El róver Curiosity estudia un meteorito de hierro de aspecto extraño
4/11/2016 de JPL
Esta imagen coloreada del instrumento ChemCam del róver Curiosity muestra una red de puntos brillantes donde ChemCam ha disparado pulsos láser para determinar los elementos químicos que lo componen. Crédito: NASA/JPL-Caltech/LANL/CNES/IRAP/LPGNantes/CNRS/IAS/MSSS.
El estudio con láser de un objeto del tamaño de una bola de golf en Marte por parte del róver Curiosity de NASA confirma que es un meteorito de hierro-níquel caído desde el cielo del Planeta Rojo.
Los meteoritos de hierro-níquel son una clase común de rocas espaciales que se encuentran en la Tierra, y ya anteriormente se habían hallado algunos ejemplos también en Marte. Pero este en particular, llamado la «Roca Huevo», es el primero que ha sido observado con un espectrómetro laser. Para ello, el equipo de control del róver utilizó el instrumento Cámara y Química (ChemCam) de Curiosity.
ChemCam encontró hierro, níquel y fósforo, más otros ingredientes menores, en concentraciones que todavía están siendo determinadas mediante el análisis del espectro de luz producido por docenas de pulsos láser en nueve puntos del objeto. El enriquecimiento tanto en níquel como en fósforo en algunos de esos puntos sugiere la presencia de un mineral de hierro-níquel-fosfuro que es raro, excepto en los meteoritos de hierro-níquel, según Pierr-Yves Meslin (IRAP).
Los meteoritos de hierro se originan típicamente como material del núcleo de asteroides que se fundieron, permitiendo que la fracción fundida de metal del asteroide se hundiera hasta su centro y formara un núcleo. «Los meteoritos de hierro proporcionan registros de muchos asteroides que se rompieron, con fragmentos de sus núcleos que acaban en la Tierra o en Marte», comenta Horton Newsom (Universidad de Nuevo México). Además, el estudio de los meteoritos de hierro encontrados en Marte – incluyendo ejemplos anteriores hallados por los róveres marcianos – puede proporcionar información acerca de como les ha afectado su larga exposición al ambiente marciano, comparando con como el ambiente de la Tierra afecta a los meteoritos de hierro.