Un planeta gigante expulsado del sistema solar
11/11/2011 de Southwest Research Institute
Al igual que un jugador de ajedrez experto sacrifica una pieza para protejer a la reina, el sistema solar podría haber renunciado a un planeta gigante para salvar la Tierra, según un artículo publicado recientemente en The Astrophysical Journal Letters.
«Tenemos todo tipo de pistas sobre la evolución primitiva del sistema solar», afirma el autor del estudio, el Dr. David Nesvorny del Southwest Research Institute. «Proceden del análisis de la población transneptuniana de objetos pequeños conocida como Cinturón de Kuiper, y a partir de los registros de cráteres en la Luna».
Estos indicios sugieren que las órbitas de los planetas gigantes se vieron afectadas por una inestabilidad dinámica cuando el sistema solar tenía solo 600 millones de años de edad. Como resultado, los planetas gigantes y los cuerpos más pequeños se alejaron unos de otros.
Sin embargo, este escenario presenta un problema. Cambios lentos en la órbita de Júpiter, tales como los esperados a partir de la interacción con cuerpos pequeños, habrían proporcionado demasiado momento a las órbitas de los planetas terrestres, revolviendo o perturbando el sistema solar interior y posiblemente causando la colisión de la Tierra con Marte o Venus.
«Los científicos sugirieron una solución inteligente a este problema», afirma Nesvorny. «Propusieron que la órbita de Júpiter cambió rápidamente cuando se separó de Urano o Neptuno durante la inestabilidad dinámica en el sistema solar exterior».
Nesvorny realizó entonces simulaciones por ordenador del sistema solar primitivo para comprobar esta teoría. Encontró que necesitaba añadir un quinto planeta gigante con masa similar a la de Urano o Neptuno: un planeta de estos resultaba expulsado del sistema solar por Júpiter, quedando cuatro planetas gigantes, y Júpiter se desplazó dejando tranquilos a los planetas terrestres.