El rover lunar Yutu de China encuentra que la geología lunar es más compleja de lo que se pensaba
16/3/2015 de Phys.org / Science
Un equipo de investigadores que trabaja en la misión lunar Chang’E-3 de China ha encontrado múltiples capas de roca diferentes bajo la superficie de la Luna, indicando una historia geológica mucho más compleja de lo que pensaba la comunidad científica. En su artículo publicado en la revista Science, el equipo describe su análisis de los datos enviados por el rover Yutu.
El 14 de diciembre de 2013, la nave espacial Chang’E-3 de China alunizó en la superficie de la Luna. Unas pocas horas después del alunizaje, un rover llamado Yutu (Conejo de Jade)salió de la nave y emprendió una trayectoria en zig-zag por el terreno cercano. A bordo de rover viajaban varios sensores. Uno de ellos era el radar Lunar Penetrating Radar (LPR), capaz de estudiar la superficie lunar hasta 400 metros de profundidad. El rover captó datos del subsuelo aproximadamente durante un mes antes de que se apagase por problemas técnicos.
En este nuevo informe, los investigadores que estudiaron los datos enviados por el rover anuncian que LPR reveló nueve capas de roca diferentes bajo la superficie, indicando una historia geológica mucho más compleja de lo que predecían las teorías. Las capas son debidas, aparentemente, a flujos de lava que se mezclaron con regolito (polvo lunar transformado por erosión). Los datos enviados por Yutu son los primeros que revelan datos del subsuelo. Durante las misiones Apollo se emplearon taladros para recoger muestras de roca del subsuelo, pero sólo penetraron hasta una profundidad de tres metros.
Los científicos destacan que al estudiar las capas de roca han realizado dos importantes descubrimientos. El primero es que los indicios muestran que la Luna tuvo mucha mas actividad volcánica de lo que se pensaba. El segundo es que una zona bajo estudio mostró que además del basalto contenía rocas piroclásticas, una indicación de actividad explosiva. La mayoría de los investigadores que han estudiado la Luna pensaban que gases volátiles atrapados en el manto escapan cuando la Luna todavía estaba en formación. Los nuevos descubrimientos sugieren que esto no ocurrió.