Hubble observa una estrella única en su especie apodada «Nasty»
22/5/2015 de Hubble site / Monthly Notices of the Royal Astronomical Society
Esta ilustración de artista revela un vasto disco de gas rodeando a una brillante estrella masiva Wolf-Rayet (mostrada en el centro). Una estrella compañera cercana está arrancando gas de la Wolf-Rayet, como se ve por el puente de material brillante que conecta ambas estrellas. Este acto de canibalismo celeste deja al descubierto el núcleo de helio caliente de la estrella masiva. Sin embargo, parte del material está escapando al espacio, formando el enorme disco. Nunca antes se había visto una estructura de disco alrededor de una estrella Wolf-Rayet. Crédito: NASA, ESA, and G. Bacon (STScI)
Un equipo de astrónomos ha descubierto, con el telescopio espacial Hubble de NASA/ESA, sorprendentes datos nuevos sobre una gran estrella que envejece rápidamente y cuyo comportamiento nunca antes se había observado en nuestra galaxia, la Vía Láctea. De hecho, la estrella es tan extraña que los astrónomos la han apodado «Nasty (malvada) 1», un juego de palabras con su nombre oficial de catálogo, NaSt1. La estrella podría representar una breve fase transitoria en la evolución de estrellas extremadamente masivas.
Descubierta hace varias décadas, Nasty 1 fue identificada como una estrella Wolf-Rayet, una estrella que evoluciona muy rápidamente y que es mucho más masiva que nuestro Sol. La estrella pierde sus capas exteriores de hidrógeno rápidamente, dejando al descubierto su núcleo muy caliente y extremadamente brillante en el que fusiona helio.
Pero Nasty 1 no es como una estrella Wolf-Rayet típica. Los astrónomos esperaban ver lóbulos gemelos de gas fluyendo de extremos opuestos de la estrella, quizás similares a los que emanan de la estrella masiva Eta Carinae, que es una candidata a ser estrella Wolf-Rayet. Sin embargo, las imágenes del Hubble revelaron un disco con forma de torta que rodea la estrella. Este vasto disco tiene casi 3 billones de kilómetros de ancho, y podría haber sido formado por una compañera invisible que se alimentó de la envoltura exterior de la Wolf-Rayet recién formada. Según las estimaciones actuales, la nebulosa que rodea las estrellas sólo tiene unos pocos miles de años de edad y se encuentra a solo 3000 años-luz de la Tierra.
«Estamos entusiasmados por haber visto esta estructura de disco porque puede ser señal de una estrella Wolf-Rayet formándose por una interacción binaria», afirma Jon Mauerhan de la Universidad de California, Berkeley, director de la investigación. «Hay muy pocos ejemplos en la Galaxia de este proceso en acción porque esta fase es breve, durando quizás solo unos cientos de miles de años, mientras que la escala de tiempos en la que el disco resultante es visible podría ser de sólo unos diez mil años o menos».
Según los investigadores, una estrella masiva evoluciona muy rápidamente y, cuando empieza a agotar el hidrógeno, se hincha. Su capa exterior de hidrógeno está menos ligada gravitacionalmente a la estrella y es más vulnerable al despojo gravitacional, un tipo de canibalismo estelar, por la estrella compañera. En ese proceso la estrella mas compacta gana masa y la estrella masiva original pierde su envoltura de hidrógeno, dejando al descubierto su núcleo de helio para convertirse en una estrella Wolf-Rayet. «Pensamos que hay una estrella Wolf-Rayet enterrada en el interior de la nebulosa, y pensamos que la nebulosa está siendo creada por este proceso de transferencia de materia. Este tipo de canibalismo estelar sibilino hace que, de hecho, Nasty 1 sea un nombre bastante apropiado», comenta Mauerhan.