La respuesta está en el viento intergaláctico
17/11/2014 de University of Toronto
Una imagen compuesta muestra la galaxia NGC 4522 en el cúmulo de Virgo, el cúmulo de galaxias grande más cercano a nuestro grupo local de galaxias, y la «onda» de gas y polvo que está siendo arrancada de la galaxia. La galaxia se ve en azul en la imagen tomada en luz visible por el telescopio espacial Hubble. La imagen roja superpuesta son datos de Spitzer y muestra las emisiones del polvo que traza el hidrógeno molecular. Crédito: Suresh Sivanandam; Dunlap Institute for Astronomy & Astrophysics
Astrónomos de la Universidad de Toronto y la Universidad de Arizona han obtenido el primer indicio directo de la presencia de un «viento» intergaláctico que arranca de las galaxias el gas que emplean para formar estrellas mientras se precipitan al interior de cúmulos de galaxias. Las observaciones podrían explicar por qué las galaxias que se encuentran en cúmulos tienen relativamente poco gas y menos formación estelar cuando son comparadas con galaxias de «campo» o que no están en cúmulos.
Los astrónomos habían propuesto la teoría de que cuando una galaxia del campo se precipita al interior de un cúmulo de galaxias, se encuentra con la nube de gas caliente del centro del cúmulo. A medida que la galaxia se desplaza a través de este medio intracúmulo a miles de kilómetros por segundo, la nube actúa como un viento, barriendo el gas del interior de la galaxia sin perturbar sus estrellas.
Anteriormente los astrónomos habían observado cómo el gas de hidrógeno molecular muy tenue rodeando una galaxia era arrancado de ella. Pero se pensaba que las nubes de hidrógeno molecular más densas donde se formarían estrellas serían más resistentes al viento. «Sin embargo hemos descubierto que el gas de hidrógeno molecular también es arrancado de la galaxia que cae» afirma Suresh Sivanandam del Dunlap Institute en la Universidad de Toronto, «de modo muy parecido al humo de una vela que se esparce por una habitación».