Lo efímero y lo transitorio. Una ecuación del tiempo
Artista: Merche Pereira
Cuando el Sol culmina superiormente es mediodía solar. El centro del Sol cruza el meridiano local, que une el polo norte celeste con el polo sur pasando por el cenit del observador. Podemos ver la proyección sobre la losa como una línea recta que marca exactamente la dirección Norte-Sur: la línea meridiana. Cada día, la luz del Sol que pasa a través del círculo que corona el tótem forma una pequeña elipse iluminada sobre la losa. Cuando su centro atraviesa la línea meridiana es mediodía solar.
Pero el Sol no se mueve por el cielo a un ritmo constante a lo largo del año, puesto que su movimiento aparente es consecuencia del movimiento de la Tierra en su órbita elíptica alrededor del Sol. De acuerdo con la segunda ley de Kepler, la Tierra se mueve más rápidamente cerca del perihelio, el punto de su órbita más próximo al Sol (3 de enero), que en el afelio, cuando se encuentra más alejada del Sol (5 de julio). Además, la órbita de la Tierra está inclinada respecto al ecuador: el hemisferio norte terrestre se inclina hacia el Sol entre el equinoccio de primavera (21 de marzo) y el de otoño (22 septiembre), y en sentido contrario la otra mitad del año.
Para medir el tiempo y que este fluya de manera uniforme, los astrónomos definieron el sol medio, un sol ficticio que recorre el ecuador celeste a velocidad constante y da una vuelta a la Tierra cada 24 horas. El tiempo que usamos en la práctica se basa en este tiempo solar medio, que depende de la ubicación geográfica. Si nos situamos sobre el meridiano de Greenwich, se trata del tiempo universal coordinado (UTC, por las siglas en inglés; anteriormente, tiempo medio de Greenwich o GMT). El tiempo civil en Valencia es UTC+1, aunque de momento se añade una hora en horario de verano.
La diferencia entre el tiempo solar verdadero y el tiempo solar medio es la ecuación del tiempo. Si a lo largo del año anotamos la posición del Sol en el cielo a una misma hora de tiempo solar medio, obtendremos una figura en forma de ocho, denominada analema, que no es sino un diagrama de la ecuación del tiempo que muestra gráficamente en el cielo la diferencia entre el tiempo solar verdadero y el tiempo solar medio cada día del año (ver la imagen de la derecha).
A las 13:00 h (14:00 h en horario de verano si hay cambio de hora estacional), la luz del Sol que atraviesa el centro del círculo en lo alto del tótem marca un punto sobre la losa que va describiendo una figura de ocho elongado a lo largo del año: la proyección de la analema celeste. En el analema dibujado sobre la losa se han marcado los días del año, por lo tanto esta construcción es, en realidad, un calendario solar. Dado que esta instalación no está situada exactamente sobre el meridiano de Greenwich, aparece también una ligera desviación de todo el analema respecto a la línea meridiana que, en esta posición, corresponde a 102 segundos.
En la losa se han añadido las constelaciones sobre las que se encuentra el Sol en cada momento del año. Como se puede observar no coinciden con la posición de los signos del zodiaco, también incluidos, debido a la precesión de los equinoccios. Además, como cada constelación zodiacal, marcadas con líneas verdes, tiene un tamaño diferente, el sol está sobre cada una un periodo variable de días que va desde los 7 días en Escorpio hasta los 45 en Virgo, mientras que el Sol permanece un mes en cada signo, marcados con líneas rojas.

Constelaciones correspondientes a mediodía civil del 11 de diciembre, con el Sol situado sobre la constelación de Ofiuco. El analema representa la posición del Sol a mediodía civil a lo largo del año. El cielo está calculado para las coordenadas del tótem, por ello el meridiano local, representado en verde, no está alineado con el analema, a causa de la diferencia de longitud entre las coordenadas locales y el meridiano de Greenwich para el cual está definida la hora civil. En naranja claro se representa la eclíptica.
Programa CULTURA RESIDENT/RESIDIR EN LA INVESTIGACIÓ del Vicerectorat de Cultura i Societat de la Universitat de València
Línea de investigación: ASTROFÍSICA EXTRAGALÁCTICA Y COSMOLOGÍA
Equipo: Vicent J. Martínez (IP), Amelia Ortiz Gil, Fernando J. Ballesteros, Alberto Fernández Soto, Juan Fabregat, Pablo Arnalte Mur y Enric Marco.

