Un pequeño telescopio que llega muy lejos
4/2/2010 de JPL/Nature
Los astrónomos de NASA han demostrado con éxito que un telescopio tipo «David» puede acometer cuestiones del tamaño de «Goliat» en el estudio de planetas similares a la Tierra alrededor de otras estrellas. Su trabajo, anunciado hoy en la revista Nature, proporciona una nueva herramienta para los observatorios instalados en tierra, permitiendo recortar años en la búsqueda de moléculas prebióticas, o relacionadas con la vida, en planetas que giran alrededor de estrellas más allá de nuestro sistema solar.
Los científicos han publicado una técnica nueva empleada en un telescopio relativamente pequeño instalado en tierra para identificar una molécula orgánica en la atmósfera de un planeta del tamaño de Júpiter a casi 63 años-luz de distancia. La medida puso de manifiesto detalles de la composición y condiciones atmosféricas del exoplaneta, un logro sin precedentes desde un observatorio en tierra.
La nueva técnica promete acelerar el estudio de las atmósferas de planetas permitiendo estudios desde el suelo que solo eran posibles previamente con unos pocos telescopios espaciales de alto rendimiento. «Si las condiciones de observación son favorables, este trabajo sugiere que podemos ser capaces de detectar moléculas orgánicas en las atmósferas de planetas terrestres con los instrumentos que ya existen», comenta el autor principal Mark Swain, astrónomo del JPL. Esto permitirá avances rápidos y económicos en estudios centrados en atmósferas de exoplanetas.