Explicada (en parte) una gran mancha fría en el fondo cósmico de microondas
21/4/2015 de Institute for Astronomy/ Monthly Notices of the Royal Astronomical Society
La región de la Mancha Fría se encuentra en la constelación de Eridanus en el hemisferio sur galáctico. Los recuadros muestran esta zona anómala del cielo cartografiada por el equipo de Szapudi usando datos de PS1 y WISE y observada en los datos de temperatura del fondo cósmico de microondas tomados por el satélite Planck. El diámetro angular del vasto supervacío alineado con la Mancha Fría, que excede los 30 grados, está marcado con los círculos blancos. Gráficos de Gergő Kránicz. Imagen de la Colaboración Planck de ESA.
En 2004 los astrónomos que examinaban un mapa de la radiación resultante del Big Bang (el fondo cósmico de microondas o CMB de sus iniciales en inglés) descubrieron la Mancha Fría, un área del cielo mayor de lo esperado e inusualmente fría. Ahora un equipo de astrónomos dirigido por el Dr. István Szapudi del Instituto de Astronomía de la Universidad de Hawái en Manoa puede haber encontrado una explicación para la existencia de la Mancha Fría, que podría ser según Szapudi «la mayor estructura individual jamás identificada por la humanidad».
Si la Mancha Fría fue producida por el propio Big Bang podría ser una rara señal de física exótica que la cosmología estándar no explica. Si, por el contrario, es producida por una estructura que se encuentra entre nosotros y el CMB, sería señal de que hay una estructura de gran escala extremadamente rara en la distribución de materia del Universo.
Empleando datos del telescopio Pan-STARRS1 (PS1) y del satélite Wide Field Survey Explorer (WISE) de NASA, el equipo de Szapudi descubrió un gran supervacío, una vasta región de 1800 millones de años-luz de ancho, en el que la densidad de galaxias es mucho menor de lo habitual en el Universo conocido. Este vacío fue encontrado combinando observaciones tomadas por PS1 en longitudes de onda del óptico con observaciones tomadas por WISE en longitudes de onda del infrarrojo para estimar la distancia y posición de cada galaxia en esa parte del cielo. El supervacío se encuentra a sólo 3 mil millones de años-luz de distancia de nosotros, una distancia relativamente pequeña en el esquema cósmico.
Aunque la existencia del supervacío y su efecto esperado sobre el CMB no explica por completo la Mancha Fría, es muy poco probable que el supervacío y la Mancha Fría se encuentren en el mismo lugar por casualidad. El equipo continuará su trabajo con datos mejorados del PS1 y del Dark Energy Survey que se está realizando en Chile para estudiar la Mancha Fría y el supervacío, así como otro gran vacío situado cerca de la constelación de Draco.