Los planetas envueltos en helio podrían ser habituales en nuestra Galaxia
15/6/2015 de JPL / Astrophysical Journal
Ilustración de artista. Los planetas con atmósferas ricas en helio podrían ser comunes en nuestra Galaxia, según una nueva teoría basada en datos del telescopio espacial Spitzer de NASA. Crédito: NASA/JPL-Caltech.
No flotarían como globos y no te darían la posibilidad de hablar con voces agudas y chillonas, pero los planetas con cielos de helio pueden constituir una clase planetaria exótica en nuestra Galaxia la Vía Láctea. Investigadores que utilizan datos del telescopio espacial Spitzer de NASA proponen que los planetas templados del tamaño de Neptuno con nubes de helio pueden estar diseminados por la Galaxia a millares.
«No tenemos planetas como estos en nuestro propio Sistema Solar», comenta Renyu Hu, de JPL y director del nuevo estudio aceptado para su publicación en Astrophysical Journal. «Pero pensamos que los planetas con atmósferas de helio podrían ser habituales alrededor de otras estrellas».
Antes de este estudio, los astrónomos habían estado estudiando un número sorprendentemente alto de los llamados neptunos templados en nuestra Galaxia. El telescopio espacial Kepler de NASA ha encontrado cientos de planetas candidatos que caen en esta categoría. Son del tamaño de Neptuno o menores, con órbitas más cercanas a su estrella que la de nuestro Mercurio respecto al Sol. Estos planetas alcanzan temperaturas de más de 1000 grados y completan una órbita alrededor de sus estrellas en tan sólo uno o dos días.
En su nuevo estudio, Hu y sus colaboradores afirman que algunos neptunos templados, y también subneptunos templados, podrían tener atmósferas ricas en helio. Afirman que la proximidad de estos planetas a sus ardientes estrellas haría hervir el hidrógeno de sus atmósferas. «El hidrógeno es cuatro veces más ligero que el helio, así que desaparecería de las atmósferas planetarias, haciendo que adquirieran una mayor concentración de helio con el tiempo», afirma Hu. «El proceso sería gradual, tardando hasta 10 mil millones de años en completarse».