Hubble descubre que la Vía Láctea produce un viento de 3 millones de kilómetros por hora
7/1/2015 de Hubble Site
Este gráfico muestra cómo el telescopio espacial Hubble estudió la luz procedente de un lejano cuásar para analizar las llamadas «burbujas de Fermi», dos lóbulos de material que está siendo expulsado del núcleo de nuestra galaxia la Vía Láctea. La luz del cuásar atravesó una de las burbujas. En esta luz quedó impresa información sobre la velocidad del material expulsado, su composición y su masa. La expulsión de material fue provocada por un suceso violento que tuvo lugar hace unos dos millones de años en el núcleo de nuestra galaxia. Crédito: NASA, ESA, and A. Feild (STScI)
En la época en que nuestros primeros ancestros humanos acababan de aprender a caminar de pie, el corazón de nuestra Galaxia la Vía Láctea sufrió una erupción titánica, expulsando gases y otros materiales a 3 millones de kilómetros por hora. Ahora, al menos 2 millones de años más tarde, los astrónomos están siendo testigos del resultado de la explosión: enormes nubes de gas que alcanzan los 30 000 años-luz de tamaño por encima y por debajo del plano de nuestra galaxia.
La enorme estructura fue descubierta hace cinco años como un resplandor en rayos gamma en el cielo en dirección al centro galáctico. Las formaciones con forma de globo han sido observadas desde entonces en rayos X y ondas de radio. Pero los astrónomos necesitaron del telescopio espacial Hubble de NASA para medir por primera vez la velocidad y composición de los misteriosos lóbulos. Ahora pretenden calcular la masa del material que está siendo expulsado de nuestra galaxia, lo que podría ayudarles a determinar la razón de la explosión, decidiendo entre varios escenarios distintos posibles.
El equipo de Andrew Fox, del Space Telescope Institute, ha conseguido medir el gas de la parte de la burbuja que se está dirigiendo hacia la Tierra y la del gas de la parte que se está alejando. Los espectros muestran que el gas se aleja velozmente del centro galáctico a unos 3 millones de kilómetros por hora.
Una de las posibles causas de la expulsión de material es la frenética formación de estrellas cerca del centro galáctico que produce supernovas, que a su vez expulsan gas. Otra posibilidad es que se trate de una estrella o grupo de estrellas que se precipitan hacia el agujero negro supermasivo de la Vía Láctea. Cuando esto ocurre, el gas calentado a muy altas temperaturas por el agujero negro es expulsado al espacio profundo. Debido a que las burbujas viven poco tiempo en comparación con la edad de nuestra galaxia, esto sugiere que puede tratarse de un fenómeno recurrente en la historia de la Vía Láctea. Sea lo que sea lo que lo produce, probablemente ocurra de vez en cuando, quizás sólo cuando el agujero negro traga material.