La vida en la Tierra apareció hace por lo menos 4100 millones de años: mucho antes de lo que pensaban los científicos
26/10/2015 de UCLA / Proceedings of the National Academy of Sciences
Carbono en un circón de 4100 millones de años de edad. Crédito: Stanford / UCLA
Geoquímicos de UCLA han descubierto pruebas de que la vida existe en la Tierra desde hace por lo menos 4100 millones de años, 300 millones de años antes de lo que sugerían las investigaciones anteriores. El descubrimiento indica que la vida puede haber empezado poco después de que se formara el planeta hace 4540 millones de años.
«La vida en la Tierra puede haber surgido casi instantáneamente» comenta Mark Harrison, catedrático de geoquímica en UCLA. «Con los ingredientes adecuados la vida para formarse muy rápidamente». La nueva investigación sugiere que la vida existía antes del bombardeo masivo del Sistema Solar interior que formó los grandes cráteres de la Luna hace 3900 millones de años. «Si toda la vida de la Tierra pereció durante este bombardeo, como sostienen algunos científicos, entonces la vida debe de haber vuelto a empezar rápidamente», añade Patrick Boehnke, estudiante graduado del laboratorio de Harrison.
Durante mucho tiempo los científicos han pensado que la Tierra fue desolada y árida durante ese periodo. Sin embargo las investigaciones de Harrison y sus colaboradores demuestran lo contrario. «La Tierra primitiva con toda seguridad no era un planeta infernal hirviendo; no encontramos absolutamente ninguna prueba de ello», afirma Harrison. «El planeta fue probablemente mucho más como es hoy en día de lo que se pensaba».
Los investigadores, dirigidos por Elizabeth Bell, postdoc del laboratorio de Harrison, estudiaron más de 10 000 circones originalmente formados en rocas fundidas, o magmas, de Australia Occidental. Los circones son minerales pesados y duraderos relacionados con el circonio cúbico sintético usado en los diamantes de imitación. Captan y conservan su ambiente inmediato, lo que significa que pueden servir como cápsulas del tiempo. Los investigadores identificaron un circón de 4100 millones de años de edad que contenía carbono (grafito) en dos lugares. El carbono encontrado tiene una marca característica, una proporción específica de carbono-12 a carbono-13, que indica la presencia de vida fotosintética.