Mirando cuando las estrellas chocan
17/6/2015 de Gemini Observatory / The Astrophysical Journal
Imagen tomada en el infrarrojo cercano del cúmulo globular Liller 1, obtenida con el sistema de óptica adaptativa GeMS del telescopio Gemini South en Chile. Crédito: Gemini Observatory/AURA.
Un equipo de científicos ha tomado imágenes de un cúmulo de estrellas muy oscurecido por material de nuestra Galaxia, en el que las estrellas están tan apretadas que constituye uno de los raros lugares en el que las estrellas pueden chocar. «Es algo así como una mesa de billar estelar, en la que la probabilidad de las colisiones depende del tamaño de la mesa y del número de bolas de billar que hay en ella», afirma Francesco R. Ferraro de la Universidad de Bolonia (Italia).
El cúmulo de estrellas, conocido como Liller 1, es un objetivo difícil de estudiar debido a su distancia y también porque se encuentra situado cerca del centro de la Vía Láctea (a unos 3200 años-luz de él), donde el oscurecimientos por polvo es muy alto. La imagen ultradefinida sin precedentes del cúmulo revela una vasta ciudad de estrellas que los investigadores estiman que tiene una masa total de por lo menos un millón y medio de soles, muy parecido a los cúmulos globulares más masivos de nuestra Galaxia, Omega Centauri y Terzan 5.
«Aunque nuestra Galaxia tiene más de 200 mil millones de estrellas, hay tanto espacio entre las estrellas que existen muy pocos lugares en los que los soles puedan de hecho chocar», afirma Douglas Geisler, de la Universidad de Concepción (Chile). «Las congestionadas y abarrotadas regiones de los cúmulos globulares son uno de esos lugares. Nuestras observaciones han confirmado que, entre los cúmulos globulares, Liller 1 es uno de los mejores ambientes de nuestra Galaxia para las colisiones estelares».
Las colisiones estelares son importantes porque pueden proporcionarnos las claves para entender el origen de objetos exóticos que no pueden ser explicados en términos de la evolución pasiva de estrellas individuales. Los choques casi frontales en los que las estrellas de hecho se funden, mezclando sus combustibles nucleares y reavivando el fuego de su fusión nuclear han sido sugeridos como el origen de por lo menos parte de las llamadas estrellas rezagadas azules (Blue Stragglers).