la imagen. Crédito: ESA/DLR/FU Berlin.
Gigantescos afloramientos de agua subterránea crearon los mayores canales de inundación del Sistema Solar en Marte hace 3200 millones de años. Durante mucho tiempo se ha pensado que habían sido producidos por la liberación de agua de una masa de agua global, pero las investigaciones dirigidas por J. Alexis P. Rodriguez del Instituto de Ciencias Planetarias revelan que el origen se encuentra en depósitos regionales de sedimentos y hielo que existían ya 450 millones de años antes.
«La inundación se debe a procesos regionales, no a procesos globales», comenta Rodriguez. «La deposición de sedimento de los ríos y el deshielo de los glaciares rellenó cañones gigantes que se encontraban bajo un océano primordial que se hallaba en las tierras bajas del norte del planeta. Es el agua contenida en los sedimentos de estos cañones la que fue liberada posteriormente causando grandes inundaciones, cuyos efectos podemos ver hoy en día».
Los cañones se llenaron, el océano marciano desapareció y la superficie se congeló durante aproximadamente 450 millones de años. Después, hace unos 3200 millones de años, lava bajo los cañones calentó el suelo, fundió los materiales helados y produjo vastos sistemas de océanos subterráneos que se extendían cientos de kilómetros. Esta agua surgió a la superficie ahora seca causando inundaciones gigantescas.
«Nuestra investigación sugiere que la sedimentación en el Marte primitivo podría haber enterrado y atrapado enormes volúmenes de agua superficial, quizás provocando la transición al mundo congelado que Marte ha sido durante la mayor parte de su historia», comentó Rodriguez. «Las pruebas de ambientes antiguos capaces de mantener formas de vida como las terrestres podrían estar presentes en materiales del subsuelo que ahora están al descubierto».