Un nuevo mapa del cielo proporciona indicaciones para el GPS
30/10/2009, de NASA
Muchos de nosotros hemos sido rescatados de territorio desconocido gracias a las indicaciones del navegador del Sistema de Posicionado Global (GPS). Los satélites GPS envían señales a un receptor de tu navegador GPS, que calcula tu posición basándose en la posición de los satélites y tu distancia a ellos. La distancia viene determinada por lo que tardan las señales de los diferentes satélites en alcanzar tu receptor.
«Para que el GPS funcione, hay que conocer de forma muy precisa la posición orbital, o efemérides, de los satélites», comenta el Dr. Chopo Ma, del Goddard Space Flight Center de NASA. «Para poder saber dónde están los satélites, hay que conocer la orientación de la Tierra de una manera muy precisa».
Para ello se utilizan lo cuásares, objetos celestes muy brillantes y tan remotos que su movimiento es indetectable. La red de radiotelescopios VLBI los observa con el poder de resolución de un telescopio de miles de kilómetros de diámetro. En el nuevo mapa, las incertidumbres en las posiciones se han reducido a ángulos de hasta 40 microsegundos de arco, aproximadamente el grosor de la mina de un lápiz de 0.7 mm en Los Ángeles cuando es observado desde Washington. Esta incertidumbre mínima es unas cinco veces mejor que la del mapa anterior.