Estaño-100, un núcleo doblemente mágico
21/6/2012 de TU München / Nature
Pocos minutos después del Big Bang el universo no contenía otros elementos más que hidrógeno y helio. Físicos de la Technische Universitaet Muenchen (TUM), el Cluster of Excellence “Universe” y el Helmholtz Center for Heavy Ion Research (GSI) han logrado producir estaño-100, un elemento muy inestable y a la vez muy importante para comprender la formación de los elementos más pesados. Los investigadores anuncian sus resultados en la edición de esta semana de la revista científica Nature.
El estaño estable, tal como lo conocemos, comprende 112 partículas nucleares, 50 protones y 632 neutrones. Los neutrones actúan como una especie de amortiguador entre los protones que se repelen eléctricamente y evitan que el estaño normal se desintegre. De acuerdo con el modelo nuclear de capas, 50 es un «número mágico» que produce propiedades especiales. El estaño-100, con 50 protones y 50 neutrones, es «doblemente mágico», lo que le hace particularmente interesante para los físicos nucleares.
Disparando iones de xenon-124 contra una lámina de berilio, el equipo internacional dirigido por físicos de TU München, the Cluster of Excellence Origin and Structure of the Universe y el GSI en Darmstadt consiguieron crear estaño-100 y analizar su desintegración posterior. Utilizando detectores de partículas especialmente diseñados, fueron capaces de medir la vida media y energía de desintegración del estaño-100 y sus productos de desintegración. Sus experimentos confirmaron que el estaño-100 posee la desintegración beta más rápida de todos los núcleos atómicos, tal como había sido predicho por los físicos teóricos.