Galaxias en fusión y gotas de nacimiento estelar
11/7/2014 de Hubble
Esta nueva imagen del telescopio espacial Hubble de NASA/ESA muestra dos galaxias del cúmulo SDSS J1531+3414. Se ha visto que estas galaxias están fundiéndose en una sola, y alrededor de los núcleos de las galaxias se observa una ‘cadena’ de supercúmulos estelares jóvenes. Crédito: NASA, ESA/Hubble y Grant Tremblay (European Southern Observatory)
El Universo está lleno de objetos que llegan a la vida, evolucionando y muriendo con muertes explosivas. Esta nueva imagen del telescopio espacial Hubble capta una instantánea de parte de este movimiento cósmico. Situadas en el interior de un anillo azul con forma de huevo en el centro de la imagen encontramos dos galaxias. Se ha visto que estas galaxias están fundiéndose en una sola, y alrededor de los núcleos de las galaxias se observa una ‘cadena’ de supercúmulos estelares jóvenes.
En el centro de esta imagen se encuentran dos galaxias elípticas, que forman parte de un cúmulo conocido como SDSS J1531+3414, cuyas trayectorias se han encontrado. Esta imagen nueva del Hubble muestra claramente por vez primera que la pareja son dos objetos separados. Sin embargo, no serán capaces de mantener sus identidades diferentes durante mucho más tiempo, pues están en el proceso de unirse en una sola.
Encontrar dos galaxias elípticas que se unen es raro, pero es incluso más difícil es encontrar una fusión entre elípticas suficientemente ricas en gas como para inducir la formación de estrellas. Las galaxias de los cúmulos se piensa, en general, que han perdido sus contenidos gaseosos, un proceso que recientemente el Hubble ha podido ver en acción. Sin embargo, en esta imagen no sólo ha pillado dos galaxias mientras se unen, sino que su población estelar recién nacida es también un resultado raro.
Las bebés estelares – que se piensa son resultado del proceso de fusión – son parte de lo que se conoce como formación estelar en «cuentas de una cadena». Este tipo de formación tiene el aspecto de una cuerda punteada de filamentos gaseosos con manchas brillantes de estrellas nuevas, y el proceso surge de la misma física fundamental que provoca que la lluvia caiga en forma de gotas, en lugar de hacerlo como una columna continua.