Las dramáticas horas finales de ISON
17/7/2014 de ESA
Un nuevo análisis de datos tomados por la nave espacial Solar and Heliospheric Observatory (SOHO) de ESA/NASA ha revelado que el cometa 2012/S1 (ISON) dejó de producir polvo y gas poco antes de que pasara por el Sol y se desintegrara.
Cuando el cometa ISON fue descubierto en otoño de 2012, los astrónomos esperaban que acabaría iluminando el firmamento, convirtiéndose en un «cometa del siglo». El análisis orbital demostró que el rasante solar intruso procedente de las afueras del Sistema Solar pasaría a tan sólo 1.2 millones de kilómetros por encima de la superficie visible del Sol el 28 de noviembre de 2013.
Sin embargo, durante la fase final de acercamiento al perihelio (el punto de la órbita más cercano al Sol) la cola del cometa se fue debilitando. Quedó claro que la actividad de ISON había cesado, o que el núcleo se había desintegrado por completo.
Investigadores del Instituto Max Planck de Investigación del Sistema Solar (MPS) han empleado ahora las observaciones del instrumento Solar Ultraviolet Measurements of Emitted Radiation (SUMER) de SOHO para reconstruir el comportamiento del cometa durante sus horas finales. Los investigadores han llegado a la conclusión de que el cometa dejó de producir polvo y gas horas antes del perihelio. Pero no puede asegurarse con certeza que el núcleo se desintegrara, comenta Hermann Böhnhardt, del MPS. Sin embargo, varios indicios indican que esto es lo que ocurrió.