Reflexión gloriosa
17/2/2011 de ESO
La nebulosa Messier 78 es la protagonista de esta imagen tomada con el instrumento Wide Field Imager del telescopio MPG/ESO de 2,2 metros en el Observatorio La Silla, en la Región de Coquimbo en Chile, mientras que las estrellas que encienden esta luminosa nube toman un segundo plano. La brillante luz estelar rebota con las partículas de polvo de la nebulosa, iluminándola con una luz azul dispersa. Igor Chekalin obtuvo el primer lugar del concurso de astrofotografía Tesoros Escondidos de ESO 2010 con su imagen de este impresionante objeto.
Messier 78 es un buen ejemplo de una nebulosa de reflexión. La radiación ultravioleta de las estrellas que la iluminan no es lo suficientemente intensa como para ionizar el gas y hacerlo brillar: sus partículas de polvo sólo reflejan la luz estelar que reciben. Pese a esto, Messier 78 puede ser observada fácilmente con un telescopio pequeño, siendo una de las nebulosas de reflexión más brillantes del cielo, ubicada a unos 1600 años-luz de distancia, en la Constelación de Orión.
Esta nueva imagen de Messier 78, obtenida con el instrumento Wide Field Imager del telescopio MPG/ESO de 2,2 metros en el Observatorio La Silla en Chile, fue creada a partir de los datos que seleccionó Igor Chekalin para producir su imagen ganadora del primer lugar del concurso Tesoros Escondidos.
El azul pálido que se observa en esta foto es una representación exacta del color dominante de la nebulosa. Los tonos azules son comúnmente visibles en las nebulosas de reflexión debido a la forma en que sus diminutas partículas dispersan la luz que reciben: la luz azul, que posee una menor longitud de onda, es dispersada con mayor eficiencia que la luz roja, que posee una longitud de onda más amplia.