Óxido de magnesio: de la Tierra a la supertierra
23/11/2012 de Carnegie Institution / Science Express / Eurekalert
Los mantos de la Tierra y otros planetas rocosos son ricos en magnesio y oxígeno. Debido a su simplicidad, el óxido de magnesio es un buen modelo para estudiar la naturaleza de los interiores planetarios. Un nuevo trabajo realizado por un equipo dirigido por Stewart McWilliams de Carnegie ha estudiado cómo se comporta el óxido de magnesio bajo condiciones extremas a gran profundidad dentro de los planetas, y han encontrado indicios que cambian nuestra comprensión de la evolución planetaria.
McWilliams y su equipo observaron óxido de magnesio bajo presiones entre 3 millones de veces la presión atmosférica normal, y 14 millones de veces la presión atmosférica, y con temperaturas que alcanzaron los 50000 Kelvin (50273 ºC), un abanico de condiciones que incluye las encontradas en el centro de nuestra Tierra y las presentes en grandes exoplanetas supertierras. Sus observaciones indican cambios sustanciales en los enlaces moleculares del óxido de magnesio como respuesta a estas diferentes condiciones, incluyendo una transformación a una nueva fase sólida de alta presión.
A partir de ésta y otras observaciones recientes, el equipo concluyó que aunque el óxido de magnesio es sólido y no conductivo bajo las condiciones de la Tierra hoy en día, el océano de magma primitivo de la Tierra podría haber sido capaz de generar un campo magnético. De modo similar, la fase líquida, metálica del óxido de magnesio puede existir actualmente en los mantos a gran profundidad de los planetas supertierra, así como también la nueva fase sólida observada.
«Nuestros descubrimientos diluyen la línea entre las definiciones tradicionales de material del manto y del núcleo y proporcionan un camino para comprender cómo los planetas jóvenes o calientes pueden generar y mantener campos magnéticos», afirmó McWilliams.